1. Creó qué él me gusta

1.8K 84 22
                                    

Narra Gavi.

El canario tenía linda sonrisa, al igual que su mirada compuesta por sus ojos cafes y sus pupilas dilatadas; todo de el era lo contrario a imperfecto. Inconscientemente lo estaba mirando fijamente, cómo si de un psicópata se tratase.

—Vamos Gavi, ¿Me estás oyendo?

Unos golpes en mí hombro y una voz me hacen volver a la realidad, justo en el lugar de entrenamiento en el cuál se encontraban todos los del equipo.

—Mierda —meneo levemente la cabeza—, perdoname Pedri, ¿Qué me estabas diciendo?

El se me queda mirando algo confundido por mí actitud cómo si estuviera perdido. Realmente deseaba qué no supiera lo qué estaba pensando.

Si llega a saberlo, realmente estoy jodido.

—¿Te encuentras bien? —dice formando una mueca en su cara. Desde lejos se notaba lo incómodo y confundido que estaba.

—Estoy bien. Solo me tiene algo desconcentrado un tema qué anda rondando en mí cabeza. —digo mientras lo miró con una sonrisa algo fingida.

—Está... —noto cómo piensa lo que va a decir—, Está bien, supongo.

Decidí olvidar todo lo qué me estaba sucediendo en aquel momento y sigo con el entrenamiento.

A lo lejos logro notar las miradas de Ferran, Ansu y Pablo Torre.
Eran miradas juzgadoras y confundidas.

Supongo que todos saben el porque claramente.

Mí actitud está dejando a todos extrañados y raros. Realmente, ¿Que me está pasando?, ¿Pedri me tiene confundido?

Dejando de lado eso, decido concentrarme en el entrenamiento con Pedri, ya que Xavi me había puesto a hacer pases con él “justamente”.

Debo admitir que alguna que otra vez volteaba a ver a mis amigos tratando de ignorar el hecho de qué Pedri cada algunos minutos se encontraba mirándome, realmente eso me lograba poner nervioso o me hacía sonrojar.

El entrenamiento continúo unos minutos más para luego tener el permiso de irnos a nuestros hogares.

Realmente me hace falta una ducha y simplemente acostarme en mí cama mientras los pensamientos me comen la mente completamente.

Típica vida de un adolescente con ansiedad y problemas.

Era raro que él canario aparezca en mis pensamientos cada qué pueda, todo era confuso ya qué realmente no me debería gustar, soy completamente heterosexual; pero sus ojos y esos labios... ¡Dios!

Eso no era bueno, para nada lo era. Si empezaba a sentir algo por Pedri, no sería siquiera correspondido. Él es la persona más heterosexual qué podría existir en éste mundo y en éste universo. Realmente si sintiera cosas por él, jamás lo aceptaría, sería aceptar qué estoy enamorado de la persona incorrecta. Pedri, jamás me vería cómo algo más, me conoce hace meses incluso uno o dos años.

Sólo me quiere pero, como su mejor amigo...

Decido dejar él tema atrás y voy en busca dé mis cosas a los camerinos, mí bolso con mis cosas personales y mí celular en él cuál, en él instagram del equipo habían subido una historia de Pedri y yo haciendo pases. Notablemente me estaba mirando y eso sólo quería decir una cosa, «Los videos que vería en Tik Tok sobre sus miradas.»

—Disculpa Ferran, ¿Sabés dónde se encuentra Pedri? —le pregunto con una voz susurrante y dulce a la vez.

—¡Pablito! —dice mientras un brazo suyo se posa en mí hombro—: Creó que se fue a su auto, dijo qué te esperaría en éste mismo.

SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora