¿Una revolución vendrá así como un desafio para el mundo podrá un joven con la ayuda de todos aquellos que lo siguen afrontarlo?
La siguiente historia cuenta la travesía de un joven llamado Bell Cranel que busca ser un héroe y recorre el mundo al ig...
Tengo hambre en cursiva son lineas de pensamiento y cosas ya pronunciadas.
"Y así aprendió la lección" las comillas de énfasis son para frases y citas únicas así como señalar importancia.
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Anteriormente:
Gracias por todo, ahora me voy- hablo con señal de despedida tanto a su abuelo como a su hogar- es hora de que haga mi camino.
Actualmente:
Tras decir esas palabras Bell comenzó su partida sin marchar y mirar atrás pues ya había tomado una decisión de la cual ya no podría acobardarse o retractarse. Así Bell emprendió su partida. Tenía un destino en concreto el cual era llegar a Orario cuanto antes.
La idea surgió cuando su abuelo le contó que era la ciudad de los sueños y más como que es la única ciudad que cuenta con un calabozo en el mundo además de que muchos se hacen aventureros con tal de explorarla esperando cumplir sus anhelos, ambiciones, sueños y demás. Sin embargo, la verdadera razón era para encontrar un dios que le permitiera unirse a su familia para así darle su bendición que es el falna para hacerse más fuertes al explorar la mazmorra y subir de nivel.
Bell tenía el conocimiento suficiente dicho por su abuelo de cómo funcionaba el falna y más o menos como eran las cosas en Orario así como los lugares recomendables y demás. Visto y planeado ya su destino empezó a marchar sin rumbo atrás. Todo con el fin de acercarse a su sueño.
Para llegar a su destino tenía que pasar por el bosque que frecuentaba cuando era niño, pero que dejo de hacerlo luego del incidente del goblin por petición de su abuelo y en parte el mismo dejo de hacerlo porque esa experiencia le quedo como trauma que no quería revivir. Así que respirando y exhalando hondo se adentró.
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Sin mucho en que pensar solo miraba a los alrededores iluminado por la luz de la luna acompañado con leves ruidos ocasionado por el choque de las ramas y de algunos insectos.
El chico seguía su camino que por suerte estaba trazado, aprendió por consejos de su abuelo como guiarse correctamente y por las marcas que dejaba en algunos árboles para no perderse.
Ver esas marcas le traía recuerdos tanto los que le causaban nostalgia como tristeza recordar pues la razón por la que venía a este lugar era para olvidar en primer lugar aquello que lo ponía triste y en ese entonces solo había una cosa que lo puso así. Sin embargo, agito su cabeza y se dijo a si mismo que no es momento de lloriqueos o lamentarse sobre leche derramada es mejor seguir adelante y cumplir su sueño de ser un héroe.
Siguió caminando sin mirar atrás, sin distraerse y sin preámbulos. Hacia adelante Bell seguía su camino. El tiempo pasaba donde los segundos se volvieron minutos, los minutos horas y aun así todavía no amanecía.
En algún punto Bell se detuvo a reposar y miro por detrás solo por curiosidad solo para ver que ya ni se miraba su hogar solo apreciándose los árboles del bosque y nada más.
