"No sé dónde ando metido, me encuentro perdido y ya no sé qué hacer"
- Hablando -
-'Pensando'-
"Palabra importante"*-*-*-*
- Renuncio -
Cientos de flashes aparecieron ante la inesperada noticia que soltó el, ahora, ex-campeón. La noticia escaló hasta las primeras planas de todos los periódicos internacionales. Había sido bastante raro, el día de hoy empezaba la gira del campeón por Hoenn y esto heló a todo el mundo.
Ash se sentó en la cama de un hotel de lujo. Había tomado la decisión hace alguno días pero aún le tomó tiempo para hacerlo. No se veía con el valor necesario para hacerlo pero al final bastó con una acción por parte de los patrocinadores para colmar su paciencia. Aún tenía ganas de romperle la cara al idiota que ocasionó todo.
Fue su penúltimo día en Unova, después de terminar una batalla de exhibición contra un entrenador cualquiera. Había aprovechado su tiempo libre para enderezar su vida. Mandó una carta a Iris, pidiendo perdón por todo el tiempo que pasó incomunicado y por alejarse de ella. Sobra decir que la chica había aceptado sus disculpas y su invitación para reunirse casi inmediatamente.
Su reencuentro fue todo lo que recordaba era un día con ella. Peleas tontas y risas infantiles fueron un salvavidas para él. Estaba empezando a hartarse de todo y ese momento de paz lo llenó de motivación y paciencia para afrontar todo lo que vendría. Al final terminaron colándose furtivamente en una fiesta, una cosa llevó a otra y cuando menos esperaron estaban besándose con bastante pasión. Iris sabía a fuego y decepción. Esto último le impidió seguir adelante.
Ambos se despidieron y Ash regresó a su hotel para reunirse con los promotores que lo esperaban. Desde su encuentro secreto con Aria que llevó a su inasistencia en una "importante reunión", empezaron a volverse mucho más exigentes y más controladores, casi impidiéndole ir a cualquier sitio sin compañía autorizada para recordarle todos sus deberes como campeón.
Sin embargo hubo algo que lo detonó todo. Una prohibición que, de haberse dicho de otra forma pudo evitar cualquier tipo de discusión. O al menos eso quería pensar. No quería creer que los patrocinadores fueran de ese tipo de personas, aunque mirándolo con lupa habían dejado varias pistas de eso. Bastantes, de hecho.
Cuando entró a la habitación fue recibido por algunos hombres de traje frente a una mesa circular, frente a ellos estaba una revista, una bastante conocida en los últimos tiempos. <<Corazón de entrenador>>.Habían unas pequeñas imágenes de algunos entrenadores relevantes de los últimos días, sin embargo, como foto principal, y que ocupaba la mayor parte de la hoja, estaba él siendo bastante amistoso con Iris. Ni siquiera de una forma romántica, sino siendo buenos amigos.
El titular era bastante amarillista, como era costumbre en ese tipo de revistas para adolescentes. "Campeona Pokémon: El romance de Ash".
El azabache desvió la mirada de la revisita, ni siquiera quería hablar de eso. Sin embargo supo que, por las expresiones que tenía delante, ese iba a ser el tema principal de la reunión. Se sentó y esperó en silencio a que alguien empezara la conversación, definitivamente él no lo haría, mucho menos cuando todo el ambiente se sentía tan tenso.
- Nos has decepcionado campeón - habló uno de ello, lo recordaba como uno de los principales inversionistas de las ligas pokémon. - Te hemos dado la libertad suficiente para que puedas vivir tu vida y así nos pagas -
Ash frunció el ceño. - '¿De qué libertad hablan? - pensó. Ciertamente libertad era lo menos que había tenido desde que se convirtió en campeón. No recordaba cuándo fue la última vez que pudo entrenar a su equipo pokémon, salir sin tener que escabullirse de sus guardaespaldas o simplemente comer un helado en algún parque aleatorio.
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TOGETHER. (AURELIA SHIPPING)
FanfictionA veces un simple error puede volcar todos nuestros esfuerzos. La gloria no siempre significa un cambio positivo en la vida. Ambas cosas, Ash, las descubrió a las malas. Sin embargo, depende de él para enmendar su error y no perder a la persona que...