Konosuba: proyecto K-47434

un sapo se comió a la princesa!

Kazuma se encontraba caminando hacia la entrada de Axel, junto a él estaba su nueva compañera, aunque no sabía su nombre, decidió solo decirle Rin, por cierto personaje al que le recordaba.

Estaban yendo a una misión de cazar sapos gigantes otra vez, en el camino, Rin veía todo curiosa.

-¿Por qué estás tan sorprendida?

-en mi reino, no hay tantas cosas extrañas como estás, a lo máximo una escama de dragón en la bodega real.

-¿Una escama de dragón?

-si, aunque parecía más que nada cuero duro.

Kazuma y Rin hablaban mientras caminaban, todo era nuevo para Rin al venir de un mundo atrasado en tecnología y sin mucha magia.

Se veían electrodomésticos que funcionaban con maná, pero eran simples, como una tostadora y una licuadora, había algunas cosas para la higiene personal en tiendas de alta calidad, se le hacía extraño a Kazuma ver un cepillo de inodoro en una tienda de objetos de alta clase.

Kazuma evitaba que Rin viera cosas raras distrayendo la con otras cosas, hasta tuvo que distraerla de una mujer de pelo azul que hacía un berrinche en medio de la plaza, se gastó 1,000 Eris en un peine de oro por distraer a Rin.

-"todo para que está niña no quiera erradicar Axel"

Y si, Kazuma lo hacía por una sola cosa, leyó la historia y habilidades de la princesa del mal, siendo las siguientes habilidades.

[Habilidades: reino caído: todos los soldados que cayeron a manos directas o indirectas de la princesa en el pasado o presente, pueden volver para servirle de peones en un juego de guerra, siendo la princesa la que ejecuta todas las órdenes.

Resurrección del mal: todo lo que la princesa mate directa o indirectamente volverá en forma de sombra para proteger a la princesa, incluyendo cualquier ser que la princesa haya considerado vivo o de alguna forma consiente (también se reviven seres que el usuario haya matado al ejército de la princesa).

Dictador: los seres más débiles que tu nunca se opondrán a tu voluntad y a tu mandato.]

A Kazuma en realidad le gustaría que use esas habilidades y conquistar el mundo, pero había un problema.

El consumo de maná.

Era tan exagerado el consumo de maná, que activar una de las tres por un periodo de tiempo de treinta minutos lo dejaría inconsciente, lo bueno era que la princesa tenía ataques básicos y eso lo hizo casi llorar, un personaje roto que no pueda usar sería solo un personaje inútil.

Por alguna razón al pensar eso se le binó a la mente el nombre "Aqua", sin saber por qué.

-¿Qué piensas máster?

Kazuma veía a rin, está tenía un broche de rosas en su pelo, eran peculiares, pues una parecía negra y marchita y la otra de un carmesí intenso.

Por alguna razón, a Kazuma ese broche le recordó a dos personas, unas siluetas en sus recuerdos.

Una joven que parece de 15 años, y otra que parece de 12 años, mientras uno tenía la silueta de una guadaña extraña en su mano, la otra parecía una brujita, ambas extendiendo la mano, era un recuerdo de antes de llegar a ese nuevo mundo.

Kazuma sintió como si tocaran su mejilla, vio la mano de Rin en su mejilla, quitándole una lágrima, cuando vio a Rin, está sonrío con preocupación en sus ojos.

-se que me hace ver hermosa, pero no tienes que llorar por mi hermosura.

Rin, tratando de apaciguar el estado de su Master, hizo una pequeña broma.

Kazuma supo que era un pequeño truco para alegrar lo, solo sonrío un poco.

Después de esa escena algo peculiar y random, fueron hacia los sapos gigantes, llegando en un aproximado de treinta minutos.

Frente a Kazuma, una princesa enojada llena de baba de sapo, a Rin se la comieron al solo llegar.

Frente a Kazuma, apareció una pantalla translúcida la cual mostraba el modo de ataque de la princesa.

-¿Quieres acabar con ellos?.

-dame unos segundos y acabaré con ellos.

Dando un salto, Rin quedo a 3 metros en el aire, como si se parara en el aire salto una segunda vez llendo por encima de uno de los sapos, cuando esté estaba distraído, cayó en picada, aplastando la cabeza del sapo.

Kazuma solo vio como la sombra anterior del sapo desaparecía y la de Rin se agrando un poco, casi imperceptible para después volver a la normalidad.

-¡Mueran en nombre de la princesa!

Gritaba Kazuma echando porras, viendo cómo bolas de fuego eran lanzadas a los sapos por la princesa a los sapos, destruyendo sus cabezas en una mini explosión que dejó solo el cuerpo, y donde estaba la cabeza, solo había carbón.

Era curioso que la princesa estuviera atacando de frente y con elegancia, como si de un baile se tratará, Kazuma quería aprender a atacar así.

Hasta que vio algo que lo dejo pálido, Rin estaba a punto de lanzar su habilidad "dictador", Kazuma veía como soltó unas palabras.

-¡No lo-

No termino, pues justo en ese momento, lo dijo.

-...Dictador!

Había dicho la orden antes de gritar la activación, Kazuma estaba pálido, unos de sus cabellos se volvieron blancos mientras caía inconsciente al suelo.

-¡Máster!

Escucho Kazuma a lo lejos, como una voz con eco en su mente, Kazuma ahora solo veía un prado lleno de flores y mariposas.

-¿Dónde... estoy?

Dijo Kazuma, tocando una de las mariposas, vio la vida de Rin, desde que nació, hasta que llegó al trono de su reino.

Kazuma se veía pálido como en la realidad.

-el FBI no vendrá por ti Kazuma... ¿Verdad?.

Kazuma lo había visto TODO, no sólo donde ordenaba cortarle la cabeza a algunos.

Pero ahí también vio a un joven, de su mismo color de cabello, de su mismo color de ojos, se parecían tanto que kazuma si no estuviera viendo desde la perspectiva de la princesa pensaría que se vistió de hombre.

Kazuma vio como la mariposa, antes amarilla, ahora era un marrón claro, casi anaranjado, con puntos verdes y dorados.
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-que estará haciendo el proyecto ahí dentro? No tendría que estar ahí aún, saque lo de ahí.