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Me encontraba en el carro de Seven junto a Saeran, ambos se ofrecieron a dejarme en el edificio, por lo que Ray está usando el teléfono de Luciel para avisar que voy a llegar mientras el otro conduce.

Si... Si, así es... Pueden interrogarla cuanto quieran... Si, se los aseguro... Adios.

Parece que estás entregando a una presa —Dije quejándome.

Quizás... —Sonrió.

Ésa acción me pareció extraña y tierna a la vez, verlo así era toda una alegría... Saeyoung también estaba muy serio, ni siquiera volteaba a verme.

Al llegar, no había lugar para estacionarse, por lo que besé a ambos en la mejilla como despedida y salí del coche.

Era un edificio negro e increíblemente alto, en la entrada me esperaba un hombre serio con el cabello castaño, me guió hasta un área de espera en el piso 7, el cual estaba vacío, allí me quedé un rato, jugando los juegos que descargué anteriormente en mint eye.

Nos dieron las 10 y las 11.
Las 12, la 1, las 2 y las 3...

Yo estaba completamente aburrida, hasta que vi a alguien llegar por el elevador.

Ése porte...
Ése cabello...
Ésa elegancia...
Ése estilo...

Jaehee... —Suspiré de amor, se veía tán linda así de concentrada.

¿___? —Se tapó la boca y volteó a mirarme— Usted debe ser la chica con quién se encontrará el Sr. Han.

Asentí nerviosa.

Lamento hacerle esperar, pero ahora puede recibirla... Si gusta seguirme.

La seguí contenta, estaba por ver a quién también fue mi esposo.
Llegamos después de unas escaleras a una oficina cerrada.

Ella tocó la puerta— Sr. Han, aquí está la chica que quería hablar con usted.

Que pase —Ésa voz casi me da un orgasmo, estaba nerviosa, ¿Y que pasa si termino encerrada en la jaula?.
No estaría tán mal...

Mientras estaba atrapada en mis pensamientos se abrió la entrada y pude ver el interior del lugar, era una sala más clara de lo que aparentaba, entraba el sol, tenía colores oscuros y estaba tán vacía que parecía ser más grande que lo que ya era.

Suerte —Jaehee me dió unas palmaditas en el hombro, cuando se dió cuenta, mejor se fue a continuar con el trabajo.

Sonreí ante ésa escena y me adentré a ése lugar, lo vi, vi su serio rostro con sus lindos cabellos y ojos negros.
Me paré frente a el y comencé como si recién nos conociéramos.

Muy buenas tardes, mi nombre es-

___ —Me interrumpido el mayor— ¿Qué tienes que ver tu en todo el asunto de la secta?.
Muy directo, cómo lo esperé.

Antes quiero saber que es lo que sabes tú para completar la información y no desperdiciar tiempo.

Saeyoung es hijo del primer ministro y tiene un hermano gemelo de nombre Saeran, Rika y V se ofrecieron a ayudarles con su situación en casa consiguiendo un empleo a Saeyoung, Rika tenía otros planes y en vez de cuidar a Saeran lo torturó para hacerlo un esclavo y creo una secta llamada "Ojo de menta".

Si... Bueno, entonces puedo decirlo todo —Le sonreí con tristeza— Yo estuve secuestrada los últimos días de Magenta en el edificio, aproximadamente unos 2 meses.

¿Magenta?

"Ojo de menta", "Mint eye", "Magenta", el lugar tenía muchos nombres pero entre los creyentes resonaba "Paraíso".

¿Y cuál era tu propósito en ése lugar?

Compañía... Creo, no estoy segura —Le evité la mirada— Me llevó a ése lugar Saeran.

¿Lo conoces?.

En persona, si, así es.

¿Alguna vez... —Pareció dudar un segundo— Te tomaste con un creyente extraño?.

Si te refieres a uno con el cabello menta y de nombre Jihyun Kim —Me miró con interés— Si, fue así.

¿Cómo le conoces?

Choqué con él y ayudó a levantarme, creo que olvidó por completo que los creyentes no hacen éso.

¿Qué sabes sobre él?

Su nombre es Jihyun Kim, fue el ex-prometido de Rika, es tu mejor amigo desde la infancia, es fotógrafo y de nombre artístico usa "V", quiso detener a Rika solo ya que "Por su culpa" Saeran sufría y no debía dolerle a los demás la herida que ahora tienen por culpa de ella a los miembros de la RFA.

¿Qué sabes de la RFA?

Es una organización de caridad, el nombre viene del nombre de Rika aunque V sea el líder, tiene de miembros a Jaehee Kang, Yoosung Kim, Zen, Sev- Saeyoung Choi, Jumin Han, Jihyun Kim y no sé si Saeran éste formando parte de la organización.

Bien, le agradezco su cooperación, la tendré en mente para futuros ensayos, puedes salir de dónde vienes, el elevador está a mano izquierda.

¡¿Eh?! —Le miré molesta— ¿Qué, la información es gratis o que?

Cierto —Tomó de una copa de vino que ni siquiera noté que estaba ahí... El estaba borracho— ¿Te parece un cheque de €8,000?

Tentador, pero no gracias —Lo miré determinada— Quiero... No, necesito hablar con Jihyun Kim.

Me temo que por el momento éso no es posible.

Si lo es y de verdad me urge disculp-
Una voz interrumpió mis palabras.

¿Rika?, ¿Rika, eres tú?

Miré la fuente de está voz, quién no me quitaba los ojos de encima, al encontrarse con mi rostro suspiró decepcionado.

Necesito hablar contigo V.

No le hagas caso Jihyun, ella ya se iba.

No, está bien —Sonrió triste— Creo que le debo algunas explicaciones y disculpas a la señorita ___.

Jumin nos miró con mala cara, parecía celoso, no sé si de mi o de V, pero éso no es importante en éste momento.

Entramos los dos a una habitación que se encontraba cerca de la oficina y cerramos la puerta, ahora estábamos sentados los dos, frente a frente y sin mascaras.

Gracias por salvar a Saeran —Habló el primero— El es muy importante para mí y para Saeyoung.

Lo sé, aunque no fue por ustedes, fue por él.

Me gusta tu honestidad.

¿Por qué confías en mí tán de repente?

Bueno —Miró, o al menos éso creo, a otro lado apenado— Ayudaste a Saeran, los creyentes fueron liberados, Rika está en recuperación, terminaste ésto antes que yo y con un final feliz.

No es un final feliz si tú no estás feliz —Me miró con sorpresa, parecía incómodo y yo también lo estaba, jamás había dicho algo tán cursi— Me refiero a que es obvio que no estás bien, estás muy desalineado, se nota que no has dormido y me preocupas, tienes que descansar y comer a tus horas, por mucho que te desprecies a ti mismo, el mundo sigue girando y la vida no termina, incluso si lo crees así.

Lucy... —Soltó de la nada riendo— Me has recordado a ése nombre.

¿Por qué? —Pregunté procurando no mostrar nerviosismo, ése era el nombre de nuestra hija si no mal recuerdo.

No lo sé... ¿Quién era? —Se distrajo un momento, en el cual parecía nostálgico e incluso desconsolado.

Bueno, ya tengo que irme, espero que te recuperes y te vaya bien —Lo despedí de a lejos, ésta es la situación que quería evitar Seven, y me fuí casi corriendo, hasta llegar a la salida del edificio, en dónde me topé con una tormenta... Parecía huracán.

No mames... ¿Es neta? —Miré a mi alrededor, parecía que no había nadie más dentro del edificio... Ni siquiera empleados— Mierda... Aquí voy otra vez...

La realidad de mis sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora