constellatións

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《Tensión sexual》

-Que asco- dijo Susan mientras masticaba su pedazo de carne y miraba mal a Peter, mi rostro estaba rojo, no lo dudaba ni por un segundo.

-¿A que se refiere Peter, Su?- pregunto Lucy inocentemente.

Ay Lucy, pobre e inocente Lucy, no querrás saberlo, aún eres joven para este tipo de cosas.

-Pues...- empezó a decir Peter, me atragante con mi jugo y lo interrumpi antes de que me avergonzara.

-¡De nada!- exclamamos Susan y yo.

-Lo sabrás cuando seas mayor- dije mirando mal a Peter por casi arruinar su inocencia y de paso mi dignidad.

-Tu no eres mayor, mamá dice que los mayores son los que tienen quince para arriba, y tu tienes catorce- dijo la pequeña Pevensie causando que todos en al mesa rieran y yo la mirase mal, aclare mi garganta.

-Bueno, digamos que yo tan inocente no soy, pero tú tienes once, asique procura permanecer así hasta los dieciocho- dije tocándole la nariz con mi dedo, ella río.

-O hasta los treinta...- murmuró Peter y le di un codazo.

-¡Esto esta delicioso!- dijo Susan devorando su plato de comida, mientras que Susan comía con paciencia y educadamente, Peter comia como una bestia- Hay algo que se llaman modales, no se si lo sabías Peter- dijo mirandolo mal.

Este le saco la lengua, y siguió comiendo su carne.

Cuando finalmente terminamos estábamos tirados los cuatro en el piso con una mano en nuestro estómago, habiamos quedado realmente llenos.

-Creo que podría comer de nuevo- mencionó Peter mirando el cielo que comenzaba a oscurecerse- Si, sin dudas podría comer de nuevo-

-Ya somos dos- dijo Susan.

-Tres- dije yo.

-Cuatro- completo Lucy.

Las faunas y el fauno llegaron, llevaron a Peter a su carpa y a las chicas y a mi a la nuestra.

Cuando entramos la fauna nos pasó unas batas para dormir, eran sencillas, pero bonitas.

Lucy fue la primera en caer dormida, no tardó nada en quedarse profundamente dormida.

-La tensión sexual entre tu y Peter es desesperadamente notoria- dijo Susan con una sonrisa pícara, le tiré un cojín a la cara.

-Callate, no hay ninguna tensión sexual- le reclame y ella rodo los ojos.

-Si, como digas- dijo rodando los ojos.

-Buenas noches- les dije a Susan mientras me acostaba en mi cama con bastante calma, ¿hace cuánto que no dormía en una cama tan cómoda?