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En norte américa Yibo estaba en pleno fuego cruzado, uno de los clientes nuevos trajo consigo a otro amigo, que según ellos quería también mercancía de la que le conseguían al hombre, así que se reunieron en un club nocturno, para pactar la cantidad y el precio de dicha mercancía, Hao, Ji Yang, iban como su escolta y Yizhou y Zanjin como sus consejeros pues ellos también eran la mano derecha de Yibo en esos temas tan delicados.

Desafortunadamente, las cosas no salieron tan bien, como lo tenían previsto,pues resultó ser una emboscada para meterle mano al Bowang, la policía quería para aplacar las olas de violencia, que en la cuidad se estaban dando, debido a una sustancia alucinogena que se salía de control, al ser manipulada por los consumidores, todo apuntaba a ese maldito traficante.

Mientras tanto en su casa Ying trataba de dormír, pero estaba tan caliente, que nada lo hacia conciliar el sueño, su pancita creció tanto en los últimos días, como si hubiera metido las palomitas al microondas, estaba más que preñado, de ese macho opresor, tenía tres meses de embarazo.

Se rindió al final, se levantó de la cama, bajo a la planta baja, cruzo el jardín para meterse a la piscina techada, que había en la casa, últimamente si su esposo no estaba para bajarle la calentura, esa era la única opción que le quedaba, para bajar su temperatura.

Oyó gritos, maldiciones y demás en el interior de la casa, salió de la piscina para ver qué diablos hacian esos hombres, para provocar tanto escándalo, si llegaron borrachos, les bajaría la borrachera a manguerazos, pero lo que encontró no era ni cercano a lo que pensó.

Hao estaba tirado en el piso, se veia que sangraba mucho, pues se estaba haciendo un charco de sangre en el piso, a Yibo lo pusieron en el asiento, también sangraba pero en menor intensidad, Yizhou caminaba de lado a lado maldiciendo y jalandose los pelos de la cabeza, su esposo estaba mal herido también.

Mi amor resiste, la ayuda no tarda, por favor no cierres tus ojos, decía Ji Yang a su marido,este en el momento de oírlo escupio borbotones de sangre, ponlo boca abajo o podría ahogarse con su propia sangre, grito el doncel corriendo hasta donde estaban los heridos, Yizhou ves a la recamara trae sábanas, tu ves a la cocina y pon agua a hervir, Yibo que tan mal te sientes , pregunto a su esposo, estoy bien, duele pero lo soporto.

Ji Yang y Yizhou se quedaron en su lugar, que diablos esperan, que ni se mueven idiotas, sus esposos morirán, si por los menos no les damos los primeros auxilios, vayan a dónde los mandé, Yizhou corrió hasta la planta alta,  Ji Yang hasta la cocina.

Ying rompía la ropa de Hao, para ver qué tan herido venía, tenía dos heridas de bala, una en su hombro y otra en un costado, lo acostó de lado, con uno de los cojines debajo de su cabeza, luego con la misma ropa hizo un bulto y lo apretó en su costado.

Ya está el agua, Ji regreso de la cocina, aprieta aquí no sueltes, su hombro no es vital pero aqui si, has presión hasta que vengan las sábanas, ahora se dirigió a Zanjin este solo tenía una herida en la pierna, pero sangraba mucho de seguro tocó alguna arterial se quitó la bata, amarro de las mangas,  con una pata de la mesa le dió vuelta hasta apretarlo lo suficiente, para que dejara de sangrar, aquí están las sábanas, llegó Yizhou corriendo, sujeta este palo no lo sueltes vuelvo en seguida.

Yibo estaba más enamorado, de ese chico, no sabía cómo es que podía hacer de todo, sin perder la concentración, el mismo al ver tanta sangre perdió la compostura un poco, ni que ver a su hermano que era un hombre roca, este se desmoronó al ver a su esposo herido.

Mientras su chico, estaba ayudando a sus hombres en una contingencia, que ni siquiera era asunto suyo, el chico era una joya en verdad, Ying regreso  al poco rato, con ayuda de Yizhou llevaron al cuarto de servicio a Hao que era el más delicado, luego llevaron a Zanjin y al final a Yibo, lo acomodaron en uno de los asientos de la sala, para que todos estubieran en el mismo cuarto.

Limpio las heridas de todos empezando por el, ya que eran superficiales, no quería arriesgarse a que Hao y Zanjin comenzarán a sangrar de nuevo, vendo con las tiras de sábanas esterilizada en agua caliente y alcohol,  cuando llegó el equipo médico, les pidieron que salieran del cuarto para poder atenderlos sin ningúna distracción.

Yizhou se abrazo al doncel, gracias cuñado, no se que hubiera pasado si tú no tomas el mando de esto, el hombre grande lloraba a mares, abrazando al doncel que se veía tan pequeño al lado, de ese gran cuerpo, calma todo estara mejor ahora, le contesto ying dando palmaditas en su espalda.

Ven vallamos a qué tomes un baño, bueno a qué tomemos un baño, no es bueno que sigamos en estás condiciones, le pediré a una de las sirvientas que te busque algo de ropa de Yibo, seguro encontrará algo que no te quede tan justo, tu vienes conmigo le dijo al otro, somos de la misma talla nos bañaremos juntos así ahorramos tiempo.

Unas horas después, ya estaban todos en la casa del Bowang, sus hombres de confianza llegaron a resguardar la casa, mientras los atendían, por qué después de eso seguramente, Yibo querría destruir el nido de hormigas, que lo traicionaron, era 100 por ciento seguro, que  lloverá sangre en Nueva York.

Esposa de mentira??Donde viven las historias. Descúbrelo ahora