Comprometidos -Karmagisa-

Cap 1

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La aves cantaban, los sirvientes andaban de un lado a otro en el inmenso castillo del reino Netsu.

El Akabane mas joven se preparaba para bajar a desayunar, peinaba sus cabellos rojizos y arreglaba su ropa la cual estaba compuesta por un suéter de color azul rey, unos pantalones negros y unos zapatos blancos, no era una vestimenta que le agradara mucho pero a su madre le encantaba y el haría lo que fuera por complacer a su dulce madre.

Al descender por las inmensas escaleras el joven Akabane solo se preguntaba una cosa, que era lo que su padre querrá comunicarle?

El las familias reales es complicado que los horarios de todos coincidan para poder comer asique la familia Akabane solo comían juntos cuando recibían a alguien o tenían que hablar de algo importante.

Cuando llego al comedor su padre le indico que se sentara ya que lo que tenia que hablar era muy importante.

A pesar de que no se veían mucho el joven Akabane sabia que su padre estaba algo inquieto pero decidió ignorarlo y solo tomo asiento a espera de las palabras de sus padres.

-Karma, hijo mío, sabes que debemos hacer lo que sea por el reino y que mi deber como rey es ver siempre por el bien de este -El tono de voz de su padre le inquietaba, ¿A qué se refería con todo esto? ¿Acaso quiere que vaya a visitar algún reino pequeño? mientras al joven Akabane le surgían un millón de preguntas sin respuestas en su cabeza, un suspiro pesado de su padre lo hizo volver a la realidad pero esta vez quien hablo no era su padre, si no, la reina, su madre.

-Karma, cariño, como ya sabes, ya estas en la edad de adquirir un matrimonió.

-Madre, a que te refieres? -El rey tomo aire y continuo con la conversación por su esposa.

-Karma, yo y tu madre hemos decidido comprometerte.

Karma estaba en shock, ¿Como que comprometerlo? ¿¡Por qué!? Nada tenia sentido, esto parecía un mal sueño, no, no solo un mal sueño, era una pesadilla.

-¿¡Qué!? ¿¡Me comprometieron!? ¿¡Por qué!?

-Karma, relájate -El rey hablo de manera seria y algo brusca, no le agradaba la idea de comprometer a su hijo pero era la mejor manera de evitar una futura guerra.

-Karma, yo y tu padre decidimos que te casaras con el príncipe del reino Samui.

-El reino Samui?. . . .que acaso ese no es el reino de la reina de hielo? ¿¡Me vendieron a una bruja!? -En la mente de Karma se venían millones de imágenes de múltiples torturas que según el, recibiría en ese horrible lugar.

-¡Karma! ¡Más respeto! Eres un príncipe, no puedes hablar así de los otros reinos, ¿donde quedaron tus modales? -La reina hablo con algo de brusquedad y su semblante sonriente cambio a uno de molestia -No te vendimos a nadie -Un leve suspiro salió de los labios de la reina -Se mas educado, en una semana viajaras tu SOLO al reino Samui, no quiero que les causes molestias.

-¡Pero mamá! ¿¡Por que con ellos!? ¿¡Y por que con su hijo!?

El joven Karma estaba realmente confundido, ¿no se supone que uno de los propósitos principales de los matrimonios arreglados es la procreación?  ¿Entonces por que con un chico? ¿Acaso habían olvidado que su propio hijo es hombre?

-Eso no es de tu incumbencia, los sirvientes están preparando tus maletas, por favor, no lo arruines -La expresión de su padre era de angustia, estaba preocupado por su hijo, tenia miedo de que este los empezara a odiar por tal repentina decisión.

-. . . .Si, esta bien, ya me retiro -Karma se levanto de la mesa y se dirigió a las enormes puertas del comedor.

-Pero cariño, ni siquiera has desayunado -Hablo la reina con notoria angustia en sus palabras.

-No importa, no tengo hambre.

Cuando Karma salió de la habitación su padre se recostó derrotado en la mesa del comer.

-No creo que haya sido la mejor idea -Se lamentaba en voz baja mientras esperaba el consuelo de su esposa.

Tal y como el rey esperaba su esposa se levanto de su asiento y se acerco a el por lo espalda para así abrazarlo y darle pequeñas caricias.

-Tranquilo, el lo entenderá, no te preocupes.

Bien, esto a sido todo por el capitulo de hoy, espero y les haya gustado tanto como a mi me gusto escribirlo, perdón si encuentran una que otra falta de ortografía, les prometo que tratare de mejora, en fin, me despido, ¡chau!

27/5/2023