El nuevo plan de Lilith.

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NARRA LILITH.

No me malentiendan. De ninguna manera pensaba manipular a Amity para que se acercara a la humana, eso lo haría ella misma poco a poco. Nunca había visto que alguien además de mí pudiera acercarse tanto a Amity Blight como yo, ni siquiera el par de idiotas que tenía por hermanos. Sin embargo, me agradaba que la humana fuera capaz de sacar el lado bueno de Amity y acercarse a ella. Podría espiarla sin que ninguna de las dos se diera cuenta y en el momento perfecto, atacar. De Eda me encargaría después, pero parecía que ya tenía cubierto el asunto de la humana. Si de algo puedo presumir, es de ser más astuta que mi hermana. Siempre fue así, y siempre lo sería.

Un día, fui ante el emperador Belos. Había convocado a una reunión muy importante con los líderes de todos los aquelarres. Él nunca haría eso a menos que fuera realmente urgente. Llegué puntual como siempre y me paré al lado de Belos. Incluso sentado, se veía más alto que los demás, cosa que me aterraba si soy sincera.

-Amigos y amigas mías-dijo Belos arrastrando las palabras escaneando a todos los presentes, quienes parecían nerviosos-. Bienvenidos sean a esta reunión extraordinaria.

Hizo aparecer imágenes de los recientes delitos cometidos por mi hermana.

-Si miran aquí, las capturas de Edalyn Clawthorne, mejor conocida como la Dama Búho, no cumplen las estimaciones...-me miró de forma inquisitiva, y yo apenas pude aguantarle la mirada-. Así como tampoco lo han hecho la captura y petrificación de las demás brujas salvajes.

-Mi señor, créame que estamos...

-Mientras hablamos, una rebelión se está formando en este momento-todos lo miramos sorprendidos-. No sé quiénes, ni en dónde están, pero sé que están bien organizados, y atacarán en cualquier momento.

-¿Está seguro, mi señor?-preguntó Raine, líder del aquelarre de los bardos.

-¿Por qué creen que los mandé llamar si no lo estuviera? Estas brujas salvajes intentan resistirse a mi poder, y su desobediencia podría llevarnos al caos, y el caos dará lugar a una guerra. ¿Eso es lo que quieren?

-No-respondieron todos.

-¡Entonces qué están haciendo aquí! ¡Un grupo de brujas salvajes fue visto hace menos de diez minutos dirigiéndose hacia los bosques del Norte! ¡Vayan con los guardias a investigar, y quiero resultados, o los petrificaré a todos!

-S-sí mi señor.

Todos salieron casi volando del lugar, totalmente aterrados. Yo también me iba.

-Tú no, Lilith-dijo Belos-¿Dónde está tu hermana? Prometiste traerla ante mí.

-Mi señor, le juro que he hecho todo lo posible por capturarla.

-Pues parece que no has hecho lo suficiente-incluso con los ojos ocultos bajo su máscara, podía sentir la mirada penetrante de Belos, escanéandome.

-Mi señor...

-Viniste a mí suplicándome una cura para la maldición de tu hermana, mas ella no quiere aceptar mi ayuda y tú no has podido traerla ante mí. Tal vez no te importa lo suficiente.

-Mi señor, le aseguro que...

-O tal vez me has traicionado.

-¡Le juro que no es así, mi señor!

No esperaba ponerme a gritarle al mismísimo emperador. Pensé que se enfurecería, pero al final no fue así.

-Discúlpame, estoy un poco paranoico estos días con todo este asunto de una resistencia en el reino. Pero eso no cambia el hecho de que no seas capaz de capturar a Eda.

Mi verdadera mamá.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora