La realidad de mis sueños

#11

Me levanté y estiré cómo de costumbre, estaba dispuesta a empezar mi día leyendo, cuando noté que estaba en la casa de Seven, todos los recuerdos del día anterior llegaron a mi mente.

Fuí al baño y no tenía otro cambio de ropa, por lo que sólo arreglé mi cabello y lavé mi rostro antes de bajar.

Hola —Saludó Seven, no tán animado, primero, quién estaba desayunando una bolsa de HBC.

Buenos días ___ —Saeran se apresuró a mi con un abrazo— ¿Cómo dormiste?.

Bien... —Ray me estaba sonriendo, pero 707 nos miraba— ¿Está todo bien?.

No.
Si.
Se miraron un poco molestos entre si, en definitiva algo estaba mal y creo que soy la causante de ésto.

Todo está bien amor —Lo miré desconfiada— ¿Por qué no me crees?.

No lo sé —Señalé a trás de él— ¿Será que tú hermano nos está mirando mal desde hace rato?.

Éso es mentira —Dijeron los dos a la vez.

Sólo estoy mostrando mi desaprobación a Saeran —Aclaró el pelirrojo.

¿Por qué no le preguntamos su opinión a ___?, Después de todo, ésto la incumbe completamente.

¡No la incumbe en lo absoluto!.

¿A no? —Se acercó a su gemelo desafiante— ¿Es realmente así, puedes verla a los ojos y decirle que no la tomas en cuenta para una desición tán importante cómo la vida de 8 personas?.

Chicos... —Hablé un poco incómoda.

¡Dijimos que no diríamos nada, estás siendo un egoísta!.

Chicos.

¡Ella dijo que puedo ser egoísta!.

¡Chicos! —Ambos voltearon a verme— No me gusta verlos pelear, ¿Les parece bien discutirlo o...?

No hay nada que discutir, ya tomaste tu desición —Me dijo con delicadeza Ray.

¿A sí, por qué no le cuentas las consecuencias de éso? —Le miró enojado— Creí que estábamos de acuerdo.

Creíste mal.

¡Basta!, Si ésto tiene que ver lo mínimo conmigo debo saber —Los miré a los dos— Nada de gritos, ustedes son hermanos, deben quererse y tratarse con respeto.

Lo sentimos ___.

La disculpa no es conmigo.

Se miraron entre ellos y se disculparon, ahora nos encontramos en la sala, ambos estaban juntos en un sillón frente a mí y parecían molestos.

Bien, ¿Quién me dirá lo que pasa? —Al decir éso se inició un terrible silencio que inundó el lugar.

Es sobre ti y tu regreso a la realidad —El peliblanco con rosa comenzó a explicar— En realidad Saeyoung quiere que regreses sin pedirte opinión.

Miré a Seven en busca de una respuesta.

Quiero que regreses porque no quería que te enteraras del peligro que quedarte aquí conlleva.

Miré a Saeran, quién evitó mis ojos con un rostro triste.

El no te lo dirá —Continuó el mayor de nosotros— Tienes una misión y llevas 1 de 7, no sabemos que hiciste, pero tal parece que algo debes hacer para regresar y no sabemos la consecuencia que conlleva el no lograrlo, por éso te quería sacar de aquí, podrías morir...

Sus palabras me dejaron bastante tranquila por alguna razón, suspiré de alivio y sonreí.

Acabo de decir que morirás, hablo en serio.

Lo sé —Le contesté riendo— Se que mi vida es importante para ustedes, pero yo ya tomé mi desición y se la dije a Saeran, prefiero quedarme aquí dos días a regresar a mi realidad y vivir 70 años.

¡No sabes lo que dices! —Me regañó— ¿Por qué te arriesgas así por nosotros?.

No es del todo por ustedes, yo los amo, los amo demasiado y me encantaría quedarme aquí, pero si no te gusta la idea, lo entenderé y regresaré cómo gustas.

Pero, ¿Qué hay de tu familia y amigos, qué hay de tu gato?.

Mi familia y amigos, si me quieren de verdad, deberán entender que ésto me hace feliz —Sonreí— Y sobre Holly... Saeran dijo que podría venir aquí.

Lo lograré, no me mires así Saeyoung —Dijo el más chiquito de los dos ante la mirada molesta de su hermano.

Se creó un silencio más largo, me sentí nerviosa e incómoda, Ray estaba distraído por allí, mientras que 707 estaba pensativo, pasaron un par de minutos antes de que el suspirase.

Está bien, si éso quieres... —Sonreí victoriosa ante sus palabras— Cambiando de tema... Rika fue llevada a un psiquiátrico y V está con Jumin ahora mismo.

¿Cómo se encuentra? —Preguntó Saeran.

Estable... De momento.

Me sentí algo culpable, si hubiera seguido con la ruta de V hubiera podido salvarlos a todos de mejor manera... Pero ni modo, tengo que remediar lo que hice.

Quiero ir con Jumin —Me miraron los dos gemelos— Para ver a V.

No —Los dos respondieron.

No sabemos cómo reaccionará V —Aclaró el peliblanco.

No sabemos cómo reaccionará Jumin —Dijo el pelirrojo.

¿Qué tiene que ver Jumin?.

Puede recordarte —Miró a otro lado— Y te recuerdo que tú sacaste el final malo 2.

Me sonrojé ante aquello y tapé mi rostro.

¿Cuál es el final malo 2? —Preguntó Saeran.

¡Ninguno!... Ninguno... De igual forma iré —Le miré decidida.

No puedes, ni siquiera te conoce, no estás en la RFA.

Me recordará y si no lo hace, le forzaré a recordar con mis encantos —Guiñé un ojo y ambos gemelos se veían incontentos, pero debo terminar todo con un buen final y ése final, por más que amodie a V y Rika, los tiene incluidos.

Por cierto Luciel, ¿Me prestas algo de ropa?.

¡Claro! —Me miró de arriba a abajo— Muero de ganas por ver cómo te queda.

Seguido de éso, me entregó la sudadera que acostumbraba usar y unos pantalones de hombre... En mi cuerpo normal me hubiera quedado bien, pero aquí soy mucho más pequeña y todo me quedaba grande.

Ésto no funciona —Bufé frustrada.

Saeran se ofreció a darme algo de ropa, pero era lo mismo, son gemelos después de todo, hasta que Seven, buscando en todo su clóset, encontró algo que no pensó volver a ver.

Ten, seguro te queda —Me entregó un vestido blanco, bastante ligero y unos zapatos iguales— Y lamento que tenga que ser ésto, no tengo nada más.

¿Qué tiene de malo?.

¿No lo reconoces?.

Negué con la cabeza, después el dijo que no importaba.

Me bañé, sorprendida de que 707 tenga shampoo, y cambie respectivamente.

Me miré al espejo, era muy linda, me sonreí y miré el reloj, era de mañana todavía.