*El secuestro*

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En el reino, se encontraba un soberano segado en la ira y buscando la manera de obtener la supremacía por encima de todos los reinos.

-me llamo mi señor- el ministro hacia acto de presencia en la sala del trono.

-has mostrado preocupación y entrega a tu reino-hablo el rey dando sierta inclinación en señal de respeto-te pido utilices tu sabiduría  para mostrarme caminos para que podamos encontrar un camino a la gloria de este reino-

Si alguien pudiera describir la sonrisa del malvado hombre, le encontrarían semejanza con el gato de Alicia en el país de las maravillas, retorcida, siniestra en espera de algún movimiento.

-mi rey, ha escuchado a los grandes sabios aquella frase: el que tiene un vidente a su lado la fortuna le sonríe- dejo crear curiosidad en el rey. - Tengo el plan ideal para que este reino sea próspero y la gran magnificencia de su alteza quede marcada por generaciones " El gran rey que tuvo un vidente a su lado y fue invencible".

El rey sólo necesito oír egolatría hacia su persona - Te escucho-

Solo eso basto para que este ser lleno de maldad hablará- Necesitaré de sus mejores hombres, unos cuantos días y aquí estará la gloria del reino- hizo una reverencia y se mantuvo inclinado esperando la aprobación.

- Son tuyos, toma de mus mejores guerreros, te autorizo dinero de manera libre y regresa con tu promesa cumplida- más de un destino fue sellado esa tarde, al amanecer el ministro partió con un destino que sólo el conoce pero que su avaricia lo guiará.

♧♧♧

En el pequeño reino jóvenes hermosos dormían juntos por capricho concedido por sus padres, quién no concedería esa petición a tan nobles encantos.

- Duerman, mañana será un gran día seremos presentados como donceles con conocimiento y libres para elegir a quién amar- comentó Seokjin en medio de los mellizos.

-Sip, y antes debemos tomar una relajante ducha en el lago- Taehyung muy feliz agrego como parte de su rito personal entre ellos.

-mimos- puchereo Jimin abrazándose cuál koala a Seokjin.
Así los tres durmieron para esperar ansiosos el amanecer.

Muy temprano antes de que algunas personas despertarán a hacer sus labores,los chicos emprendieron camino al lago, llegaron y jugaron un rato como siempre, se bañaron como de costumbre, vistieron sus atuendos como su rutina habitual, y tomaron la vereda a casa.

Probablemente extrañaría esos prados, probablemente quedarían en sueños esas veredas a su hogar el olor de las flores, el abrazo de sus papás, ¿los abrazos entre ellos serian los últimos?, pensamientos que turbaban la cabeza del mayor al despertar del trance y observar a sus hermanos maniatados, amordazados y con una cara bañada en llanto.

¿Que ocurrió ?, su noble corazón no dudo en ayudar a un adulto mayor con su carreta que no podía avanzar, que más da si llegaban ligeramente tarde a casa el señor necesitaba ayuda y estaba solo, eso pensó Seokjin antes de toda la catástrofe que cambiará sus vidas.

Ahí estaban presos de miedo y atados físicamente en una carreta con rumbo a lo desconocido, sus corazones latiendo cual locomotora y ojos rojos cual carbones encendidos de tanto llanto acallado por esas telas que aprezaban esas boquitas alegres llenas de risa, que ahora ahogaba sollozos y lamentos.

Un ministro orgulloso por su cacería que no sólo logró un vidente, si no tres hermosos jóvenes donceles que denotaba virtuosidad por donde se les mirará, no sólo lograría el cometido, podría poseer a uno de ellos para si mismo era lo que pediría de recompensa a su rey, uno para él, uno para el rey y uno al servicio de la prosperidad del reino, sí iba a ser recordado por todos sus descendientes que llegarían de alguno de esos donceles angelicales, que mejor legado que hermosos seres traídos por esas obras de arte que ahora el poseía y usaría para su beneficio.

Ya faltaba poco para llegar al reino, poco para su gloria y su fantaseada recompensa, días transcurridos cuatro para los donceles los cuales perdieron la noción del tiempo en desesperó e incertidumbre.

Ocho días para un ministro que ya podía contarse en el lado derecho de su rey y su hermosa descendencia al desposar a uno de esos hermosos donceles, delicados, llenos de belleza.

Una eternidad para unos padres desconsolados buscando a sus amados hijos rogándole a la madre tierra regresaran a casa a su vida, a sus brazos.

EL VIDENTE  ☆NAMJIN☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora