๑El amor nunca es lo que parece y las personas que crees conocer ocultan mil y un cosas, sana es una de ellas, confunde a jihyo a tal punto de lastimarla.๑
₊˚✧ ༉¿Cuántos secretos guarda Sana y su familia?
SAHYO G!P
-Historia completamente mía.
-Smut...
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Texas, USA 1723
-Señorita, ¿se encuentra bien? – me acercaba cautelosa hacia una chica la cual se encontraba tirada, esta no se movía, no respondía. Asustada corrí hacia la chica pálida, miré a un lado y al otro, repetidas veces.
-Señorita...- Mire desanimada a la chica que yacía tumbada en la fría acera, una idea paso por mi mente, sería muy egoísta de mi parte, pero se veía tan indefensa, tan pequeña.
Soy una mujer un tanto, ¿extraña?, muchas personas me caracterizan de esa manera, no tengo ningún problema con eso, ese montón de personas no saben realmente que soy y de donde provengo, irónicamente, yo tampoco, no se mucho de mi vida, solo recuerdo haber despertado en una sala, amarrada, mil y un torturas tuve que pasar por culpa de ¨personas¨ que hicieron mi niñez un verdadero infierno, ahora, me encontraba en la misma situación pero siendo esa persona mala, la cual atrapará a esa chiquilla de ahí, tan pequeña e indefensa, tan niña. Estoy en una lucha interna, ser lo mismo que fueron esos bastardos o escapar de este maldito lugar con esa chiquilla, no tengo familia, amigos o cualquier conocido aquí en Texas, no tendría nada que perder, formaría una familia con ella, viviríamos juntas una vida completamente distinta a la que nos era deparada.
Yo, tanto como las personas con las que ¨trabajo¨ somos seres ¨superiores¨ por decirlo de alguna forma, somos seres que cualquier humano no creería, el mito de los vampiros era y es realidad, muy diferente a la dramatización que hay en las historias, claro, de alguna u otra forma, los escritores de aquellos libros vampíricos tienen raíces con nuestros ancestros, a que quiero llegar diciendo todo esto, esa chica que está en ese suelo, a metros de mí, está gravemente herida – por causa de maleantes, socios de los bastardos daña vidas- su plan siempre ha sido el mismo, durante siglos, raptar pequeñas e inocentes almas para convertirlas en seres depreciables odiadores de sus propias vidas, sin sentido alguno y lamento matutino, vivir constantemente sabiendo que no podrás proseguir sin lamentar algún suceso de tu vida es realmente frustrante, el saber que el cualquier impulso podrías matar a alguien que quieres, es una lucha interna contigo, por eso recalco mi egoísmo, el hacer mal a una pequeña para curar el mío, para tener un bien en mi miserable vida arruinando la de una pequeña, podría dejarla aquí, muriendo, seria lo mas humano posible, lo mas aceptable que vivir una vida eterna llena de malos momentos, o tal vez sea diferente con ella, una vida nueva junto a mi...
El tiempo pasaba y lo tenia en cuenta, pequeñas jotas cayeron en mi rostro, llovería, mire a la chiquilla una vez más, me acerque a paso lento y mordí con fuerza su cuello, luego sus muñecas, toda parte de su mandíbula, envenenándole, todas mis mordidas acogían un color morado, había funcionado, su pequeña mochila apartada de ella a solo pasos contenía sus cuadernos decorados con muñecas presentadas en los periódicos, ¨Sana Ito¨ era su nombre, levante a sana de ese suelo frio y sucio, la subí a mi hombro y emprendí un rumbo hacia donde el destino me llevara, tenia estudios y sabia muchísimas cosas, tenía fuerza y destreza, no me sería difícil formar una nueva vida alejada de las malas personas y convertirme en algún muy bueno, cuidando a su familia, siendo amorosa, todo lo que de niña soñé.
