rechazada y reclamada

UN NUEVO SECRETO

--Creo que debemos aprovechar el baño no crees la voz ronca de absalón hizo de estremecer a Celeste claro que quería aprovechar el baño pero su esposo aún se veía cansado--- por supuesto pero creo que es mejor que descanses, él sonrió picaramente mientras desabotonaba  su túnica el gimio bajo mientras veía en inicio de sus senos mientras depositaba pequeños besos en sus clavículas y le decía palabras cálidas ----no te preocupes me encuentro bien,lo único que ahora quiero y necesito es la calidez de mi esposa mientras decía eso se levantó con ella Todavía en sus brazos ella por reflejo abrazos sus caderas con sus piernas,- creo que antes tienes que quitarte la ropa ,Absalon sorio ante las palabras de su esposa--bueno como dijo mi esposa creo que estoy cansado ¿podrías hacerlo por mí?, la bajo lentamente y ella se puso manos a la obra mientras quitaba cada prenda de su hermoso y tonificado cuerpo masculino podía sentir el rubor en sus mejillas y la mirada Ardiente de esos hermosos ojos verdes una vez desnudo él entro en la bañera extendió su su mano y con su dulce voz aterciopelada le dijo --me bañarías creo que no puedo ni siquiera tomar el jabón, Celeste camino hacia la bañera tomó la suave esponja y comenzó a tallar el cuerpo de su esposo  quien al final no soportó más y envolvió su enorme mano en la mano de ella-- Quítate la ropa y entra, ¿ cómo podía negarse a su pedido? se despojó de su ropa ante la mirada ardiente del causante de sus placeres con cuidado entró en la bañera pero antes de poder sentarse el puso sus manos en sus caderas  haciendo que su sexo quedará justo frente a su cara --'eres tan hermosa ella sintió erizar los vellos de su nuca cuando el aliento caliente de aire abanico sobre su piel desnuda sintió sus labios acariciándola dando suaves besos de poco en poco ella se dejó envolver en ese mundo que le gustaba el mundo del placer haciendo un gemido bajo, él la sintió tensarse le gustaba saber que era el único hombre que podía hacer eso y así se dispuso a hacerle el amor de una manera tan sutil al principio pero  no había nada en el mundo que quisiera más que  tomarla con fuerza incluso sonrió ante la idea de tomarla y poseerla durante toda la tarde y la noche habían pasado tanto tiempo separados anhelandose uno al otro y ahora tenían el tiempo para hacer realidad cada una de sus pequeñas o grandes fantasías él no permitiría que nada en el mundo se atreviera a separarlos esta vez no daría Un paso atrás a él no importaba que o quién se interpusiera entre ellos él no dudaría en acabarlo cualquier obstáculo con Cualquier nombre nada lo haría alejarse de su compañera la sentó con cuidado sobre él al tiempo que besaba sus pechos -- creí que  estabas cansado pronunció ella entre jadeos lo que le provocó una sonrisa -- mi amor para ti Jamás estaré cansado ni ocupado y con esas últimas palabras se dedicó a darle un placer que ella merecía para demostrarle el amor del  que solo Ella era dueña.

Al llegar la mañana Celeste abrió los ojos a pesar de la rigurosa sesión que tuvo con su esposo increíblemente no se sentía cansada Tal vez un poco dolorida pero nada que no pudiera soportar Ella tenía la espalda pegada al pecho caliente de su esposo mientras era rodeada por sus enormes brazos sonrío feliz pero sabía que tenía un deber que cumplir con cuidado salió de la cama por su parte Absalon seguía durmiendo sus semblante era relajado y ella podía ver que se encontraba mejor ya no estaba pálido con un suspiro de alivio procedió a realizar su rutina matutina limpió los rastros de amor de la noche con su esposo se vistió y salió en busca del desayuno.
Conforme iba caminando pensando en que le gustaría almorzar a su esposo dado que aún no conocían en sus gustos en cuanto a comida solo esperaba encontrar algo apetecible para él cuando alguien la tomó del brazo ella giró su rostro para ver quién era y se sorprendió al ver a Adolfo este tenía en su semblante se veía atribulado--- señorita ¿podemos hablar un minuto?, con un suspiro ella asintió y se dejó guiar por él hasta en la tienda del Alfa quien por su parte parecía prácticamente haber despertado cuando entro lo vio tenía puesto un pantalón de chándal y tenía el torso completamente descubierto en algún otro momento ella hubiera tragado saliva y se hubiera puesto nerviosa pero ahora no; cuando Máximo la miró en silencio ella pregunto --¿puedo entrar? sonó tranquila por un momento en la Alfa se sintió herido Cómo era posible que ni siquiera se pusiera nerviosa cualquier otra mujer en su lugar se habría sonrojado como mínimo pero ocultó su decepción --por supuesto chiquilla pasa, ella y Adolfo entraron a la tienda del Alfa No sabía para qué Pero bueno al final de cuentas accedió --el señor Adolfo me dijo que quieren hablar conmigo ¿Qué sucede? El Alfa miraba Adolfo  molesto por un minuto  ambos procedieron a sentarse frente a ella --Tenemos algo que preguntarte y queremos hacerlo directamente contigo debido a que no confío en la bola de idiotas del gremio de magos ante sus palabras Celeste se molestó,  era obvio que los magos tenían secretos ella misma lo había descubierto por eso decidió hacer su investigación por separado pero ni loca iba a admitir eso con el Alfa además entre el gremio y esos idiotas estaba su esposo, a ella le molestaba a la forma en como Máximo se refería a él, pero decidió ignorar por ahora su comentario y se limito a asentir.