MI REFELJO DE TI || YEONBIN

Capítulo 20

Harry Potter, el libro escrito por la ya no tan amada y aclamada J. K Rowling, trata de un chico huérfano obligado a vivir con sus tíos hasta que un día fue llevado a la escuela para magos Hogwart y creo que todos, incluso si no somos fans, sabemos lo que pasa después.
Soobin tiene una ligera idea de la trama pero jamás había visto la película y mientras los chicos normales de su edad leían "El prisionero de Azkaban" él estaba leyendo algo escrito por algún empresario con millones de dólares en sus ingresos.

Buscó en su computadora uno de los uniformes célebres de la saga que llegará en menos tiempo y fuera más barato, al final se decidió por uno con bufanda amarilla ya que era del que tenían más piezas disponibles y por ello era más seguro que se lo entregaran a la mañana siguiente. No se preocupaba por su madre ya que trabaja ese día.
Creo que es importante decir algo sobre ella, tiene "bajo su ala" a 4 escritores pero sólo uno de ellos es novelista de libros físicos por decirlo de alguna manera, otra de ellas es un chica que escribe cuentos o historias cortas para la revista web de la editorial, también un chico joven que hace un cómic de superhéroes y una mujer que hace un manga de amor. Todas son cosas muy distintas pero así es el trabajo, esto lo mencionó porque todos los años se vuelve loca con los especiales de Halloween y justo estaba sobre la fecha de publicación así que probablemente no iría a casa hasta el domingo por la mañana.

Y llegó el sábado, durante el transcurso de la noche del viernes Yeonjun le envió un texto con su dirección e indicaciones para llegar, el festejo comenzaba a las 4 de la tarde. Se miró al espejo una vez más para verificar que todo estuviera bien, se quitó la gabardina y la bufanda, no quería ser el chico raro que va por la vida disfrazado; había hecho un mapa para no perderse y al buscar el lugar como tal se dio cuenta que la casa de Yeonjun quedaba a una cuadra de la empresa de su madre.
Esto encendió su alarma interior pero se tranquilizó un poco al pensar que su mamá estaría encerrada en su oficina o con algún escritor, no tenía por qué preocuparse. Ella probablemente no lo sabría nunca, justo como hace años.

Después de tomar un autobús y caminar un par de calles llegó a lo parecía ser una especie de pastelería, tenía el típico techo de carpa con colores rosa y morado, una gran ventana que dejaba que todos los transeúntes vieran hacia adentro las bellas creaciones culinarias. Dio un paso atrás para leer el nombre del lugar y se dio cuenta que arriba del local había otro piso y unas escaleras en la parte posterior, quizás su compañero vivía ahí o se equivocó de dirección.
Leyó el nombre sin entender mucho del significado del mismo, "Tomorrow x Together". Su cerebro hizo la traducción en automático pero no le encontró mucho sentido.

Pensó en llamar a Yeonjun pero le avergonzaba, en su lugar decidió entrar al negocio para preguntarle a alguien de ahí si conocía la dirección correcta, para Soobin era igual de estresante hablar con un extraño que con Yeonjun, solo que el último le estresaba de una manera que no podía descifrar; al pensar en tomar el teléfono y marcar el número de su compañero su corazón se aceleraba de manera extraña y su cara comenzaba a sentirse caliente. Con un extraño solo evitaba el contacto visual y ya.

La panadería olía maravilloso, y todo se veía exquisito. Por inercia comenzó a ver los diversos postres y pensó que sería una buena idea comprarle algo al otro Choi ya que jamás le entregó su regalo de cumpleaños.
Se detuvo frente a unos cupcakes que llevaban por nombre "binis" y cuya decoración era muy simple, solamente un glaseado blanco tradicional con chispas grises. Lo que llamó su atención es que era el mismo tono de gris que el del armazón de sus lentes, ni muy oscuro pero claro.
No sabía que existían chispas de ese color.

- Sea bienvenido a nuestra tienda, joven. No tema preguntar lo que sea, con gusto voy a responderle- una mujer que estaba en el mostrador llamó su atención con un tono amable- Todos los proyectos son elaborados a mano por mi y mi hijo.