𝐕𝐨𝐢𝐝 ʰᵃʳʳʸ ᵖᵒᵗᵗᵉʳ

𝐈𝐕

Heres Slytherini

Por todo el castillo lo único que se escuchaban eran susurros sobre lo que había sucedido con la señora Norris. Estudiantes se cuestionaban entre ellos lo que había pasado y creaban sus propias teorías. No ayudaba que Filch, el conserje, pasaba merodeando el pasillo en que había sucedido lo de su gata como si esperará atrapar al culpable. Tampoco que la mayoría parecía estar decidiendo que el culpable era el elegido de Gryffindor.

Draco, Theo, y Adhara se encontraban sentados en las afueras del castillo disfrutando de la falta de susurros. Ninguno de ellos, como ningún Slytherin, estaba siendo partidario de estos y de los rumores que le seguían. Al contrario, intentaban por primera vez mantenerse alejados queriendo no atraer atención innecesaria que pronto les llegaría.

— ¿Quién creen que sea el heredero?

— Nadie de Slytherin - responde Adhara con su vista aún en su libro — Los de primero se miran completamente perdidos y los mayores están demasiado alerta para ser culpables.

— Además - agrega Theo — Ustedes serían los primeros en enterarse si fuera de Slytherin.

Draco y Adhara comparten una mirada luego de las palabras de Theo, para luego asentir. Theo tenía razón después de todo. No importaba la edad del Malfoy y la Black, todos en Slytherin los respetaban y buscaban su aprobación. Era seguro que si alguno fuera el heredero de Slytherin, ambos descendientes de los Black serían los primeros en saberlo.

Aunque eso no tranquilizó a la castaña, quien solo se preguntaba como cambiarían las cosas una vez todos supieran la historia de la Cámara de los Secretos.

La campana sonó y el trío de plata se dirigió a su siguiente clase, Historia de la Magia. Era una electiva que compartían con diferentes casas, por lo que se podía ver la variación de colores en el uniforme cuando llegaron. Por instinto, la mirada de Adhara encontró la cabellera oscura del Potter antes de sentarse junto a Draco.

El profesor Binns comenzó su clase y, como ya era costumbre, todos estaban casi quedando dormidos en el aula. Al menos hasta que este le concedió la palabra a Hermione.

— ¿Señorita..?

— Granger, profesor - hablo con leve tono nervioso — Pensaba que usted quizás podría hablarnos de la Cámara de los Secretos.

La mano en la que tenia apoyada su rostro Adhara cayó de golpe contra la mesa, el estruendo llamando la atención de varios alumnos aunque la mayoría se mantenían concentrados en Hermione y el profesor.

— Mi disciplina es Historia de la Magia - dijo con voz seca y jadeante — Me ocupo de los hechos, señorita Granger, no de los mitos o de las leyendas.

El fantasma se aclaro la garganta.

— En Septiembre de aquel año, un subcomité de hechiceros sardos...