5. Te amo incluso si te haré daño.

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11:00
Estaba tan agotado, su garganta dolía y sus caderas también, luzu lloro hasta que se deshizo del dolor en el pecho, y hasta terminar fuera del estómago de su omega con esperanzas de que ya no le siguiera torturando. Quackity acariciaba su cabeza peinando su cabello usando los dedos al hacer una trenza chiquita de color castaño.

–Te debo una disculpa, luzu– musito terminando de arreglar su cabello para empezar con el propio suyo. Luzu levantó la mirada posando su atención.

–Cuando era pequeño, mi madre solía menear la cadera en dirección a cualquier tipo millonario o incluso hacía mis tios, cada vez que se generaba una violenta pelea entre mis padres por lo mismo le solía preguntar directamente porqué lo hacía– añadió –Siempre me contestaba con una caricia brusca en la mejilla: "Así funciona el amor en los adultos"

–Por supuesto creo que engañar descaradamente a alguien no se trata de amor adulto, pero mi relación con Wilbur se basaba en lo mismo y a veces incluso que con toda la terapia sigo haciéndole daño a personas con eso, no quería crecer con este concepto erróneo, sólo no sé qué hacer para cambiarlo– suspiró terminándose de peinar su cabello.

–Podrías empezar por poner límites, ¿no crees?– respondió luzu –Los dos, en pareja.

Le miró atento.

–Mañana después de nuestro día podríamos hacer un tiempo para hacer una lista mental de lo que no deseamos que pase en nuestras amistades, por ejemplo; yo no deseo más afecto innecesario sabes...

– ¡Pero sí eso lo hago con todo el mundo! Para mí resulta que me ocultas algo– exclamó.

–Es complicado, no veo intenciones negativas en los demás o en ti cuando pasa, jschlatt es ultra súper raro– usó un tono dramático.

–Sí, tal vez– río –Pero lo conozco y él no sería capaz de verme con esos ojos.

–Eso dicen todos y luego le pondrás "Eduardo" a su hijo.

–¡Yo no le pondría un nombre tan feo a un niño!

Luzu jadeó fingiendo ofenderse.

–Incluso así, se lo diré, luzu, nunca más te volveré hacer sentir de esta manera– sujetó su barbilla mostrándole una sonrisa energética, llena de pasión, tan tierna como para querer vivir viéndola aparecer, tal cual reaparece el sol cada madrugada.

–Gracias– respondió apoyando su frente en la suya –De verdad, significa mucho para mí, si alguien puede por primera vez respetar lo que deseo.

Quackity se mantuvo silencioso, una lágrima traspasó su mejilla derecha, se cubrió el rostro tratando de esconder la pena. Asintió repetidas veces antes de abrazar a luzu con una fuerza sofocante.

–Ehh, quackity, me vas ahogar!– se quejó al sentir como el aire era escaso, sin embargo, no se alejó.

–Perdóname, es sólo que imaginarte sin sentir que tus deseos importan me rompe el corazón, hubiera deseado estar ahí!– sollozó, un llanto delicado, pero a la vez tan escandaloso para que te dolieran los oídos y creyeras que era un niño.

Yo creo que en realidad, quackity seguía siendo uno en su mayoría.

–No hubiera sido divertido, en esos tiempos era mucho peor...– río en voz baja.

Quiero saberlo todo– pronunció dramáticamente forzando la voz más grave que tenía, como si de la nada sus lágrimas desaparecieron por completo.

–Bueno, alfa– bromeó –Tenía todo mi ropero de color negro o blanco, usaba zapatillas todo el tiempo, rasgaba mis pantalones de forma horrorosa, usaba sombras oscuras, me hice el piercing del labio gracias a fargan, me lo hizo horrible...mi cabello cubría la mitad de mi maldita cara y tenía un tinte del demonio color negro.

ⁱ ᵈⁱᵈ ⁱᵗ ᶠᵒʳ ˡᵒᵛᵉ. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora