#23

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¿No era éso? —Me miró sorprendido.

No —Me sentí insegura un momento— Pero ahora debes contarme la historia completa ¿Qué hicieron?

Nada —El contrario se hundió en su lugar y soltó un suspiro nervioso.

Bueno ¿Por qué lo hicieron? —Le miré un poco molesta, en general no me importaba, pero quería saber que buscaban encontrar.

Por nada... —Apartó sus ojitos de los míos.

Suspiré, no tenía importancia en éstos momentos, la prioridad era convencerlo de tomar la ayuda de Jumin— Está bien, si no quieres decirme no te preocupes, pero yo si tengo que hablar contigo.

El no respondió, así que proseguí, pensando muy bien cada una de mis palabras— Creo... Que es evidente que tu estadía en mint eye te dejó consecuencias.... Varias... Y, bueno... Creímos que sería bueno para ti hablar de ésto... Con alguien.

Me miró confundido— Pero ya hablé de ésto con alguien.

Me sorprendí— ¿Con quién?

Contigo.

No —Sonreí ligeramente— Me refería a un profesional.

Se quedó pensando y negó con la cabeza— No lo necesito.

Lo miré en silencio, creo que era muy obvio que ambos sabíamos que mentía.

¿Y si solo lo intentas? Si no quieres volver a ir estará bien... Pero me gustaría que sacaras todo aquello que no te atreves a contarle a nadie... Ni siquiera a mí, porque supongo que más de dos años allí han pasado más cosas de las que quieres recordar.

Me miró con ésos ojitos muy tiernos y me soltó un beso en los labios— No es algo que quiero hacer... Pero lo haré por ti.

Sonreí satisfecha, es más fácil hablar con Ray que con Saeran, podía imaginarme el desastre que sería mi cuarto con sólo decir la palabra "psicólogo" frente a él— Muy bien, muchas gracias Ray, solo espero que en un futuro lo hagas por ti mismo.

Yo también... —Dijo mientras nos tomamos de las manos.

Por cierto ¿Puedes darme algo de dinero? Debo salir a comprar para hacer de comer, lechuga, limón, jitomate, ya sabes, cosas básicas... Que no conoce tu hermano.

Si, aquí tienes... —Dijo dándome una buena cantidad de dinero.

¡Gracias! Prometo hacerte los mejores platillos de la vida —Dije vistiéndome para salir, al hacerlo caminé sin mucho rumbo, tendré que encontrar el mercado en algún momento ¿No?

•°•°•

¡No me dijiste que tenías novia! —Le gritaba un rubio al albino por teléfono.

Es que... No encontré la oportunidad... —Dijo sin saber cómo decirle que en realidad también era su novia, pero que no se acordaba.

¿No encontraste la oportunidad? ¡¿No encontraste la oportunidad?! ¡¿Cómo no vas a "encontrar la oportunidad" para decirme algo así?!

Yoosung, por favor, te estás alterando demasiado.

¡No estoy alterado!

Mira... —El mayor suspiró con pesadez— Lamento mucho no haberte dicho de ___ ¿Si? No volveré a olvidar decirte lo que pasa en mi vida amorosa ¿Me puedes perdonar?

¡No!

¿Y por qué no? —Se molestó un poco— Yo no te pido que me estés contando de las chicas de tu universidad.

¡Si lo haces! —Suspiró con mucha frustración— Aún así es diferente.

¿Diferente? Yo creo que es exactamente lo mismo.

¡No lo entenderías! —El menor comenzó a despedirse y dejarle sus mejores deseos a Zen, enojado, pero lo hizo, antes de colgar.

Que carácter... —Dijo suspirando.

•°•°•

Yoosung salió de su casa, completamente molesto ¿Cómo se atrevía Zen a reemplazarlo sin decirle? Ahora pasará tiempo con ella y no con él, estaba seguro. No volverá a tener salidas de amigos, no volverá a jugar en su casa y tendrá que ir solo al día de su boda, porque si, el pequeño ya estaba pensando que se iban a casar. Cuando vió a una chica de cabello café comprando un pequeño trozo de pastel en un puesto

•°•°•

Muchas gracias —Le sonreí a la viejita que me acababa de vender un trozo de pastel a bajo precio, no lo quería para mí, sino que al ser de chocolate juraba que Saeran estaría encantado con el.

A usted jovencita —La señora devolvió la sonrisa mientras me marchaba.

Tú... —Levanté la vista a ésa voz conocida.

¿Yoosung? —Sonreí de nerviosismo y emoción, después de todo el es mi primer amor, de no ser por él no hubiera terminado el juego nunca.

¿Sabes mi nombre? —Actué despistada.

Oh jojo... Si... Eh... Es que Seven habla mucho de ti... —Le sonreí y me miró con odio.

Así que Zen prefirió presentarte a él antes que a mí... Está bien —Caminó rápidamente fuera de mi vista mientras yo intentaba seguirlo.

Espera ¡Yoosung! ¿Podemos hablar? —Caminé un largo rato atrás de él hasta que lo perdí de vista en un parque algo familiar, intenté buscarlo por todas partes— ¿Dónde...? ¿A dónde...?

De pronto escuché los sollozos de alguien a lo lejos, por lo que me acerqué corriendo hasta él— ¿Yoosung?

¡Déjame! —Gritó.

Hey... ¿Qué pasó? Solo quiero saber si estás bien.

¿Por qué? ¡¿Es porque te parece que estoy alterado?! —Me miró con rabia y se me partió el corazón al verlo así, llorando de frustración.

No... Me parece que estás extremadamente triste, tienes derecho a sentir todo lo que quieras —Me miró sorprendido— Pero no quería que estuvieras solo, nadie merece estar o sentirse solo... ¿Quieres?

Le ofrecí el pastelito que acababa de comprar— No, no... Lo compraste para alguien más.

Éso no importa ahora, tu estás aquí y quiero que te sientas mejor, parece que no has comido adecuadamente últimamente —Dije éso último sabiendo que era verdad ya que por jugar LOLOL se la pasa tomando solo café y no come nada sólido en palabras de Saeyoung.

El tomó el pastel y comenzó a comer mientras lloraba un poco más— Está rico...

Me dió mucha ternura así que acaricié su cabello y me senté a su lado, en silencio. Después de un rato soltó algo más.

No esperaba algo así de ti, creí que serías más interesada —Me dijo sinceramente y le sonreí.

Está bien, incluso yo pensaría éso de mi si no me conociera —Me ofreció el último pedazo de pastel así que lo comí

...Yo lo pensaba porque eres la novia de Zen —Mientras masticaba, me comencé a ahogar por sus palabras.

¡¿N-Novia?!

¿No eres su novia? —Me miró confundido.

Si... Bueno... No... Es confuso ¿Sabes? —Me miró esperando una explicación— No hemos dejado las cosas claras.

Deberían, éso es primordial para cualquier relación —Sonreí y lo tomé del rostro a lo que se sonrojó— ¿Qué haces?

Eres demasiado lindo —Dije abrazándolo, me estaban entrando ganas de llorar —Tu novia tendrá mucha suerte de tenerte a su lado.

Me miró algo sorprendido y correspondió al abrazo— Zen también tiene mucha suerte de haber encontrado a una chica tán linda y empática ___.

La realidad de mis sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora