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Jungkook

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Jungkook.

Debió ver mi cara de espanto cuando escuché su nombre salir de su boca para que Yeoreom siguiera hablando.

- Me avisó hace unos días... Me sorprendió su llamada, sonaba feliz y con muchas ganas de venir a la capital. Al parecer tiene algunos trabajos que hacer por aquí. Aunque no me especificó el día que vendría, así que esto me acaba de pillar por sorpresa. - explica, supongo para que relajara mi expresión.

- Ah. - no sé qué decir, mi cabeza funciona muy rápido y tan solo saber que estábamos en la misma ciudad me estaba agobiando.

- Me... Me preguntó por ti.

Se me acelera el corazón de los nervios que me provoca todo esto. No podía ser posible.

- ¿Qué le dijiste? – intento sonar firme, aunque quizás me estaba costando mucho. No podía dejar de mover las piernas por el nerviosismo que estaba sintiendo en ese momento.

- Nada, que estabas bien y ya. Hana no insistió.

- Vale. – asiento con la cabeza y disimulo mirando el reloj en mi móvil - Debo irme. Tengo cosas que hacer.

Me despido de Yeoreom rápido y me encamino al piso, dándole vueltas a la cabeza. No puedo dejar de pensar en ella y esperaba que no intentara ponerse en contacto conmigo.  De verdad, la quería lejos de mí.

...

Me dirijo a casa de Eileen sobre las siete de la tarde. Había quedado con ella para celebrar su cumpleaños. Me vestí con una camiseta negra y unos pantalones del mismo color apretados y me abrigué con una chaqueta. Iba algo formal, no mucho pero para celebrar su cumpleaños quería arreglarme más de lo normal. El negro siempre me quedaba muy bien y me vestía para la ocasión. También sabía que a Eileen le encantaba, siempre me lo hacía saber.

Toco la puerta de su piso y escucho gritos dentro de él. Reconozco su voz y alzo la ceja cuando también escucho la voz de su hermano.

- ¡Abre tú! ¡Que estoy ocupada! ¡Es Jungkook!

- ¡Oye, que me dejes estar en tu casa no significa que ahora sea tu esclavo!

Abre la puerta y veo a Jimin cambiando su cara de fastidio por una relajada con una sonrisa que me dedica al verme ahí parado.

- Hey, Jungkook.

- Hola... - saludo algo inseguro mientras me permite pasar por su lado.

- Eileen está duchándose - se encamina al sofá después de cerrar la puerta y se deja caer. Luego toma la lata de una bebida energética para darle un sorbo mientras me observa parado a un lado, sin saber muy bien dónde meterme - Ven, siéntate. Tú como si estuvieras en tu casa - me invita a su lado. Me hace gracia que él diga eso cuando ni siquiera es su casa pero decido hacerle caso.

Caótica y peligrosa » Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora