Comprometidos -Karmagisa-

Cap 4

En camino

Los días pasaron rapidamente y la tension aumento en ambos principes.

Nagisa estaba nervioso, asustado; deprimido, su cabeza estaba hecha un lío, faltaban pocos días para que por fin conoceria a su prometido lo cual le daba dolores de cabeza, Akari trataba de animarlo pero nada funcionaba.

-Nagisa, vamos, come algo -Kaede estaba preocupada, ya habia pasado dos días desde que Nagisa se habia negado a comer, además de que se notaba que el.pequeño principe casi no dormía.

-Perdón, Kaede, no tengo ganas de comer -De los pequeños y rosados labios de Nagisa salio un suspiro de cansancio, lo consumia la desesperacion, tratan de ignorar esos sentimientos pero no podia evitarlo.

-Pero, Nagisa, es sushi, es tu favorita, lo trajeron especialmente para ti, como algo, por favor, hazlo por mi -Kaede suplicaba, casi se arrodillaba para hacer que aunquesea Nagisa le de un mordisto a su comida.

"Hazlo por mi" esas palabras fueron un golpe bajo para el principe, ahora ya no podia negarse a comer.

-Bien, comeré un poco -Derrotado decidio aceptar el alimento y una gran sonrisa se dibujo en el rostro de Kaede.

-¡Excelente! ¡Vamos! ¡Come come!

Salio una pequeña risa de loa dulces labios del peliazul, le parecia muy tierna cuando se emocionaba así.

Mientras en este lado del mapa el principe Nagisa tenia una crisis el principe Karma estaba igual o hasta peor que el anterior mencionado.

-¡Itona! ¿¡Donde esta Emilico!?-Los gritos desesperados del principe se escuchaban por todo el castillo si no es que por todo el reino.

Llevaba horas rebuscando en su cuarto pero simplemente no estaba en ningun lado.

-¿Emilico? ¿Sigues conservando esa cosa?  -Terasaka estaba harto de los gritos de Akabane, eran las 6 am y el principito lloraba como un bebé.

-No es una cosa.

-Si si, como digas principito -Parecia que una pelea iba a empezar entre Terasak y Karma pero justo llego Itona para calmar la aguas.

-Karma, la reina dijo que -Antes de que el chico con cabellos de plata terminara Karma lo interrumpió.

-Itona, centrate en lo importante ¡¿Donde esta Emilico?! -El principe emoezo a tirar todas la almuadas de su gran cama tratando de encontrar su tesoro tan presiado.

-Es a lo que iba, la reino dijo que no puedes llevar a Emilico contigo -Itona mantuvo una cara inexpresiva, Karma se quedo mudo y Terasaka de inmediato escapo antes de perder su audicion por una semana.

-¿¡QUÉ DIJO QUE!?

Una bella dama con cabellos de oro y ojos de cobre caminaba por los pasillos de su inmenso castillo, la paz recorria aquel lugar hasta que unos gritps de su hijo pelirojo acabaron con esa paz.