A ESTO SE LE LLAMA DESTINO

Capítulo 11: En una nube

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***Yona***

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Cuando voli a ser consciente de mí misma me di cuenta de que me sentía sofocada, como si algo o alguien me estuviera aplastando. Poco a poco comencé a abrir los ojos, el cuarto aun se encontraba oscuro pero aun así me acostumbré rápido, lo primero que vi fue el pecho de Hak, una de mis manos lo estaba rodeando en un abrazo, cuando quise separarme me di cuenta el porque me encontraba tan sofocada, él también me tenía pegada a él en un abrazo. Al ver que no podría hacerlo de manera delicada, preferí concentrarme en otras cosas.

Su rostro estaba tranquilo, como cuando por fin puedes descansar después de toda una semana de trabajo, me dio un poco de risa notar su cabello tan desarreglado y me di la oportunidad de pensar que esta oportunidad solo era para mí, que fuera la única que podría verlo de esta forma.

Mientras que me perdía en su rostro comencé a pensar muchas cosas. Había dormido con alfas antes, pero por más que tratara de recordar nunca en mi vida me había sentido de esta manera. Tan ligera, tan tranquila y sin ningún sentimiento de querer huir. ¿Pero en que estaba pensando? No tenía ningún derecho de sentirme de esa manera, yo estaba en contra de este tipo de acciones ¿Y qué fue lo que hice? Le ofrecí sin pensar que nos acostáramos. ¿Cómo debería de reaccionar después de esto? ¿Debería solo hacer que no pase? Aunque quisiera no podría, hasta le había dicho lo de la marca, peor aún, me había acostado con el alfa que casi me marca.

Mi cabeza estaba hecha un lio, debería de cortar toda relación con Hak antes de que se me salga de la manos. Pero algo mucho más fuerte que yo me impedía hacer eso, ya ni siquiera sé si podría vivir lejos de su aroma. De él. De nuevo me di un golpe mental por pensar ese tipo de cosas.

-¿Qué me estás haciendo Hak?- lo solté como un susurro, para después acariciar suavemente su mejilla, hubiera seguido hipnotizada a su cuerpo de no haber sido porque sentí como tomaba mi mano de su mejilla y después le depositaba un leve beso.

-Qué manera más suave de despertarme- sus ojos me miraban fijamente, mientras que yo sentía como se me subían los colores al rostro, quite rápido mi mano y él se rio por lo bajo de mi reacción. Lo que más rogaba era que no me hubiera escuchado lo que dije hace unos instantes.

-Si ya te encuentras despierto, quisiera que me liberaras, llevo un rato tratando de liberarme y pareciera que tu objetivo era mantenerme aquí- de nuevo note como sonrió y después aligero el agarre

-Tal vez lo era- fingí no escucharlo y después me hice a un lado hasta que me enderecé, quedando sentada en la cama. Y como si el universo no estuviera totalmente satisfecho en avergonzarme, la sabana no siguió el camino conmigo dejando al descubierto mi espalda desnuda, obviamente sentía la mirada de Hak sobre mi cuerpo.

-¿Podrías al menos no mirarme fijamente?- no podía verlo, pero estoy segura de que se estaba riendo de mí.

-Lo dice la persona que antes estaba sobre mi pidiéndome atención- no pude evitar sonrojarme y enojarme por su comentario, pero cuando estaba a punto de aventarle algo sentí como mi vista se oscurecía por las sábanas que habían caído sobre mi- tomate tu tiempo, se lo cansado que puede estar tu cuerpo, yo iré a preparar algo de comer princesa- como pude enrolle la sabana a mi cuerpo y saque mi cabeza

-Te dije que no me gusta que me llames así, además, ¿Ya te encuentras bien?- estaba quitando el pelo de mi cara tratando de tener mejor visión, cuando lo hice un Hak con el torso desnudo y unos pan estaba frente a mí.