Camino libre, casi

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Tres días después del encuentro con Mousse

Todo está muy calmado, y eso altera a Ranma, quien en su desesperación no paro de entrenar, además de siempre estar en vigilancia, rondando la casa y nunca durmiendo en el mismo lugar.

El caso es que hasta el sueño ha perdido. Siempre la misma pesadilla: estar casado con Shampoo. El joven era conciente que ella aprovecharía cualquier momento para atacarle con alguna pócima, hechizo, hilo o pastilla que le obligará a enamorarse de ella.

No podía bajar la guardia.

Akane está ahora sentada en su escritorio con la vista perdida en la ventana. De vez en cuando ve al joven correr por el muro que limita la vivienda, en su ya rutinaria vigilia.

Pensamientos de Akane

Me preocupa mucho que esté así, desde esa tarde no come nada si no lo prepara él mismo. Además que no duerme casi nada, siempre le escucho correr de aquí para allá... No tenía idea de lo mucho que le preocupa lo de Shampoo. Pensé que en esto era yo la más nerviosa... Él decidió entrenarme, y por las tarde nos tomamos un par de horas para mejorar mis combates. Me enseñó algunos trucos... creo que se preocupa por mi y es algo lindo de su parte. Ojalá esté asunto pronto acabe... por su bien.

Narrador

Al cabo de su divagación, ella se pone de pie, guarda sus cuadernos donde su tarea está ya terminada y sale de su habitación para ir a la cocina y ayudar a Kasumi con la cena.

Sale al pasillo pero no sé percata de una presencia que corre por el pasillo.

-¡Akane Tengo, hoy ser el fin de tu compromiso!- grito la amazona mientras saltaba par atacar.

Ranma aparece por la puerta de Akane (ya que al ver a la intrusa el entro por la ventana del cuarto de la joven) y toma en sus brazos a la chica peli-azul. La levanta y evita que el ataque llegue a ambos.

Al verlos, Shampoo saca un incienso de su bolsillo que enciende de inmediato y con un abanico lanza el humo hacia los dos.

-Esto ser Incienso del Rencor- dijo mientras se colocaba una máscara que evitaría el contacto con el aroma.

Ranma sin soltar a Akane bajo las escaleras y decido salir al patio. Pero al ver que su padre entraba y abría la puerta corrediza, oyó un click de activación de un mecanismo.

De inmediato una soga se rompió y dejo caer sobre el hombre una cubeta de agua fría, convirtiéndolo en panda.

-Esta ser agua de Preservación... El no convertir en hombre sin antídoto...-

-¡Dejame adivinar! Lo usarías conmigo y me obligarías a casarme contigo... ¡Pero no te resultó!- grito el joven mientras salía al patio para huir.

Akane de mientras no sabía que hacer, el rubor no dejaba sus mejillas al sentir tan de cerca a su prometido.

De pronto, un montón de envases de cristal cayeron al suelo liberando un gas color violeta que se eleva con rapidez. Ranma se cubre la nariz y Akane le sigue.

El salta al tejado de la casa y baja a su compañera.

-Akane, debes esconderte... querrá lastimarte y no quiero que me estorbes...-

Casi de inmediato sintió un golpe en su cabeza.

-No escaparé, voy a ayudarte... Te guste o no, también es mi pelea...- respondió ella con seguridad, pero fue interrumpida.

-No me oyes... podría lastimarte, o peor, te podría hechizar. ¡Por favor, hazme caso!- la preocupación se notaba en sus ojos.

-¡Siempre tienes que ser tan orgulloso!, ¿es por eso que no me dejas ayudar? ¿Por qué tú orgullo no te permite recibir la ayuda de una chica?-

Deseo Vivir a tu LadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora