- Otra perspectiva- Missa, QSMP-

Capítulo 17- Missa angel

Los presentes salieron al patio que tenía la gran casa de Máximus con las intenciones de que Missa pueda ser un angel.

Mientras Rubius le explicaba algunas cosas a Missa, Máximus estaba comiendo un snack, Cucurucho se imaginaba como se vería Missa como ángel y Melissa leía una revista desinteresada.

Missa no parecía confiado, no creía que podía ser mágico de alguna forma u otra.

– No entiendo, ¿De dónde sacaste que yo podría ser un ángel?– Pregunto el pelinegro.

– No son inventos míos, tienes el espíritu de un ángel y si otro ángel superior o un dios te lo concede, podrías tener la magia de un angel– Rubius comento.

– Entonces, ¿Me estás dando el permiso para ser un ángel con poderes?–

– Básicamente, si– los dos chicos se sentaron en el suelo.– Escucha, para darte las habilidades de un ángel, tengo que recitar un antiguo conjuro en latin–

– Bien, solo espero que no te confundas y me conviertas en un gato o algo así...– El ángel tomo las manos de Missa.

– In virtute, quam dii mihi dent, magica dederunt mihi, et reverentiam meam illis...– alrededor de los dos jóvenes, un círculo de luz se formó marcando que estaba funcionando– Missa Sinfonía Fiet unus ex nostris necessariis artibus ad angelum a diis missum esse– Rubius cerro los ojos terminando el conjuro.

Missa repitió la acción, sintió como un escalofrío recorría su cuerpo y como se sentía con más energía.

Máximus se ahogo con uno de las papas que estaba comiendo, Melissa volteo a ver sorprendida y Cucurucho se ruborizo notablemente.

Al volver a abrir los ojos, Missa notó que ahora vestía una remera y un pantalón blanco junto con una capa dorada, la piel de sus manos estaba decorada con pequeñas manchas verdes agua y tenía unas bonitas alas blancas. El joven dio una vuelta examinandose.

– ¡Soy un ángel!– celebro el menor tocándose las alas.

– ¡Funcionó!– Máximus agrego.

– ¡Obvio que funcionó!– Rubius Ángel lo empezó a mirar de arriba abajo.

– Estás precioso...– soltó Cucurucho acercándose al pelinegro– Ey, tus ojos son verde agua–

– ¿¡En serio!?– los tres chicos asintieron a la vez.

Melissa se mantenía callada viendo su revista, le importaba poco y nada lo que estaban haciendo... En realidadad, si le importaba...

  Missa celebraba sorprendido su nuevo descubrimiento.

– ¿Y ahora que?– Maximus le pregunto.

– Mira Missa, primero lo primero, empieza con querer transformarte en humano otra vez– Rubius indico– Puedes imaginar la ropa que quieras pero tienes que concentrarte en ser humano otra vez– Missa asintió.

Pensó en algo simple, un buzo (chamarra, polera) lila y unos pantalones negros. Brillos verde agua aparecieron transformandolo en humano y con la ropa que quiso.

– Wow– Missa se volvió a sorprender.– ¿Y ahora que? Tendria que aprender a husar mis habilidades o si no no sabré como revivir a Tilín.–

– ¡Exacto! Por eso estás aquí– Rubius Ángel le dedicó una sonrisa.

Un rato después todos seguían alli, Missa y Rubius practicaban mientras Maximus y Cucurucho compartían teorías y jugaban a las cartas. Melissa estaba en su mundo, algo la desconcertó, su comunicador no paraba de sonar.