[10]

426 38 0
                                    



La chica se levantó de su cama, el lobo recorría su cuerpo con la mirada, esas curvas que ella tenia eran tan sexys aún cuando esta no poseía bello en su cuerpo, a excepción de una parte.

El lobo se quedó quieto al momento de ver como un líquido escurría por su pierna, ahora era la chica la que caminaba hacia el, el parecía no querer perder la cabeza con ella, debía mantenerse tranquilo si no quería cometer un error el cual le costaría la vida de aquella criatura.

Aquel chico pudo ver que encima de un mueble de madera cerca de la cama habían unos supresores, al parecer la chica ya había tomado más de tres, lo cual era peligrosos, su mirada estaba perdida, ya no tenia el brillo de antes, el corazón de el lobo latía tan rápido, tan fuerte como un tambor, pronto la chica se desmayó en cuanto llegó a los brazos de aquel lobo.

Le escurría un líquido translúcido, pero este estaba acompañado de sangre, lo cual estaba volviendo loco al lobo.

-Vamos... yo se que quieres morderle el cuello, despedazarla hasta que no quede nada de ella...- Una voz se hizo presente en la mente de el lobo.- No... yo no quiero eso, no quiero hacerle daño a nadie...-.

-No reprimas ti deseos solo por creer que estas enamorado de ella... admítelo de una vez- Esa voz jamás se había presentado en todo lo que llevaba de vida el lobo-No! yo de verdad la amo... se que mis sentimientos por ella van más allá de mi instinto...-

La mente de el lobo decía algo pero los movimientos de el lobo decían lo contrario, el chico recorría todo el cuerpo de aquella criatura hasta posarse en la vagina de ella, un lugar en el cual ella tenia bello, muy poco pero lo tenía, algo que excitaba al lobo, después de unos minutos la chica despertó, y el lobo dejó de pelear con la voz que lo incitaba a devorarla.

Este "recuperó" los sentidos al sentir un pequeña mano masajear su gran pene, la chica estaba totalmente sonrojada, el lobo, como se de instintos de tratara, acosto a la chica en la cama y empezó a besarla desesperadamente, la chica se deshacía de la camisa de un lobo travieso, pero un ruido hizo que ambos realmente recuperaran sus sentidos.

Alguien tocaba la puerta de la chica, al parecer era la enfermera-_____, ¿te sientes mejor?- decía la enfermera de el otro lado de la puerta.

La chica tomó su colcha y se tapó toda mientras el lobo seguía encima de ella, pero el lobo estaba muy apresurado.-S-Si enfermera... me encuentro mej...Haaa!-.

El lobo lamia fuertemente el critoris de la chica mientras que dos de sus dedos entraban al interior de ella.

-No te escuchas muy bien _____... ¿segura que te sientes mejor?- decía la enfermera mientras intentaba abrir la puerta -S..s-Si..- dijo la chica para así tapar su boca, ahora no solo los dedos de el lobo estaban dentro, su larga lengua estaba explorando lo más profundo de ella. La chica solo acariciaba las orejas de aquella criatura mientras se escapaban unos cuantos gemidos.

-Bueno... voy a creerte, que descanses _____.- dijo la enfermera para así retirarse -Haa- gimió la chica al sentir que los dedos de el lobo presionaban su punto más sensible -Mmm... lo encontré- Dijo el lobo ya fuera de la colcha mientras sonreía tiernamente.

El lobo siguió presionando aquel lugar a la chica tanto le gustaba, sus ojos estaban casi en blanco de tal placer que sentía, ya que mientras que el lobo presionaba el mismo lugar una y otra vez, la chica masajeaba su clítoris, pronto la chica se corrió y cayó dormida, el lobo seguía encendido, ya con su pene de fuera, el se masturbo encima de la chica, al correrse su semen cayó encima de aquella mujer, una gran cantidad de semen que se escurría encima de los senos de aquella mujer.

El lobo recuperó sus sentidos, y rápidamente fue por un paño húmedo para poder limpiar el cuerpo de la mujer, y una vez que terminó se acostó con ella, su cara la colocó en medio de los senos de la pequeña, y al oler aquella fragancia que tanto le gustaba, pronto cayó en cuenta que se estaba quedando dormido.

Por suerte, ya era fin de semana, pero aun así el lobo no podía quedarse a dormir ahí con la chica, así que acomodó sus prendas y se dispuso a salir de la habitación de la chica, mientras caminaba lentamente no pudo evitar que su cara se sonrojara pensando en aquella mujer que fue la primera en hacer que sus instintos salieran, la primera que le robó el corazón... si así se podría decir.

....

Había pasando un tiempo desde aquel íntimo encuentro entre nuestros protagonistas, pero estos no habían tenido la oportunidad de verse debido a que el celo de aquella chica ya se había calmado, pero su período aún no, por lo cual tendría que permanecer en su habitación, con un permiso de enfermería para poder estar ausente de sus clases.

Ellos no se habían visto, pero si han hablado en las noches, el lobo estaba desesperado por volverla a ver, pero la chica estaba preocupada de que este la viera, al parecer su cabello había estado cayendo de poco a poco, no se nota mucho, ella apenas y se pudo dar cuenta que su cabello estaba cayendo más de lo normal, pero aun así por dentro se moría de ganas por verlo, ella podía recordar muy bien lo que había pasado hace días, se sentía apenada y quería disculparse lo más pronto con aquel lobo.

__________________________________

Continuará

__________________________________

Quiero devorar tu corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora