Estoy cansada

capitulo 13

Cada día Viktor sacaba sangre a Jinx para así poder saber como funciona la sangre en ella.

Apenas hablaban pero eso no evitaba que Viktor notara la tristeza de Jinx, cada vez que la observaba ella miraba atentamente por la ventana o a veces simplemente a la nada.

Ese dia antes de volver a casa compro una peluca de color negro y un traje masculino.

- ¿Te apetece salir? -. Dijo mientras ocultaba las bolsas detrás de él y miraba fijamente a Jinx -. Tengo una peluca y ropa para ti.

Jinx le miraba con extrañeza.

- Creo que debería darte el sol de vez en cuando, que solo te de el sol cuando atraviesa la ventana no es suficiente... ademas creo que ayudara a distraerte.

Jinx se levanto sin decir nada cogió las bolsas y se fue al baño. Después de unos minutos vistiendo unos pantalones negros que le quedaban un poco grandes, un camisa blanca y encima un chaleco de color crema.

Su pelo pelo azul esta tapado por una peluca negra

- Ahora soy un hombre -. Intento bromear.

No hubo respuesta de Viktor, todo era tan confuso.

Cuando salieron Jinx pudo sentir esa paz que tanto ansiaba, pero solo duro unos segundos. Analizo detalladamente donde estaba, como había acabado ahí, y de ahí empezó a recordar todo su pasado.

Y se deprimió, no escuchaba para nada lo que le decía Viktor solo pensaba en literalmente todas las desiciones de su vida.

Veía a niños correr mientras sonreían, a otros tomar un helado, a unos simplemente pasear de la mano con su madre. Miraba lo que era la inocencia, la verdadera inocencia y felicidad.

"¿Alguna vez yo fui inocente?, ¿Acaso yo pude experimentar lo que era vivir en la ignorancia?"

Ella sabía la respuesta y eso la comía por dentro.

- ¿Oye? -. El grito de Viktor e saco de su trance.

- ¿Si? -. Dijo desorientada.

- Te preguntaba si querías un helado, he visto que mirabas a unos niños comiendo helado. Pensaba que querías uno.

- No, solo miraba la actitud de los niños.

No hablaron más, de nuevo todo era silencio y paz o al menos para jinx era paz. Viktor sentía una enorme ansiedad, pues notaba la soledad de su acompañante. 

Él notaba como Jinx miraba aquellos niños, como los miraba con cierta envidia y vació. Y lo comprendía, paso por lo mismo cuando llego aquí.

El vació que sientes al saber que tu vida es completamente diferente a la de estos niños solo por haber nacido en lugares diferente. El vació de saber que ellos nunca sintieron hambre, que jamas sintieron miedo de los vigilantes. El vació de saber que ellos jamas sentirán lo que es sentirse desprotegído.

Pero tampoco sentía que podía darse de aires de grandeza, por haber nacido en las mismas condiciones que él. A diferencia de Jinx, el pudo salir de ahí.

Y por eso piensa que es el menos indicado para consolarla, o que no tiene derecho ni a pensar en hacerlo en primer lugar.

Su camino fue corto y al regresar al departamento, Jinx se quito la peluca y la tiro al suelo. Camino de forma rápida y segura y se en cerro en el baño.

Viktor no trato de ir tras ella y averiguar lo que le pasa, porque de nuevo siente que no tiene derecho alguno en ser su confidente emocionalmente.

Jinx estaba en el baño, pero no estaba sola.

Mientras ella estaba sentada en el vater, una versión de ella con el pelo largo y con una de las armas que creo en su mano estaba echada en la bañera mientras sonreía.

- ¿Por que estas aquí? -. Pregunto sin ganas y sin fuerzas.

- Porque no quieres verlo a él, y en su lugar estoy aquí -. Volvió a reinar el silencio -. ¿De verdad quieres huir? 

- Necesitamos irnos de aquí, así seremos libres, ¿no?

- No has respondido bien la pregunta -. Aquella Jinx dejo de jugar son su arma y miro a nuestra protagonista -. ¿Quieres irte o necesitas huir de lo que ahora mismo es nuestra vida?

- Quiero irme.

- No me mientas, somos la misma persona y se lo que pasa -. Salió de la bañera -. Dices que estas harta de sentirte mal y que quieres empezar de 0, que quieres vivir y ser feliz pero tu y yo sabemos la verdad.

Jinx mira a su versión de dos trenzas y sintió el nudo.

- Ya lo se.

- Pues dilo.

Jinx salió del baño dejando a su otra yo ahí de pie.

No lo iba decir, no lo iba a pensar. Se quería engañar y quiere vivir engañada en su propia mentira.

Porque la realidad ya le ha hecho mucho daño.

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Perdón si es corto, pero ahora escribiré más seguido, así que actualizare más seguido