"El camino hacia la perdición" [Taekook]

Capítulo diez

Se apresuraron a comer para correr directamente hacia la escuela, las clases estaban a punto de empezar y cada uno tenía cosas importantes por hacer allí, no podían perder el tiempo. Jungkook debía dar clases a sus alumnos y Taehyung... Bueno, Jungkook no sabía muy bien que tanto hacía aquel rubio en la oficina de Namjoon.

Estaban dentro de la escuela, los alumnos caminaban rápidamente hacia los salones mientras estos se quedaban parados allí hablando.

—¿Hoy tampoco verás mis clases? —Preguntó Jungkook con un tono un poco triste. Taehyung sonrió tocando su cabeza.

—Te prometo que la próxima te veré. Pero tengo que seguir hablando algunas cosas con Namjoon de las clases de educación sexual.

—Ya llevas muchos días en eso. Normalmente no toma tanto tiempo preparar una clase —Se quejó un poco.

—Esto es distinto, es la primera vez que se les dará está materia a los alumnos, por eso lleva mucho tiempo.

Jungkook asintió un poco decaído. A veces no sabía si estaba molestando a Taehyung, siempre le pedía que lo viera dar las clases pero ciertamente nunca le preguntó directamente si le gustaba o se divertía viéndolo dar clases. Porque quizás para el rubio quién era un alma fiestera podría parecerle un poco aburrido el ver por horas a una persona hablar.

Bajó su cabeza preocupado. ¿Que tal que Taehyung solo lo veía porque se sentía obligado a hacerlo?

—Taehyung... —Llamó, el contrario lo miró atento— ¿Mis clases te parecen... —Una voz lo interrumpió.

—¡Profe, Jeon! ¡Hanbin me está molestando! —Dijo aquel niño quien se acercó interrumpiendo.

—Yo... Tengo que irme —Comunicó el pelinegro a Taehyung.

—Tus clases son las mejores, Jungkook. Y no, no son para nada aburridas, podría verte por horas —Dijo el rubio con una sonrisa, adivinando casi perfectamente lo que Jungkook había querido preguntarle.

Y es que en ese tiempo que habían estado más cerca que cuando recién había llegado al pueblo; pudo conocer un poco más al pelinegro, había notado que este se había vuelto aún más inseguro de sí mismo y no dejaba de buscar aprobación en Taehyung de cualquier cosa que hiciera.

—G-Gracias —Dijo con una sonrisa tímida.

El niño tomó a Jungkook de la mano queriéndolo llevar al aula para que regañara a la persona que lo molestaba. Taehyung sonrió mientras veía al pelinegro siendo arrastrado por el niño. Se despidió de Jungkook con la mano, el contrario imitó su acción con una pequeña sonrisa.

Taehyung suspiró arreglando por encima su vestimenta al igual que su cabello. Caminó hacia la oficina de Namjoon y tocó unas cuantas veces antes de entrar sin esperar por el permiso.

Namjoon quien estaba concentrado revisando unos papeles en su escritorio, rodó los ojos con cansancio al verlo.

Taehyung rió divertido.

Se podría decir que el castaño parecía no "soportarle" mucho y lo entendía perfectamente, él también estaría cansado si una persona desconocida llegara todos los días a su oficina para molestar.

—Es bueno verte a tí también —Dijo Taehyung sarcástico, cerrando la puerta detrás de él.

—¿No te cansas de venir?

—¿No te cansa fingir que te molesta? —Comentó Taehyung en un tono suave, casi melodioso— Te doy ayuda gratis y es así como lo agradeces —Negó el rubio fingiendo estar decepcionado.

A pesar de que Namjoon lucía molesto, lo había encontrado más de una vez mirando alguna parte de su cuerpo. Sobretodo su trasero; aunque tampoco era como si Taehyung no lo pusiera a la vista con esa intención.