Alberto y Berenice están terminando de preparar la comida para luego degustarla juntos, sólo estaban ellos dos por esa noche. Es que seguro que Román no iba a dejar sola a su mujer con un tipo que recién conoce y él estaba absolutamente seguro que mañana regresaría y por eso debía actuar rápido.
Terminaron de preparar todo y se sentaron a la mesa a comer el ajiaco que habían preparado.
Comen en absoluto silencio, hasta que Alberto lo rompe;
Alberto:"Está delicioso Berenice, podría dedicarse a la cocina. Tal vez poner un puesto de comidas o hacer para vender, una especie de delivery"
Berenice:" No me parece mala idea Alberto, pero no creo que Román quiera que lo haga"
Alberto:" Si él la ama, no creo que le diga nada. Perdón por mí indiscreción pero hace mucho que están juntos?"
Berenice:" Algunos pocos meses"
Alberto:" Es un hombre afortunado de tener a una mujer como usted, pero bastante bobo"
Berenice:" Cómo así?"
Alberto:" Porque no sabe valorar lo que tiene en su casa, si usted fuera mí mujer jamás la dejaría sola y menos con alguien como yo"
Berenice:" Alguien cómo usted? Y como es alguien como usted?"
Alberto:" Alguien que recién conoce, que no le tiene confianza, que es guapo y que está fascinado con la belleza de su mujer" le salió tan de golpe las palabras que ni siquiera se dió cuenta que sin querer le expresó sus sentimientos, lo que estaba sintiendo en ese preciso momento.
Berenice (se sonroja):" Ah bueno, le faltó algo?"
Alberto:" Qué cosa?"
Berenice:" Egocéntrico también, supongo que Román confía en mí y además que ya le advierto sobre las reglas"
Alberto:" Eso es verdad, por eso me estoy conteniendo. Perdón por mí franqueza, pero usted me encanta y no podía callarme"
Berenice:" Espero que no lo escuche Román porque sino lo matará, para mí es un halago que un hombre tan guapo como usted, yo le parezca atractiva"
Alberto:" Lo es Berenice, pero tiene razón y le pido por favor que no se entere el jefe de mí atrevimiento, porque me echa o me mata"
Berenice:" Tranquilo que por mí no se va a enterar, hay que lavar los trastes"
Alberto:" Yo lo hago, no se preocupe"
Berenice:" Ok entonces me voy a mí habitación a descansar, nos vemos Alberto"
Alberto:" Adiós Berenice"
Ella se va a su habitación y él termina de lavar todo para también descansar un poco en la comodidad de su habitación.
Cuando se dirige a la misma, ve que en la habitación de Berenice está la puerta un poco abierta y se queda mirando un rato.
Lo que ve lo tiene alucinando, ella está con un albornoz blanco y está en ropa interior. Lo tiene abierto y por eso Armando puede ver el cuerpo entero de ella, está vestida con un conjunto de ropa interior color rojo de encaje y puntillas que a él lo alucinaron. Se está pasando crema para todo el cuerpo en sus piernas, esas torneadas piernas que a Armando le habían fascinado. Se pasa la crema lentamente y su rostro muestra una clara satisfacción por lo que hace, parece disfrutar ese momento.
Armando sigue mirando esa imagen, luego ella pasa su mano con crema en su vientre plano y va subiendo hasta sus hombros.
Luego, para deleite de Armando, se saca el sostén y pasa su mano acariciando sus pechos lentamente, disfrutando cada caricia que sus manos le obsequian. Él estaba tan fascinado con esa escena que no se dió cuenta que su "amiguito" se había puesto en alerta y eso no le pasaba hace años, desde que mataron a su novia Alicia.
Cuando sintió un dolor en su entrepierna, miró abajo y notó que estaba vivo como antes.
Siguió mirando igual como Berenice se pasaba crema por el resto de su esbelto cuerpo, esa mujer le encantaba como nunca le pasó y eso lo atormentaba bastante ya que podía hacer peligrar la misión. Pero sabía perfectamente que en el corazón uno no manda y pareciera que ese traidor ya había elegido la presa.Se fue a su habitación, entró al baño para refrescarse la cara y luego se recostó, quedándose dormido.
Por primera vez en todos estos años, que Armando no soñaba con Alicia................Sueño............
Estaba en una cabaña, en un monte lejano. Como esas que son de los cuentos infantiles, entraba a la cocina y una bella mujer que estaba de espaldas a él, estaba cocinando. Pero lo estaba haciendo en ropa interior, era color negra. El brasier era armado y con puntillas. En cambio la braga era colaless muy finita y ligero con medias negras también. Él se acercaba por detrás y la abrazaba.
Armando:" Ummm amor que rico huele"
Mujer:" Tú hueles más rico"
Cuando la da vuelta, resulta que es Berenice, no le importa nada y la besa con suma pasión. La sube a la mesa, mientras la acaricia su cuerpo con una mano y con la otra le toca su intimidad, dándose cuenta que está húmeda. Eso era señal que estaba preparada para él, entonces le saca la braga con su ayuda y le quita el brasier, quedando totalmente desnuda. Rápidamente se sacó lo que tenía puesto para quedar en igualdad de condiciones y en una gran embestida, la penetró. Empezó siendo movimientos sencibles, tiernos hasta dulces diría. Pero luego fue aumentando el caudal de pasión que hicieron aumentar las embestidas para hacerlas más fuertes.
Sintió como ella arqueaba hacía atrás su cabeza y en el lapso de unos minuticos, sintió estremecerse el cuerpo de ella para quedar totalmente relajada.
Luego de unos pocos minutos, empezó nuevamente con fuertes embestidas que lo habían volver loco, le fascinaba también los gemidos de ella y antes de terminar, decidió levantarla de la mesa y dandola vuelta, la apoyó en la mesa. El trasero parado de ella, lo tenía en todo su esplendor para deleitarse con esa majestuosa obra de arte, su vista se lo agradecia con creces. Después de ese poco lapso de tiempo, nuevamente entró en ella. Ambos gemian con mucho fervor, hasta que primero llegó al segundo mejor orgasmo de su vida Berenice y a los pocos minuticos Alberto terminaba dentro de ella para luego quedar laxos apoyados, ella a la mesa y él al bellísimo cuerpo de ella.
............. Fin del sueño........
Armando se despierta agitado y no sabe dónde está, ese sueño fue tan pero tan real que pensó que ella estaba allí. Por eso con su mirada que no era más que desconcierto, miraba por toda la habitación para ver si la veía a Berenice. Para su suerte o desgracia, ella no estaba allí y efectivamente todo era producto de un sueño, pero un bellísimo sueño para él. Nota que algo tiene en el boxer y ve que está sucio, parece ser que el sueño fue tan real que se lo creyó hasta su propio cuerpo y por ende su "amiguito" reaccionó al estímulo.
Se fue al baño y se bañó para que nadie se entere lo que le había sucedido.Continuará
ESTÁS LEYENDO
Muero por ti
Hayran KurguEn ésta nueva historia, Armando es un agente especial del Case que está en cubierto para poder poner presos a una banda de asesinos y secuestradores que operan hace mucho tiempo en Bogotá. Betty es una mujer cuyo destino se cruzó por desgracia con e...