Harry salió corriendo cuando se encontró a Cho besándose con Malfoy.
Eso no estaba bien, para nada bien. Su pecho se apretó ante el recuerdo del rubio rodeando con su brazos la cintura de Cho.
Algo en Harry no estaba bien.
Su rivalidad con Malfoy era legendaria para todos los de Hogwarts, nadie ya se sorprendía por sus discusiones en clases o sus miradas retadoras durante el desayuno, el almuerzo y la cena. Siempre habían sido solo ellos dos, ya ninguno de sus amigos le seguían el juego y hasta Pansy parecía llevarse bien con Hermione.
Cuando comenzó a notar que Cho le coqueteaba, en realidad cuando Hermione le dejó claro el interés de su compañera, Harry sintió muchas cosas, sobre todo una emoción gigante por ser querido por alguien.
Entonces supo de Malfoy iba detrás de ella y más temprano que tarde, la chica se volvió un trofeo a ganar.
Ambos comenzaron a cortejarla y Cho parecía encantada con las atenciones de ambos.
Pero algo le decía a Harry que ella le prefería a él y que Malfoy solo era una cara bonita. Hasta que los encontró en el campo de quidditch, besándose en frente de todos.
Lo que ahora aterraba a Harry era que, en una partecita de su cabeza, envidio a la chica.
Ese pensamiento, de querer ser él quien Malfoy abrazaba dulcemente en frente de todos, sin importarle una mierda nada, fue lo que terminó asustándolo y haciéndolo correr del lugar.
Se repitió mil veces que Malfoy era un idiota estirado y su enemigo mortal. Intentó convencerse que no era ni guapo, ni divertido, ni sus ojos preciosos o su cabello hermosamente brillante.
Nada pudo hacer para desacelerar el ritmo de su corazón.
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Drabbles de Mayo | Drarry
FanfictionDraco Malfoy es de Harry Potter y viceversa, quien lo niegue, se le tallara "no debo decir mentiras" en la piel y créanme, no será lindo.