Una vida Stereo - Fanfic

Capítulo 10 - La primera vez

-Escuchame una c... -Gustavo comenzó a hablar pero Zeta le tapó la boca sabiendo que se venía una escena.

-¿Qué? -Pil Trafa se dio vuelta confundido y se dirigió a Gustavo dejando olvidada completamente Meli quién se acomodaba de nuevo el pelo. La tensión en el aire se cortaba con tijeras. Incluso los de la otra banda se dieron vuelta curiosos de la situación.

-Me llamo Melisa, ¡es un gusto! -La chica de cabello oscuro frunció levemente el ceño hacia Gustavo y este revoleó los ojos en cuanto logró quitar la mano cayosa de Zeta de su cara.

-Mirá vos, precioso nombre. ¿Está Melisa disponible para una cerveza? O prefiere ¿soda?

Clara escupió de su trago y no pudo evitar reírse, ya se le había subido algo de alcohol a la cabeza.

-¡Boluda! -Zoe se corre porque le había llegado parte de la bebida a su ropa.

Zeta llevó la mano a su boca. No había que ser un genio para darse cuenta de lo que quiso decir Pil Trafa con la selección de bebidas. Por lo que Melisa comenzó a reír suavemente. Charly miró a Gustavo que no sabía si tenía cara de querer pegarle al cantante de Los Violadores o si se iba a poner a llorar.

-Prefiero la soda, la cerveza está bien pero me quedo con la soda, gracias por la invitación!

Pil Trafa asintió algo decepcionado y se fue para el lado de su banda.
Gustavo soltó un suspiro de alivio que hubiera preferido que Melisa no notara, pero lo hizo y esta lo miró con mucha ternura. El de rulos miró a un costado con un leve rubor en sus mejillas poniendo las manos en sus bolsillos con aspecto molesto. Para cambiar de tema miró la hora y se dirigió a su grupo.

-En 45 minutos tocamos, vayamos a prepararnos. Clara, intenta no tomar mucho más hasta ese momento.

Y así, los seis se dirigieron tras bambalinas para cambiarse y comenzar a preparar el escenario con el resto del equipo. Ya había gente gritando el nombre de la banda en el público. Los carteles de Soda Stereo comenzaban a aparecer tímidamente. El escenario estaba lo suficientemente alto cómo para preocuparse de que alguien quisiera sobrepasarse.

Decidieron que por ser la primera vez y al no ser un lugar tan masivo, las chicas iban a solamente hacer los coros en distintas canciones.

-¿Estás bien? -Se acercó Zeta a Gustavo mientras terminaban de arreglarse las camisas.

-Si boludo, apenas tomé.

-Ese es el problema.

Gustavo decidió dejar su pecho un poco al descubierto y se apoyo contra la pared con pintura negra resquebrajándose.

-Es la primera vez con las chicas, esto es nuevo para ellas y para nosotros es nuevo andar con ellas. Seguro me relaje después de tocar pero hoy prefjero estar lúcido.

-Todo va a estar bien. Vas a ver. -Charly se acercó escuchando la conversación de lejos.

-¡Ya estamos! -La voz de Zoe sonó del otro lado cuando golpeó suavemente al camerino de los chicos.

Los Soda a los cinco minutos abrieron la puerta con camisas de seda bordada distinto color. Zeta llevaba una verde, Charly una azul y Gustavo una roja. Todos llevaban pantalones de vestir tiro alto negros y borcegos de cuero.

Las chicas llevaban una onda más informal, pero no demasiado. Plataformas negras, jeans rasgados y blusas de mangas caídas dejando ver sus hombros y parte de sus ombligos. Clara vestía un naranja intenso y vibrante que combinaba con su maquillaje, mientras que Zoe había escogido el violeta. Melisa una de color rojo haciendo juego con su labial rojo sangre.

-Están... -Los chicos comenzaron a hablar al verlas.

-Muy apuestos! -Melisa terminó la frase.

Las chicas rieron cómplices mirándolos de arriba abajo. Charly y Zeta sonrieron nerviosamente mientras que Gustavo le guiñó un ojo a Meli.

Llegó el momento de tocar. El trío se subió al escenario y todo el océano de cabezas debajo de ellos comenzó a generar olas ruidosas de euforia y excitación.

-¿Cómo están esta noche? -Preguntó Gustavo al micrófono en una voz seductora luego de darle una bocanada de aire a su cigarrillo.

Las chicas de las primeras filas comenzaron a gritar como locas, una empezó a sentirse mal y tuvieron que sacarla al momento que Gustavo apareció ante sus ojos debajo de las luces azuladas y violáceas del escenario.

Otras, algunas adolescentes con sus padres, vociferaban los nombres de Zeta y Charly.

Las chicas se miraban unas a otras detrás del escenario.

-Estoy nerviosa chicas... Es un montón de gente. -Dijo Zoe comiéndose las uñas.

-Amiga, llegamos hasta acá, todo lo que pasaste con tus papás, lo pudiste superar y nuestros sueños... Cumpliéndose. Nos va a ir bien, te prometo que todo va a estar genial. -Meli la miró a los ojos con un brillo especial a lo que Clara se acercó a ellas y se dieron un abrazo reconfortante entre las tres.

-¡Las amo chicaaas! ♡ -Dijo Clara dándole un sorbo a un vaso de cerveza que encontró por ahí.

De vuelta en el escenario, Gustavo ya había dicho unas palabras más, pero faltaba algo...

-Cómo muchos aquí presentes sabrán, hemos expandido nuestro equipo...

La multitud se enloqueció nuevamente.

-Nos hemos encontrado con tres mujeres... Con un gran talento, genuino y de gran corazón. Por favor, denle una calidísima bienvenida a... ¡Melisa Castro, Clara Lucía Domínguez y Zoe Diaz!

Las chicas salieron una detrás de la otra y se acomodaron en la parte central del escenario. Todo el público las aplaudió, pero los que realmente celebraron su entrada fueron los chicos quienes no podían quitar las sonrisas de sus rostros.

-Ellas nos irán acompañado en el camino musical que recorreremos esta noche. Tenemos mucha sorpresa, pero sobre todo...

-¡Vitaminas! -Exclamó Melisa el micrófono ubicándose para ser la primera corista de la noche. Zoe y Clara le sonrieron para esperarla detrás del escenario.

La primera noche realmente, recién, comenzaba.