Un día, recorriendo el bosque que me pertenece, un grupo de crías de Wyver estaban reunidos alrededor de lo que parecía un cuerpo inerte,me acerque y espante a los Wyver con mi arco, una vez que se fueron, me acerque y vi que era un hombre, el cual estaba herido de gravedad.
Me preguntaba como llego hasta el bosque, si la capital se hallaba muy lejos del lugar, y ningún aventurero o mercenario seria tan idiota para adentrarse en el bosque, pero no era momento de eso, el tenia que ser tratado y curado inmediatamente...Lo cargue en mi espalda y lo lleve a mi cuartel, donde podría ser atendido.
Paso un tiempo desde que llegue y el muchacho fue atendido, cuando lo encontré, no me fije mucho, pero parece tener cerca de la misma edad que yo (Unos 19 o 20 diría yo), en sus pertenencias, cuando lo registraron, encontraron una maleta con ropa, comida, posimas, un libro de hechizos avanzado, una bolsa con muchas creins (nuestra moneda), una daga muy afilada y una espada tan pesada, que solo pocos podrían manejar y con solo su peso, si fuese arrojada, derrumbaría fácilmente un muro de concreto reforzado.
Estaba sumergida en mis pensamiento y dudas sobre aquel chico, cuando se despertó repentinamente, salto de la cama, agarro su espada y su daga y...
-¿Donde estoy?- Pregunta exaltado.
-Estas en el cuartel del fuego, muchacho... Y te eh rescatado de un grupo de crías de Wyver.- Le respondo tranquilamente, pero alerta por si el intenta algo.-Esas bestias, a pesar de ser crías, te habrían hecho morir en un gran sufrimiento y, ahora mismo, no serias mas que simple polvo, ya que suelen comerse hasta los huesos de quienes son sus presas.-
El muchacho, callo un momento, observo todo a su alrededor, como vigilando y susurro unas palabras en un lenguaje antiguo, que nadie entendió ni escucho.
-¿Quienes son ustedes?-Pregunto, pero le respondí.-¿Quien eres tu?- Le digo con una sonrisa burlona y un tono sarcástico.-Te eh salvado la vida y responder a mis preguntas es lo menos que puedes hacer.- El chico callo, suspiro un poco y respondió...-Me llamo Bancrein, pero me dicen Ban, para su comodidad, soy un mercenario.-Esto ultimo lo dijo un poco incomodo, como si ocultase algo, pero se lo deje pasar.-Y de camino a Firligh, fui atacado por un grupo de trasgos, acabe con la mayoría, y hubiera acabado con todos de no ser por...-El muchacho callo, no lo culpo, debió ser muy frustrante y doloroso recordarlo, ya que las heridas que tenia eran similares a las que dejaría una arpia, pero eran mas de las que una sola podría hacer.
-Entonces Ban...-Le digo, cambiando el tema.-¿Para que quieres ir a Firligh?-En lo que me responde.-Voy en busca de algo, un objeto que podría salvar la vida de una persona muy querida para mi, y lo obtendré a cualquier costo, sin importar el precio o lo que deba hacer para obtenerlo!- El tono en el que lo dijo no me gusto nada, entonces, para advertirle en lo que se estaba metiendo si intentaba entrar a Fireligh a la fuerza le digo.-Pues estas muy cerca de Firligh.-Me regreso a ver sorprendido, pero dudando.-Aquí, atrás del cuartel, esta la puerta del fuego, una de las 8 entradas a Firligh, pero por lo que me dices, me temo que no podre dejarte salir, a menos que cambies de opinión y regreses por donde viniste.
El muchacho, enojado, responde.-No me iré de aquí, tengo que entrar a la ciudad, y si ustedes no me dejan, no me queda mas opción que entrar a la fuerza!-Me sorprendí por lo que dijo, pero me controlo inmediatamente y...-Si quieres ir, anda, pero primero tendrías que derrotarnos a todos, y no sabes cuantos somos, ni que somos capaces de hacer para proteger la puerta de intrusos como tu...-Me mira y solo sonríe diciendo.-Son 15.368 soldados, incluyéndote, hay 3.692 sirvientes, también se que hay 5.070 prisioneros, que estarían felices de que yo los liberara y me ayudarían a la rebelión, y finalmente, hay 20.000 caballos, que podría usar para escapar, también hay suficiente comida y recursos para unas 3 décadas, descontando claro, los campos que tienen al sur de este lugar, que terminaran su producción en 3 semanas mas.
Quede atónita ante tal respuesta, acertó en todo, números exactos y nadie en la habitación supo como averiguo tal información, desde que llego, solo a estado dormido y cuando despertó, empezamos esta charla.
Ban, lanza una mirada y una sonrisa triunfadora, diciendo-¿Quieres saber como averigüe todo esto?, señora del Fuego Carmesí.
Me paralice y no supe que decir, averiguo hasta mi apodo, y me imagino que mi nombre ya lo sabría, incluyendo el de todos en la habitación, mejor dicho, el de todos en el cuartel y sus alrededores. Me trato de calmar lo mas que puedo y le respondo.-Dime, ¿Como has averiguado todo?-Y solo responde.- Recuerdas lo que dije antes, ese pequeño susurro, pues era magia y ya te imaginaras el resto...
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El Hada y El Mago.
FantasyLa historia gira entorno a Adelaide, una joven hada ordenada, bella, fuerte y carismática, la cual, se encarga de custodiar una de las 8 Puertas, las cuales abren paso a el reino de Firligh, en el cual conviven múltiples criaturas mágicas, con los s...