Sin límites, ni fronteras (Original Story)

Capítulo Final

*Amy Pov.*

—¿Estás nerviosa?

Me preguntó Evelyn desde el marco de la puerta y me giré a verla. Fruncí los ojos y se limitó a reír. Se acercó riéndose y estiró su mano para acomodar mi camisa.

—Ya, déjame ayudarte. —Dijo y la miré.

—¿Me veo demasiado informal?

—¿Necesitas verte formal? —Me preguntó en medio de una risa—. Oye, tranquila. Solo vas al cumpleaños de Allison.

—Pero me presentará formalmente a su abuela y su tío. —Recordé y respiré hondo—. Ay, no me siento a gusto.

—Está bien. —Me detuvo—. Voy a ayudarte a elegir la ropa y no vas a cambiar de opinión. ¿Está claro?

Asentí y me ayudó a elegir una blusa escotada bastante sexy y bonita, un traje azul el cual me hizo usar abierto y zapatos deportivos.

—¿Por qué zapatos deportivos?

—Porque le da un toque de comodidad y confianza a este estilo semi formal y sexy. Créeme, cuando Allison te vea quedará de boca abierta.

Me miré al espejo y me sentí sexy, debo admitir. Para cuándo bajamos, Henry estaba apoyado contra la pared con las manos en el bolsillo y me miró sorprendido.

—¡Oye, te ves hermosa! —Me dijo y sonrió—. Cuando Allison te vea va a babear.

Me avergoncé y miré a Evelyn, que se mostró orgullosa de haber tenido razón. Todos tenían que decir de la forma en que me vestí.

El festejo sería en casa de William y Paul, así que fuimos con calma. Cuando llegamos, tomé el regalo que tenía para Allison, asegurándolo en mi saco y Henry se acercó para tomarme del brazo.

—Así no te preocupas por caerte o verte temblando.

—Gracias. —Le dije y sonrió.

Nos acercamos a la puerta y papá se encargó de tocar timbre.

—¿Trajiste el regalo para Allison? —Me preguntó mamá y le asentí.

Frunció el entrecejo y me miró las manos.

—Lo traje. —Le aclaré y me miró extrañada—. Ya, déjame.

—Ni siquiera a mí me lo mostró. —Dijo Evelyn y me escaneo—. ¿Qué le vas a dar?

—Ya, déjame en paz. —Le dije y en eso se abrió la puerta.

—¡Aquí están! —Dijo Paul y sonreímos.

Entramos lentamente y cuando estuve frente a él me miró de boca abierta.

—¡Oh, estás sexy! —Dijo y me avergoncé—. Deja que te vea Allison.

Noté que alguien se asomó y era Rob.

—¡Oye, vas a infartar a Allison! —Dijo y tuve que reírme.

Me acerqué a él y me tomó del brazo, me apartó un momento y me sonrió.

—Todo saldrá bien. —Me dijo y asentí—. Su abuela y su tío ya están aquí.

Eso me hizo respirar hondo y tragué saliva. Nos dirigimos a la sala y primero vi a mis padres saludar a William y un hombre que estaba a su lado.

—¡Edward! ¡Tantos años sin verte!

Dijo papá y los dos se saludaron con una sonrisa. Así que este debía ser el tío de Allison y confirmé mi sospecha cuando él sonrió, tenía la misma sonrisa que ella. Fue mientras se movieron para saludar a mis hermanos que noté a Allison, la cual se puso de pie y dejó de hablar con una señora que debía de ser su abuela. Al verla, me quedé helada.