Esposa de mentira??

extra 4

Cosas de mi dulce, perfecto y delicado amorcito

Xuanlu callo enferma, su marido tubo que quedarse en casa a cuidarla, Xuanyu se llevó al pequeño Peixin con ellos, pues era una enfermedad muy contagiosa, temian que el bebé se contagiará y no pudiera resistirla, así que prevenir es mejor que lamentar, Yibo con todo el dolor de su corazón, tubo que tomar el mando de su empresa, pues su amado, dulce y cariñoso bombón de amor, le dió una advertencia muy amorosa y amable.

Si no trabajas como se debe negro, cuando nazcan estás bebés, que cargo eni vientre juro que no te permitiré volver a preñar me.

Lo que mi cielito mandé, este esclavo, será el mejor trabajador que se haya presentado a trabajar en ese muladar, así que con la motivación correcta, salía de su casa de madrugada, jajajajaja pobetitoooo ne ti papito, decía Yuan acariciando la melena de su padre, que lloraba todas las mañanas, antes de partir a su oficina, tatee tantilooo papiii, Yuan cuílala la cata, tu tabata muto, mutooo, pala compal mutos tutetes, pala bebé ne pantita ne mamiii.

No te has ido ya, Yibo amor mío, le dijo el doncel al ver que su marido hacia drama para no ir al trabajo, Yibo levantó la mirada hacia su esposo, lo envolvió en una mirada cachonda, llena de exitacion, su yiboconda se animó, levantando la carpa en los pantalones de su portador, para que su dueño viera, que si quería, podía jugar un ratito más, con su amada almejita bebé, servía que decía hola, a las nenas dentro de la matriz de su amado dueño.

Si eres hombre, lárgate de una puta ves, maricon de mierdaaaa, la yiboconda se arrugó dentro del calzon de Yibo, el maridito se levantó de golpe, corrió por su vida, ese demonio no era su esposo, era belcebú reencarnado, Yiyi eres un traidor, le daba una palmada a su miembro maricon, como a veces lo llamaba su dulce esposa.

Nada más se ponen feas las cosas y se te arruga la berruga, decía Yibo a su pene que no había dejado de arrugarse más, dentro de su zona de protección,unos ojos veían la acción desde lejos,  el ayudante de madam Wang para el cuidado de su salud  (el enfermero pero no sé lo digan por que se enfada), que le impusieron el doctor y su macho opresor, para mantenerlo relajado, sin estrés y al pendiente que no hiciera actividades de mucho esfuerzo.

La última ves que se excedio, dándole su merecido al viejo Su, estubo en cama casi un mes, su esposo casi lincha a la familia entera por hacer que su presiosa esposa ahora estubiera en cama con una sonda de suero en su tierno bracito, el doctor y el lo acorralaron para que aceptara ayuda, un asistente médico, para que vigilara cada paso que daba, dentro de la casa, le decía cuando veía, que no era saludable hacer alguna cosa, que dañará su cuerpo.

El joven Wen Ning, era un estudiante de medicina, su tío era el ginecólogo de Xuanyu, desde que vio a ese hermoso doncel, callo en las redes de amor por el, lastima que era casado, se veía que sus hijos amaban a su padre, pero con el tiempo noto, que el hombre trataba un poco brusco a su esposa, le hacía pasar muchas vergüenzas con sus invitados, siempre metiéndole mano descaradamente y el pobre doncel solo se ponía rojo como una remolacha.

El joven médico veía todo el espectáculo desde la sala, con Yang en sus brazos, era obvio que ese doncel tan perfecto, no merecía un marido tan inútil, el en sus adentros, sentía que era mejor opción para ese hermoso doncel, tan joven tan sexi, tan ardiente y tan pero tan rico, pues se había enterado por las chismosas de las sirvientas, que toda la fortuna del anterior señor Wang, había sido transferida a el.

Joven señora ya es hora de su hidroterapia, le dijo Ning al doncel,  venga conmigo a qué se ralaje un poco,  tienes razón Ningning vayamos a esa cosa de una buena ves, le contesto el doncel con una radiante sonrisa, el enfermero se le lleno el corazón, de más amor por esa bella criatura.

Cuando lo arrebatara de las garras de ese hombre bruto, le haría conocer el verdadero paraíso con su amor dulce, protector y tierno, el doncel le dió órdenes a sus ayudantes ustedes lleven a los niños a desayunar primero, por favor, le dijo Xuanyu a las niñeras de sus hijos y del pequeño Peixin.

Yibo llegó a su oficina, se dedicó a trabajar, se reunió con sus colaboradores para tener todo en orden, Xuanlu no daba señales de mejorar, de hecho el ya había pedido a su abogado el señor Liu que buscará algún doctor bueno allá en china para que viniera a revisar a su amiga, hasta que recibió una llamada de su casa.

Yibo tomo el teléfono,apenas iba a contestar, cuando alejo el aparato de su oído, pues se oyó un fuerte ruido como de algo rompiéndose en pedazos, que está pasando allá, pregunto el hombre exaltado, señor Wang , madam está en el área de piscina, está rompiendo todo lo que alcanza a cargar, para poder sacar al joven Wen de uno de los vestidores.

Continua... en el Extra 5