Sweetener (Jaeyong)

Capitulo 3

Los rumores llenan la universidad rápidamente durante toda la semana. Se decía que un alfa de élite estaba en el campus. Un alfa tan fuerte que solo su olor haría que otros, incluso los alfas, lo pensaran dos veces antes de meterse con el.

—Taeyong.— llamó una voz detrás de él.

Taeyong se dio la vuelta, sosteniendo el sándwich que había traído para su almuerzo. Cortado en diagonal y sin la corteza porque así sabía que le gustaba a Jaehyunie. Taeyong había decidido esa mañana hacerles sándwiches a ambos ya que tenía provisiones gratis para la semana. El Sr. Byun de la tienda de conveniencia quería disculparse por la situación que resultó en que Taeyong se cortara el labio, por lo que permitió que el omega comprara los artículos de la tienda por valor de una semana completamente por cuenta de la casa.

Era Jihoon.

Taeyong bajó su sándwich, deseando que su olor no cambiara. Después de saber que Jihoon podría lastimarlo físicamente, quería alejarse de él tanto como pudiera. —¿Qué?

—Tu alfa vino a visitarme esta mañana.— Jihoon tomó asiento frente a él. Taeyong estaba disfrutando de un buen almuerzo en una de las cafeterías de la escuela. Estaba sentado relativamente lejos de todos ya que no tenía con quién comer.

Pero Taeyong sospechaba que estaba a salvo ya que habría testigos si Jihoon intentaba atacar de nuevo.

—¿Mi alfa?— Taeyong dijo con desconcierto.

—Sí, Jeong.— respondió Jihoon como si el nombre tuviera un sabor amargo.
—¿Cómo diablos un humilde omega como tú consiguió un alfa como ese para cumplir todas tus órdenes? ¿Le estás pagando con favores sexuales? ¿Son amigos de celo y rut?

Taeyong parpadeó, completamente desconcertado. Luego miró fijamente lo que Jihoon estaba insinuando. Este alfa no solo era grosero sino también mentiroso. —¿De qué estás hablando? Será mejor que no intentes pegarme de nuevo.

—¿O que?— Jihoon se inclinó hacia delante, con una sonrisa burlona en los labios.

Taeyong odiaba cómo se estremecía. Le dijo a Jaehyun que nunca volvería a meterse en una situación como esta. No sabría qué hacer si Jihoon le diera un gemelo a su labio cortado.

Pero para su sorpresa, Jihoon se echó hacia atrás con una carcajada. —Eres demasiado fácil, omega. No te preocupes, no voy a causarte problemas de nuevo. No tengo un deseo de muerte.

—¿Un deseo de muerte?— repitió Taeyong.

—No vale la pena que te maten.— Jihoon negó con la cabeza. —Si eres el juego de Jeong, entonces lo dejaremos así. Solo necesitaba que subieras mis calificaciones en clase, pero puedo encontrar a alguien más.

Antes de que Taeyong pudiera responder, Jihoon se levantó para irse. Taeyong no tenía idea de qué se trataba el extraño encuentro. Pero con suerte significaría que no tendría que meterse en más altercados aterradores.

La próxima vez que Taeyong notó que algo andaba mal, fue cuando Jaehyun lo estaba caminando por el campus para llegar a su próxima clase. Fiel a su palabra, el alfa no estaba tan ocupado como solía estar. Taeyong comenzó a verlo más a menudo. Pero Taeyong sospechaba que todavía estaba ocupado, pero solo quería asegurarse de que Taeyong no volviera a meterse en algo estúpido como una pelea en la tienda de la esquina.

Mientras caminaban por el campus, Taeyong no pudo evitar notar las miradas de quienes los rodeaban. También hubo susurros, pero Taeyong no pudo entender lo que decían los demás. Se preguntó si era el suéter que llevaba puesto. Era principalmente blanco, pero había destellos de rosa y azul a través de ellos. Taeyong pensó que era súper lindo, pero tal vez fue un gusto adquirido.