Dreams

Supervivientes

Miguel pregunta a Eli que si ha visto a Robby, se sintió tan mal cuando vio al castaño con dolor en sus facciones

A lo lejos se escuchan el sonido de ¡Pelea! ¡Pelea! Y puede ver a Sam y Tory discutiendo

—¡Supiste todo el tiempo que Silver hizo trampa  en el All Valley y no hiciste nada?!— Recrimina Sam dándole un empujón a Tory

Robby está inmóvil viendo la acción, su lobo no deja de llorar lo que hace que intente consolarlo

—¡No sabes lo que dices! ¡He lidiado con mucho!— interrumpe Tory solo para bloquear los golpes de Sam, la Alfa más baja le da una patada que la golpea contra el contenedor de basura

—¡Toda mi familia ha sufrido por tu culpa!— Exclama Sam molesta viendo a la rubia

Miguel la detiene antes de que haga otro golpe, Robby reacciona y se acerca a Tory

—¡Sam ya basta!— La voz imponente de Miguel descontrola al Omega por un segundo

—Ha trabado con Kreese todo este tiempo— Dice Sam mirando a Miguel furiosa

—¿Que?— Robby mira a Tory confundido

—¿Dime porque te apareces hasta ahora?! ¡Porque eres una cobarde!— Sam mira ala rubia

—¡Vete al diablo LaRusso! Sabía que esto era un error— Robby tiene el impulso de ir tras Tory, la Alfa se veía completamente mal, igual que él.

Cuando ambas chicas se van en direcciones opuestas solo quedan ellos dos.

—¿Sabías algo de esto?— Pregunta Miguel frustrado sin percatarse del rostro abatido del omega

—No, no tenía idea— Exclama Robby escuchando como el Alfa maldice en voz baja

Su lobo vuelve a chillar y decide caminar a su cuarto con mil pensamientos en mente,  Miguel va atrás suyo.

—¡Robby! ¡Tenemos que hablar!— Dice Miguel en voz alta tratando de alcanzar al castaño que caminaba más rápido a una dirección que el no tenía muy clara

Observa al chico rubio de hace un rato detener a su Omega, y como este lo ve por un momento, Robby lo mira por el rabillo del ojo y vuelve a mirar al rubio

Robby piensa en hacer una tontería mientras ve los ojos azules del Alfa que lo mira fijamente, con sus dedos apunto de tocar el rostro del chico para atraerlo hacia él, más chillido de su Omega lo vuelve a la realidad y rechaza una vez más al rubio

Siente como una mano apresa su muñeca, voltea furioso y empuja a la persona, los ojos marrones de Miguel lo observan sorprendido por su acción

—¡No me toques!— Exclama furioso abriendo la puerta de su cuarto viendo por última vez a Miguel, le pone seguro a su puerta y tapa las cortinas de la ventana de su habitación

Dentro de su habitación deja salir un grito de enojo, se acerca a su escritorio y mira el dibujo que había hecho del moreno, odia el corazón que está ahí pintado con lapicero negro.

Odia amar tanto a Miguel en este momento de tiempo.

Quita de manera brusca las lágrimas que bajan por su rostro y deja escapar un sollozo, una mezcla de tristeza y enojo lo domina

No, no quiere llorar, no es justo, el no debe llorar, se supone que ya no son nada

—Eres un imbécil Robby, te hiciste ilusiones solo— Murmura hacia sí sacando la pulcera de su bolsillo, la tira con rabia al suelo, después la recoge y la mete en un cajón donde pueda olvidarse de su existencia