Dreams

Mantenerse

Shawn caminaba al Dojo de Cobra Kai, el ni siquiera quería volver a ver a esa perra

Tory lo miraba en la entrada, la chica era ardiente, lastima que fuese una Alfa.
El viejo lo observaba con el seño fruncido, sabía que Robby era uno de los pilares para ganar el torneo que había mencionado Kreese y que mejor que infundirle miedo.

Lo cual había resultado muy bien, había estado tembloroso mirándolo, sintió tan satisfactorio.

No podía esperar a poner sus manos sobre su blanca piel de nuevo, debía terminar el trabajo que no completo en Juvie, sentía sus colmillos picar por la sensación del deseo que crecía sobre el.

Era el Omega más rudo y bonito que había visto, con gusto jugaría un rato con el.

La Alfa lo seguía con la mirada, no le agradaba en absoluto, eso era seguro.

—Lo debilitaste?—Pregunto El mayor

—Lo tengo en la palma de mi mano Señor—Contesto orgulloso, aún recordando los ojos verdes de Robby llenos de miedo apenas lo vió
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Johnny estaba furioso, Un maldito mal nacido se atrevió a hacerle daño, el sobrepensarlo le estaba provocaba hacer soltar fermonas de molesta, los alumnos estaban preocupados

—Johnny, Porfavor ven conmigo, están preocupando a los chicos—Susurro Daniel lo más calmado posible, no era común para el Omega lidear con un Alfa molesto, podían actuar con un comportamiento agresivo

El Alfa rubio solo lo siguió, oliendo las fresas y menta que desprendía su co-sensei

Acercó al pelinegro hacia el enterrando su nariz en el área de su glándula Omega que estaba en la curvatura de su cuello, el más bajo jadeo en sorpresa al sentir al Alfa muy cerca de el.

Johnny entonces se percado que el olor de Amanda no estaba ahí, dónde se suponía que debía estar

No olía a Omega enlazado...

Lo estaba relajando demasiado, pero se alejo no queriendo incomodar.

—¿Que sucede Johnny?—Pregunto el pelinegro

—¿Porque el olor de Amanda no está?—Pregunto el rubio curioso

—Pues nunca me marco,no lo vimos necesario—Respondio viendo al Alfa un poco Confundido por la respuesta.

Se suponen cuando un Alfa y Omega quieren estar juntos para siempre hay una marca de por medio...

Los chicos afuera estaban viendo lo raro de la situación, Demetri se mantenía callado, el comportamiento de Robby se hacía muy sospechoso.

Hawk noto como el pelinegro miraba a la nada, preocupado le hablo

—¿Que tienes Dem?—

—uh, lo siento, estaba pensando en Robby—Dijo el Omega

Hawk lo miró serio.

—Es que hay algo en ese tipo, Shawn, que me da mala espina—Le explicó, y el Alfa solo asintió compartiendo la misma idea

—Es cierto, no me genera confianza, no se cómo Keene se pudo fijar en él—Expreso

—Para mi que Robby no está cómodo con el, hoy en la mañana, en el receso lo ví tenso—Comento dando a notar lo que había visto

—Tu crees que su sea su alfa como el dice?—Pregunto con curiosidad

Sam que escuchaba la conversación, se acercó a ellos

—Que hablan?—Pregunto la Alfa

—Hablamos sobre Robby, bueno, exactamente sobre ese tal Payne—Le comento Demetri a la chica

—No me genera confianza la verdad—Expreso la ojiazul

—Ambos pensamos que hay algo que no cuadra ahí—Dijo Hawk

—Si...me preocupa que Robby la valla a pasar mal—Sam quería ayudar a su amigo, pero, por todo lo que habían pasado sentía que no había la confianza suficiente.

—Oigan, Aunque el Sensei Johnny se veía mal, pero lo peor fue cuando Robby tiro el teléfono, no se que está pasando...Me preocupa—Exclamo Demetri viendo que su amigo aún no había vuelto

—Si, miren ya vienen—Anuncio la Alfa viendo a ambos sensei volver a sus lugares más tranquilos

—Bien sigamos con la lección!—Ordeno Johnny mirando a la salida donde ni Miguel ni Robby habían vuelto.
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¿Mi ayuda?—Pregunto el Alfa confundido

Si, tu ayuda, necesito protección—Comento cerrando el puño, esto era demasiado vergonzoso

—Acaso ya no eres tan fuerte como cuando me tiraste del balcón?—Hizo un comentario ácido

—Olvida lo que dije, No necesito una mierda de tí—Espeto molesto, caminando cuando una mano lo sujeto de la muñeca, le hizo darle vuelta hasta acercarlo a el

El Alfa se inclino viendo más de cerca sus ojos verdes, noto el cansancio en ellos, olfateo de manera discreta el olor a sal de las lágrimas, ¿porque había estado llorando?, observo su ceño fruncido y como sus labios rosa pálido se torcieron levemente por el agarré algo fuerte en su muñeca.

Robby miraba atento al Alfa esperando que hablase, no entendía porque no se podía soltar si tenía la fuerza necesaria para safarse, sin embargo se quedó ahí, inmóvil, observando el próximo movimiento impaciente

—¿A cambio de que?—Dijo Miguel, Robby agrando un poco los ojos sorprendido, no esperaba esa pregunta

¿Cómo que a cambio de que?