El Triángulo 1- Rescatando a Will

13.-La navaja de la perdición

Entonces, veo la camioneta...
-Haz como que se te ha salido la cadena de la bici y no mires a la carretera, -le digo a Sophia agachandome- esa es la camioneta de John.
-Vale,-responde Sophia agachandose- que no te vean la cara.
Estamos agachados disimulando y la camioneta pasa rapidisimo sin fijarse en nosotros.
-Van a algún sitio, -dice Sophia subiendose en la bici-¿les seguimos?
-Sin duda.
Empezamos a pedalear, siguiendo a la camioneta, fijandonos por donde vamos para poder volver, diez minutos despues se para y nosotros nos escondemos detras de un muro. Están delante de una gran nave, no hay casi nada al rededor, solo algunas casas abandonadas, llenas de grafitis y agujeros en las paredes, tambien hay manchas de pintura chiquititas de distintos colores por todas partes, en la fachada de la nave hay un gran grafiti de un Halcón y la zona baja de las paredes está llena de grafitis más pequeños.
-Venga rápido, -se oye decir a John- tenemos que contar con el factor sorpresa.
-Ellos seran más, -pregunta uno de los Hurones- ¿no?
-No muchos más, no creo que estén todos y además estaran desarmados, -dice John pasandole un bate de beisbol- venga Hurones, es ahora o nunca.
-¿Están haciendo lo que creo que están haciendo?-pregunta Sophia alarmada- porque si es así hay que avisar a Jake...
-Dime que has traido el pinganillo, porque sino...
-Sí, siempre lo llevo encima por si acaso.
-¡Bien!
>>Jack, ¿estás ahí?
>>Sí, ¿que pasa?
>> Tienes que avisa a Jake, ¡están a punto de atacar a los Halcones!
>>No jodas, vale vale, voy.
>>Rápido.
Han pasdo dos minutos, estamos esperando ansiosos, aunque todavía no han entrado, parece que están trazando un plan.
>>¿Sophia?
>>Dime, ¿ya avisaste?
>>Sí, acaba de salir para allá con Gustav y Helen.
>>Bien, gracias.
>>Avisame si pasa algo.
>>Vale.
Han pasado seis minutos, los Hurones parecen haber terminado el plan, se reparten bates y navajas y se dispersan al rededor de la nave, algunos subiendo escaleras de incendios, otros se quedan en la camioneta, otros se apelotonan en la puerta principal. Entonces oigo ruido de cadenas de bici detrás y aparecen Jake, Helen y Gustav en bici. Jake se baja corriendo de la bici.
-Seguidme, -dice entrando a toda prisa en una casa abandonada- rápido.
Entramos y Jake abre una puerta con una llave, fuera está todo lleno de pintura, pero dentro está todo impoluto, hay estanterias y cajas con pistolas, escopetas y subfusiles, algunos negros, otros de camuflaje, y otros llenos de pintura, las cajas están llenas de bolas de pintura y de cargadores y otras de correas, mochilitas y cinturones, con bolsillos, bolsitas, etc.
-Éste es nuestro arsenal de paintball, no son armas de verdas, pero solo por la munición, -explica jake armandose- por lo demás son casi iguales, coged una pistola y un subfusil de los de colores y cargadores y correas, lo que necesiteis, pero rápido.
No tardamos ni un minuto en prepararnos y salimos fuera, el corazón me va cien, solo he jugado una vez al paintball, y los contrincantes no estaban armados de verdad.
-Disparad a quemaropa, yo me ocupo de los que se han ido por detras, Rick, Gustav, vosotros dos de los de las escaleras y laterales, Sophia, Helen vosotras de los de la puerta principal, disparadlos tambien mientras se van, no dejeis que os toquen, algunos saben lanzar cuchillos, pero muy pocos, seguramente seran los de las escaleras.
-Vale-decimos todos a la vez.
-Gustav tu por la izquierda, Rick tu por la derecha, voy a ir hacia atras rápido, asi que cubreme mientras voy.
Sale corriendo y yo le sigo, llegamos al lateral y los de la puerta principal no se han dado cuenta, hay dos tramos de escaleras de incendios en cada lateral, Jake casi ha llegad al fondo y no se han dado cuenta, hay cinco Hurones en cada tramo, tres arriba y dos abajo, apunto a la cara de uno de los de abajo, pero le doy en el hombro al de al lado, este grita y ambos vienen a por mi, disparo tres veces al pecho del otro y le doy dos, la otra va al brazo, este se tira al suelo dolorido y el otro sigue acercandose, lleva un bate en la mano, entonces me doy cuenta de que los del segundo tramo han visto a Jake, así que disparo a la mano del Huron que venía hacia mi para que se le caiga el bate, este grita y yo corro hacia el segundo tramo. Los de arriba me han visto pero todavia tienen que bajar. Cojo del suelo el bate y se lo lanzo a los del primer tramo para distraerlos, no cae ni a diez metros de distancia, asi que sigo, Jake esquiva el navajazo de uno de los del segundo tramo y le da con la culata de la pistola en la cabeza, este cae y le disparo en la pierna por si acaso. Jake sale corriendo, ha salido ileso pero le persigue el segundo Huron, así que le disparo en la nuca, este cae de boca con un ruido seco. Jake levanta el pulgar y dobla la esquina. Por lo que se oye, las chicas ya empezaron a disparar y Gustav lo mismo. Me doy la vuelta para ir a por los seis Hurones que me quedan, cuando veo que cuatro de ellos han bajado y corren hacia mí, uno levanta la mano y veo una navaja volar en mi dirección. Me agacho, y apunto con el subfusil al que lanzo el cuchillo, le doy en la cara y el cuello, cae con la nariz sangrando. Faltan tres, uno de ellos llega a mi antes de que pueda pensar algo y me intenta dar con bate, salto hacia atrás, e imito a Jake, dandole con la culata en la frente. Cae ahogando un grito, justo cuando otro Huron se acerca con el bate, no me tiempo de reaccionar, así que me da en el brazo izquiero, saco la pistola y le disparo tres veces en la mandíbula, mientras retrocede dolorido le doy una patada en el estomago y cae. El que me falta está aún a 10 metros, asi que recojo el subfusil y le disparo en el pie, este tropiezay cae al suelo, asi que le remato disparando en la espalda. Se que no están muertos, pero algunos estan muy heridos. Entonces, hecho cuentas, me faltan dos Hurones, alzo la vista y veo que están abriendo las puertas de incedios, tardan tanto porque es desde fuera, pero en cualquier momento lo conseguirán. Corro hasta el segundo tramo, el que más cerca tengo, y a mitad de escalera, disparo en el costado al Hurón cuatro veces, este camina de lado y cae por la barandilla, no me molesto en mirar, porque no ha caído de tanta altura, me doy la vuelta para ir al segundo tramo justo cuando el último Hurón entra en la nave. Salgo corriendo, no puedo permitir que dañe a nadie. De camino a las escaleras, al que dispare en la mano ha recuperado el bate y corre hacia mi. Sin preocuparme por el, corro por un lado, esquivando un golpe en el ultimo segundo, y empiezo a correr escaleras arriba, aunque se que me persigue. Entro y veo que hay un Halcón forcejeando con el Hurón que acaba de entrar, asi que disparo al muslo del Hurón, y me doy la vuelta para ver cuanto le falta al Hurón que me perseguía, justo cuando me va a asestar un golpe, me agacho justo a tiempo para que el bate pasase por encima mía y diese a su compañero, este cae al suelo inconsciente, y le doy con la culata en la mandíbula al del bate, este cae y rueda escaleras abajo.
-¿Tú quien eres?-pregunta el Halcón recuperando el aliento, auque aún está alerta.
-Un amigo de Jake, -digo dandole la pistola y un cargador-vengo a ayudar.
Bajo corriendo las escaleras para ayudar a Sophia y Helen, mientras tiro un cargador vacio al suelo y meto uno nuevo, me cuesta porque me duele bastante el brazo izquierdo por el golpe de antes.
Doblo la esquina, y veo que la gran mayoria de los Hurones están inconscientes o doloridos en el suelo y que algunos Halcones han salido al oir disparos. Sophia y Helen siguen disparando, y parece que se estan quedando sin bolas, asi que lanzo dos cargadores a ras de suelo y corro hasta el otro lado a ayudar a Gustav.
Gustav está en el primer tramo agachado, parece que en este lado habia más, hay cuatro en suelo y dos en el primer tramo, todos caidos, pero en el otro tramo hay seis y están a punto de entrar.
-¿Que haces aquí?-pregunta Gustav nervioso.
-Ya acabe con mi lado, eran menos, vengo a ayudar.
-Si pudieses entrar y salir por aquella puerta seria la bomba.
-No puedo, tendría que pasar otra vez por allí, -explico- si quieres ve tu al segundo tramo y yo te cubro desde aqui o al revés.
-Vale, -dice bajando- cúbreme.
Subo hasta apoyarme en la barandilla, y apunto a los Hurones que están en la parte de arriba de la escalera. Hay dos en la puerta, dos abajo y dos a media escalera. Disparo a los dos de arriba y les doy a los dos, a uno en la sien y en hombro y al otro en la barriga y el pecho. Como no tengo ángulo para darles a los que están a media escalera, me cuelgo el subfusil a la espalda, me subo a la barandilla y salto al tejado, me quedo colgado, así que me impulso poniendo los pies en el marco de la puerta. Camino por el borde porque es un tejado a dos aguas y no quiero caerme. Cuando llego a la parte que está encima de las escaleras, bajo. Los Hurones se dan cuenta y se dan la vuelta, Gustav ya tumbo a los dos de abajo y esta apuntando ya a estos. Gustav y yo disparamos a la vez y le damos al mismo en la cara y la nuca, pero el otro se mueve hacia un lado y lanza un cuchillo en mi dirección. Noto un dolor muy intenso en el muslo que me recorre todo el cuerpo. Lo último que veo antes de desmayarme es al Hurón cayendo...