- sigo creyendo que no es una buena idea - habló su madre mientras se sentaba junto a él a tomar el té.
- quiere que su nacimiento sea bendecido, no me opongo a lo que quiera hacer, con tal de que me traiga a mi hijo sano y salvo puede hacer lo que mejor le parezca - tomó su taza y la llevo a sus labios para beber de aquel líquido.
- bueno, me hubiera gustado oír el primer llanto de mi nieto, pero bueno, aún falta un par de meses, podré ir luego a estar presente ese día - sonrió leve - estaba pensando un poco y será mejor dejar al omega en el templo de la Luna, Yunna será quién cuidará al bebé así que iremos juntas el día del nacimiento, o días antes, el aroma de Yunna será el primero en sentir para que se acostumbre a que ella será su madre - bebió de su taza de té.
- claro, madre - Jungkook no respondió más, su madre se encargaba de aquel asunto y él debía concentrarse más en resolver los conflictos sociales con sus enemigos.
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- solo respire profundo - decía el médico al omega que soltaba pequeños quejidos producto de las contracciones que se le presentaban.
- falta mucho? - preguntó cuando pudo hacerlo, sentía que cada vez las contracciones eran más frecuentes y más fuertes.
- sí, el viaje es largo - respondió una de sus sirvientas.
- siento que no podré, mi bebé quiere nacer ya - soltó un fuerte gemido de dolor
- tranquilo, aún no es momento son las primeras contracciones - explicó un poco el médico.
Debido al estado del joven omega el carruaje iba un poco más lento lo cual hacia el viaje más extenso.
- Dicen que estas zonas son muy peligrosas - dijo uno de los soldados que conducía en carruaje.
- sí, algo ilógico considerando que al final de este camino se encuentra el templo de la diosa Luna - respondió su compañero que cabalgaba en su caballo escoltandolos
- es justo por ese motivo, los ladrones saben que se lleva muchas riquezas al templo y principalmente los nobles por eso tratan de aligerar un poco su carga - ambos rieron un poco y solo unos metros más vieron que de entre los árboles salieron un grupo de jinetes cuyos rostros eran cubiertos y solo se podían ver sus ojos - maldita sea, tenía que abrir mi boca - dijo con miedo y fustigó a los cabellos para que empezaran a correr y poder alejarse de los que suponía eran los malhechores.
La persecución se inició, apenas eran seis los jinetes que los perseguían.
- qué está pasando, les dije que debían conducir con cuidado - se quejó el médico al ver que los quejidos del omega aumentaban por la brusquedad de los movimientos del carruaje, pero solo bastó que mirara por la ventanilla para ver la situación en la que estaban.
- que pasa con esos estúpidos, que no les dijo que estoy mal - se quejó el omega embarazado.
- nos atacan - respondió el médico y eso alarmó a Jaemin y las muchachas que lo acompañaban.
Fue una larga persecución, principalmente porque entraron a lo angosto que se volvía el camino conforme iban acercándose al templo, pero también se abrían grandes precipicios pues el templo de la luna se encontraba en un valle rodeado de altas montañas.
- debemos de tener cuidado, es raro que solo nos persigan - dijo el médico y apenas terminó de decir ello pudo ver cómo el que los escoltaba caía de su caballo producto de la flecha que cayó en su espalda.
Las flechas siguieron cayendo, algunas se incrustaban en la madera del carruaje así como otras eran más certeras que lograban ingresar al coche y herir a las muchachas que trataban de tranquilizar al omega que lloraba de desesperación y dolor. Ahora solo quedaban el cochero, el médico y Jaemin con vida, la desesperación era tal que sin darse cuenta, en una curva una de las flechas hirió a uno de los cabellos e hizo que el cochero perdiera el control y el carruaje empezó a rodar colina abajo, se oía el romper de la madera y algunos gritos de los que iban dentro de coche, los jinetes que los perseguían se detuvieron al borde del camino a ver hacia donde había caído el carruaje, vieron algunos cuerpos esparcidos en el camino y entonces el líder del grupo habló.
- sin sobrevivientes, yo iré por el omega - ordenó y los demás acataron las órdenes, conforme el líder iba descendiendo lentamente veía como sus hombres mataban al cochero que saltó antes de que cayera el carruaje y solo tenía heridas leves, luego unos metros más abajo estaba una de las muchachas, revisaron si se hallaba con vida y luego incrustaban sus espadas en su pecho para matarla. El jinete llegó hasta donde el coche se detuvo, vio que una de las muchachas estaba en el carruaje aunque dudaba que estuviera con vida por la extraña posición de su cuello, desmontó y vio que el médico se arrastraba a unos metros de ellos.
- patético - dijo riendo y uno de sus hombres fue donde el médico y solo se oyeron sus súplicas de piedad, luego un fuerte quejido y después nada. Caminó un poco y llegó donde el omega que lloraba y soltaba algunos quejidos mientras se tocaba su abultado vientre.
- por favor, por favor - pedía con desesperación - llevense todo el oro que quieran pero no me lastimen - su llanto incrementaba, Jaemin vio el el jinete se puso de cuclillas junto a él - por favor - pidió una vez más, el jinete llevó su mano a su rostro y luego reveló su rostro - Yeol... Yeol Hwa - dijo sorprendido - por qué, por qué - se quejó - estás... Estás traicionando al rey, él... Ah~ él... Su hijo está en mi vientre, es... Traición lo que haces - hablaba con desesperación pues no esperaba que su atacante fuera el general del ejército del rey - le debes... Le debes fidelidad a mi hijo, es tu futuro rey...
- un niño que ya estuvo en tu vientre cuando llegaste al palacio no es más que un bastardo que tratas de poner en el trono - bastó esas palabras para que Jaemin supiera que el general conocía su secreto, su llanto se incrementó debido a ello - lo que tú hiciste es la verdadera traición, yo solo trato de impedir que un impostor llegue a nacer y se convierta en rey - se encogió de hombros y se levantó, inspeccionó el cuerpo del omega y vio que sus pantalones estaban empezando a mancharse de sangre y aquella mancha incrementaba con el pasar de los segundos así como los quejidos de Jaemin.
- no... No... Déjame ir, por los años de amistad con mi hermano ahg~ por favor, sálvanos, me iré lejos, muy lejos ahg~ POR FAVOR!! - empezó a gritar cuando vio a Yeol Hwa desenvainar su espada - POR FAVOR, POR FAVOR - seguía gritando, pero sus gritos cesaron cuando sintió la espalda incrustarse en su vientre - no~ - susurro
- lo siento, pero no dejaré que pongas en peligro la vida de Jungmin, tú y tu familia me importa poco, que sean condenados y ejecutados, pero lastimosamente si condenan a tus padres por tu engaño también condenarán a Jungmin - quitó la espada del vientre del omega quien poco a poco iba perdiendo fuerzas hasta para hablar, el general no espero más y volvió a apuñalarlo pero esta vez en el pecho, acabando así con la vida del mayor de los omegas de la familia Park.
- vámonos - ordenó a sus hombres, todos montaron sus caballos y empezaron a ascender la colina.
- los dejaremos ahí, señor? - pregunto uno de ellos.
- ese omega trató de engañar al rey, no merece ningún trato especial, recuerden que es una misión secreta, la reina madre no quiere rumores de nada, así que si quieren seguir viviendo será mejor que mantengan la boca cerrada - todos respondieron con un "sí señor" y empezaron a galopar de regreso al palacio, dejando atrás al omega y sus cómplices. Lo que aquellos soldados que participaron en ese atentado no sabían era que no fue la reina madre quien dio la orden, sino el mismísimo Park Jungmin que no estaba dispuesto a arriesgar su vida por el engaño de su hermano y solo bastó pedírselo a su amante el general Yeol Hwa para que acabará con aquella amenaza que le traería graves consecuencia en el futuro.
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🥀_Destiny_🕯️
FanfictionTres historias diferentes, tres amores que surgieron de formas distintas, pero todas ellas unidas por el DESTINO. La primera, la de un amor que surgió entre un príncipe y el General del reino, ellos hicieron lo que creyeron correcto por defender su...