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Ya había pasado una semana de haber visto a Casiopea y Remus y Sirius ya extrañaban la energía infantil de esa niña, ya habían firmado los papeles de adopcion y habían pasado por una inspección que habían aprobado. Se sentían muy emocionados, hoy llegaría la pequeña Casiopea.

-Esta todo listo?- Pregunto Remus por decimoquinta.

-Si Remus, ya tranquilizateee!- Pidió Sirius aparentemente "Tranquilo".

Aún que esa tranquilidad y confianza que tenía el ojigris, era completamente falsa, por dentro realmente se moría de nervios, pero no quería preocupar más a Remus, aunque, sentía que pronto tendría un colapso nervioso debía ser fuerte por ambos.

~Din Dong~ Sonó el timbre de la puerta y PUM!, Remus se desmayó en medio de la sala de estar, Sirius solo río ante esto, Remus solía hacer eso seguido cuando estaba nervioso.

Sirius se adelantó a la puerta y la abrió, tuvo que bajar la vista para ver a la pequeña Casiopea que lo miraba con una radiante sonrisa.

-Hola pequeña, te extrañe mucho.-dijo mientras la tomaba entre sus brazos y la levantaba en el aire.

-Yo también, a ti y a Remus, y Remus?--Pregunto la pequeña, en el poco tiempo que había estado junto a Remus y Sirius se dio cuenta de que siempre estaban juntos.

-Bueno...-Sirius se movió dejando ver a un Remus desmayado sobre la alfombra.

-Esta bien!?- la pequeña estaba de verdad preocupada.

-Si, si, siempre le pasa eso cuando está nervioso.

-Y por qué estaba nervioso?

-Por que quería que todo esté listo para cuando llegarás.

-Todo?

-Si todo, hablando de todo, quieres ver tu nueva habitación?

-Si!!!

-Perfecto vamos-Sirius pudo a la pequeña en sus hombros y la llevo dando saltos hacia la habitación que estaba al lado de la de Remus y Sirius.

-Y... Te gusta?-Pregunto temeroso Sirius.

-Gustarme!?, ME ENCANTA!

La habitación era hermosa, en una de las paredes había un mural con las siluetas de un lobo, un perro y un ciervo, en el resto de las paredes habían dibujos de estrellas y lunas.

-Me gusta que te guste.- Respondio Sirius emociónado- Quieres enterrar a Remus en el arenero del patio trasero?

-Siii!, Espera no se enojara?

-Na, no creo

Y así fue como Casiopea y Sirius enterraron al pobre Licantropo en el arenero hasta la cabeza.

Pobre Remus que dormía tan pacíficamente, sin imaginar que despertaría literalmente enterrado en un arenero.






















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Aquí la tan esperada actualización jachublack


Siento que sea tan corto, pero es que probablemente mañana haga maratón de caps pero como cinco o seis capítulos o algo así, bueno hasta mañana amigos <3

Always WolfstarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora