𝑽𝒆𝒓𝒅𝒂𝒅.

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Jschlatt miraba al techo mientras esperaba a qué su despertador le indicara que tenía que levantarse e ir a trabajar, por su mente pasaba la imagen de el pato la noche anterior, cuando solo quiso ofrecerle una copa y este se escogió lleno de miedo.
¿A qué punto había llegado?

Se sentía muy mal, recordaba de manera borrosa a su esposo lleno de lágrimas mientras era asfixiado por el mismo.
Estaba arrepentido.

Pero piénsalo bien...

¿Tenía derecho de sentirse así?

Sentía miedo, pero no sabía exactamente de qué, había muchos pensamientos en su cabeza que solo lograban enredarlo.

Finalmente, el despertador sonó, paso ambas manos por su cara mientras dejaba salir un suspiro de frustración.
Volteo a ver a su lado, el pequeño pato estaba casi hasta la orilla de la cama envuelto en sus alas; Pudo darse cuenta cómo estás tenían un amarillo opaco, estaba seguro de que antes no se veía de esa manera.

Se dio un baño y bajo a desayunar, puntual como siempre salió de casa a las 6:00 AM.

Especialmente ese día se sintió con ganas de mandar todo al carajo, no era notorio, pero de verdad se sentía mal.
Fue a trabajar, estaba acostumbrado a que todos le abrieran paso cuando llegaba, todos lo respetaban, hasta el punto de que algunos le llegaban a tener miedo.

Siempre le importaba poco, pero ese día le resultó algo incómodo.
8:00 vio a su esposo pasar con rapidez por el pasillo, sosteniendo varios folders con documentos y su mochila, se veía muy cansado...

Más tarde llegó Philza para hablar sobre la remodelación del casino, pues Jschlatt necesitaba atraer a más personas, nunca le resultó peligroso tener a gente inocente y a delincuentes conviviendo en el mismo lugar, mientras dichos criminales respetarán las reglas.

Su padre debería estar decepcionado del camino que eligió.

—Entonces podríamos traer mesas nuevas y más grandes, también deberíamos cambiar las alfombras de todo el lugar, son horribles.—

—Mhh, si, también me gustaría hacer el espacio de Alex más grande, para que más gente pague por el servicio, quiero cambiar su mesa y también la iluminación.—

—Tu déjamelo a mí, no te preocupes por nada, es más, deberías tomarte unas vacaciones, en cuanto empezamos a remodelar cerraremos el casino.—

—¿Vacaciones?... No he ido de vacaciones en años Phill.—

—Pues es tu oportunidad, ve y relájate, pasa tiempo con tu familia, vallan a algún lugar tranquilo.—

—No creo que esté hecho para eso sabes, en realidad nunca he pasado tiempo con mi familia.—

—No es sorpresa, cada navidad te la pasabas hablando por teléfono, ¡¡¡PERO DESPUÉS DE LA TONTERÍA QUE DIJISTE LA VEZ PASADA!!!—

—Deja de joderme con eso ya!—

—No deberías descuidar tu matrimonio de esa manera, cómo crees que se siente Quackity, el te ama de una manera que no tienes idea.—

—Pero ya te expliqué que fue lo que paso entre nosotros.—

—Escúchame, yo fui su padrino de bodas, tú crees que después de haber participado en una boda a escondidas me hace creer que no lo amas!—

—Cállate...—

—Tus padres si tuvieron algo que ver, ¡ELLOS QUERIAN QUE TE CASARAS CON ELLA!—

—Phill, cállate...—

—Si ella te valoraba, DIME DONDE CARAJOS ESTA, ¡DIME EN QUE MOMENTO ESTUVO CUANDO TUBBO LA NECESITO!—

—PHILL CALLATE!, ¡TUBBO NO NECESITA DE NADIE!—

—Tú qué sabes, es solo un niño, ¿pero sabes quién estuvo con el todo el tiempo?, tu esposo, después de lo que paso todavía tienes el descaro de decir que no lo amas, a mí no me puedes engañar, hay personas que saben lo que ocurrió, y esas mismas personas están muy molestas contigo.—

—No me interesa.—

—Se que estas asustado, y molesto, pero esa no era una razón para hacerle daño a Big Q...—

Jschlatt suspiro cansado...
Philza tenía razón...

[Beautiful affliction] - (Jschlactiky)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora