•Cap. IX•

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Nahir

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Nahir

Ya habían pasado tres días desde que llegamos al hospital con Jaz, pero ella aún no despertaba.

- ... No lo entiendo...- comencé a decir con mi mirada perdida en el suelo
- Todo estaba bien, hacíamos los controles a fecha, comia sano, no se esforzaba. Todo estaba bien, ¿qué hicimos mal?

Erik me mira con tristeza y solo tiende a darme un abrazo dándome ánimo.

Estaba sentada en el pasillo, esperando el momento para la visita, sosteniendo los zapatitos de Lana color blanca.

No sé qué será peor, que despierte y sepa la verdad, o que no despierte..

— Ya puede entrar a verla, señorita Conell.— me aviso la enfermera a lo que rápidamente me levante de mi asiento y la segui hasta su cuarto
— Puede pasar. Regresaré en un rato, ¿sí?

Una vez pace, me senté en la silla frente a ella y la observe en silencio. Sintiendo un nudo en mi garganta y ese sentimiento horrible en mi pecho, como si mi interior estuviera en llamas.

  Ella estaba con suero, conectada a unas máquinas para estar al tanto de sus signos vitales y demás. Se veía pálida y, en el momento que mis ojos se detienen en su vientre plano no pude evitar soltar un sollozo.

  Jaz perdió a nuestro bebé de cuatro meses, según los estudios fue un aborto espontáneo. Y puede que si en el futuro se queda embarazada nuevamente, corre el riesgo de que suceda lo mismo, por lo que el tener un bebé no es opcional para ella. Ni su salud..

Amor... superaremos esto, juntas, ¿okey?— me incliné hacia adelante y agarre su malo que estaba tibia y luego bese el dorso de su mano
— Pero por favor, despierta, no puedo lidiar con esto yo sola...— dije entre sollozos y luego apoyé mi frente en su abdomen

El dolor que sentía por perder a nuestro bebé era indescriptible, pero si quería que nuestro matrimonio fuera fuerte, (porque había una posibilidad de que esto perjudique nuestra relación) debía mostrarme fuerte por ambas, debía ser fuerte por Jaz..

—¿Qué.. paso con mi bebé?

Rápidamente levante la cabeza, tomándome con los ojos vacíos de Jaz.

— Cariño, despertaste— me senté a su lado y acaricie su mejilla, sonriendo de lado — ¿Cómo te sientes?

Su mirada era algo perdida, como si no entendiera del todo la situación. Pero, en el momento que sus ojos frenan en su vientre, ella automáticamente lleva sus manos allí y es cuando la realidad la golpea.

•La hermana de mi mejor amigo• #2 [lgbt] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora