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Se sentía un poco mejor, haberle dicho y que él lo tomara bien, había sido aliviador, aunque al principio entro en crisis por el miedo, pero Taehyung siempre buscaba la manera de hacerle saber cuándo lo amaba, que sienta todo ese amor sano, iba a poner de su parte para tener más confianza en él, la tenía, pero a veces el miedo lo abordaba.

Los próximos días se quedó en su casa, tenía la necesidad de estar a su lado, aunque en el día casi no se veían, pero al menos en la noche podía estar con él, por otro lado, no había tenido tantos malestares, eso era bueno, no quería tener que pasar malos ratos.p9t la comida haciendo a Tae preocuparse demasiado, ya suficiente tenía con el trabajo en la empresa.

El día de la pasarela estaba a solo dos semanas, todo estaba listo, solo estaban viendo los últimos detalles, revisando las prendas que serían exhibidas, los modelos, el banquete también era lo último, pero Jimin había reservado al mejor, así que de eso no había que preocuparse, solo tenía que llegar el día y listo.

Llegar a su casa y ver a Jungkook dormido en la cama, era el sentimiento más bonito, sus hijos estaban en el cuarto de películas, podía escuchar el sonido del juego de Mario Bross hasta su habitación, era el juego que más les gustaba, aunque Dae perdía seguido, eso no evitaba que se siente a jugar con su hermano.

Entro a darse un ducha rápida, al salir se asomo a la ventana viendo a la señorita Eun salir con Sheisan al parque, ya que los responsables de eso estaban entretenidos con la consola, ella se encargaba de sacarlo a pasear o se pondría a llorar.

Se acostó a lado del pelinegro que, como si entre sueños lo sintiera, se giro a abrazarlo, Kim sonrió acercándolo más, sobreponiéndose un poco para dejar un par de besos en su cuello, era su manera de despertarlo lentamente, siempre funcionaba, el azabache empezó a removerse hasta abrir los ojos lento.

Eso sí, cómo si el decirle que estaba embarazado, había hecho que el dormir jamás sea suficiente, tenía sueño todo el día, a toda hora, que a veces lo vencía, cómo ese día, había prometido a los niños jugar con ellos, pero se había dormido y ellos al verlo decidieron no despertarlo, hay que aclarar que aún no sabían del embarazo.

-Um, Tae – musito apretando los ojos para despertarse bien, él hizo un sonido de afirmación, riendo al ver cómo despertaba, era tan bonito, lo atrajo a su pecho para besarlo, empezando a manosear su espalda y cintura.

-Duermes demasiado estos días, que hay del trabajo – cuestionó en sus labios, yendo de su mejilla a su mandíbula y cuello, atrayendo su pierna a su cadera.

-Seokjin dijo que descanse unos días, él es quien más se toma en serio mi estado, diciendo que debo cuidarme los primeros meses, y yo no puedo luchar contra el sueño – respondió, apartándose un poco cuando sintió la mano del castaño entrar por su ropa tocando su pierna, sus ojos viéndose fijamente.

-Tae – susurro en advertencia mirando a la puerta, el rozó su entrepierna apenas, apoyándose en su otro brazo quedando muy cerca de sus labios.

-Ellos están jugando, no creo que se despeguen del televisor en unas dos horas, es suficiente tiempo, por favor, es que si tú estás aquí, es difícil mantenerme tranquilo, tu cuerpo me llama – indagó persuasivo, ahora su mano amasaba una de sus nalgas, rozando su entrada de vez en cuando, es que con él, su libido había aumentado de manera increíble, Jungkook respondió con un beso algo intenso, acomodándose sobre él.

Jadeaba bajito en sus labios sintiendo los dedos entrar y salir rápido, miraba hacia la puerta por ratos, aunque Taehyung le había asegurado que estaba con seguro, no podía evitar sentir algo de presión al hecho que sus hijos estén en la habitación del fondo.

Se sentó haciendo que sacará su mano, meciéndose sobre su miembro, mojándolo con su lubricante, él acariciaba  sus muslos embistiendo en falso – Maldición Jungkook, no juegues así – jadeó mirándolo, él sonrió, iba a decir algo cuando.

Let go of the past Donde viven las historias. Descúbrelo ahora