Mis sentidos se estaban destrozando.
Mi vista estaba completamente nublada, parpadeaba rápidamente tratando de que mis ojos se acostumbraran a las nubes y pudiera al menos observar algo. Pero no fue así.
Mi oído, solo era un problema, escuchaba un sonido agudo que me ensordecía cada vez mas, y me provocaba estrés.
No podía hablar, siquiera susurrar, apenas podía abrir la boca para respirar.
No podía mover un músculo, todos mis tendones estaban encogidos, el más mínimo movimiento que lograra hacer, seria un dolor horrible.
Lo único que podía hacer era pensar.
Que me han echo, ¿acaso intentar escapar de mi muerte es un pecado?
pues parece que para ellos lo es, a pesar de que la aguja me penetro, recuerdo perfectamente todo, a el parecer me volví inmune a su dosis. Por lo pronto.Dentro de todo el lío que me cargaba, escuche a travez de los sonidos agudos, uno un poco más grave, alguien entro a la habitación en la cual me tenían encerrado.
-vaya, vaya, que tenemos aquí-escuche a duras penas, solo por suerte de que la voz de el tipo era demasiado ronca-parece que ya despertaste, me alegra. Como veras quería platicar contigo, ¿puedo?
No, váyase a el carajo. Pensé.
Intente hablar, pero mis labios solo temblaron, y me provocaron un dolor insoportable, era como un dolor de 10 muelas a el mismo tiempo.-oh, olvide que no podías hablar-el tipo soltó una leve carcajada y continuo-así así que te daré una terapia emocional, y tu lenguaje corporal me lo dirá todo-dijo subiendo mas el tono de voz.
Me gustaría responderle a este tarado, pero me parecía imposible, así que solo deje que hablara.
-¿recuerdas tu nombre?-a pesar de que no podía ver, notaba que el tipo me veía fijamente y esto ya era incomodo-yo creo que si-dijo el tipo con su risa burlona, de esas que a todos nos gustaría destruirla en mil pedazos.
-por favor pase, señorita Primrose-el sujeto cambio drásticamente su tono de voz, a uno mas amable, como si se tratara de alguien muy importante.
-Con... -trate de escuchar lo que decía la señorita Primrose, pero su tono de voz, al parecer era muy dulce y solo escuche zumbidos. No sabia con exactitud quien era ella, pero por el nombre exótico, lo mas seguro es que era Lady Gaga.
-Si, no hay problema-le contesto el tipo a la señorita y me tomo de la cabeza, sentí un dolor de cabeza insoportable, y apenas pude mover un poco la mano.
Me puso unas cosas extrañas, las cuales no pude observar, mi vista seguía igual de nublada, si no es que mas.
-bien ya esta listo Lonhard-aviso Primrose-¿me puedes escuchar Antoni?-como diablos podía escuchar su voz a la perfección, estos tipos tienen la más alta tecnología, todo estaba preparado, eso lo puedo asegurar.
-no asegures nada, ah y antes de que digas cualquier tontería, te aviso que escucho todo lo que piensas, de esta manera hablaremos, y sabré totalmente la verdad, a parte de que no puedes hablar-dijo la tipa mientras soltaba una pequeña risa, sarcástica.
-Que quiere de mi-dije telepáticamente a travez de los tubos con tan solo
pensar, esto podría ser peligroso.-si si es peligroso, si descubro que sabes algo te pondré otra dosis, y no me importara si mueres, no es mentira. Solo te matera LonHard.
-solo comience las preguntas-conteste de prisa antes de que escuchara mas, la maldita Lady Gaga.
-¿Lady Gaga?, ja mi nombre es Primrose, soy mucho más que la tonta hermafrodita.
-si, como sea-dije enfadado con el tono de pensamiento mas indiferente posible.
-¿indiferente?, ¿tu conmigo?-la hermosa Primrose escucha todo lo que pienso.
-hay, gracias... me sonrojas-respondió ella.
-si, la verdad ese look te va fatal, iras a el grano, o seguirás viendo todo lo que pienso.
-quien soy yo, y como es que estas aquí-dijo ella cambiando su tono de voz a uno exageradamente cerio.
-bien, diré la verdad, escape porque Z83 aumentó la dosis a el doble, L63 me defendió, más que eso, no quizo traicionarla a usted, señorita Primrose. Después Adam o Z83 como le quiera llamar, junto a E34 me persiguieron por todo el búnker hasta que logre perderlos, Lady... Digo usted llego de el cielo y me noqueo, para luego inyectarme la dosis.
-oh sabes demasiado, eso es malo, pero bueno, elimine a Leonard de la institución. Lo devolveré-dijo ella, esto se ponía interesante-si, es interesante chico, no te inyectare, solo dime donde quedo junior-dijo por ultimo levantando un poco mas la voz.
-lo meto por los ductos y escapo, le salve la vida de esos dementes-respondí esperando una respuesta rápida, para que querría saber eso ella.
-entonces eso fue lo que escuche, hace unas horas, note sonidos de abolladuras provenientes de los ductos, y mande a un Kroock, pero lo eliminaron. Eso creo-la tipa seguía hablando confiándome demasiada información, como si me quisiera dentro de su institución.
-¿espere, dijo que eso cree?, ¿junior puede estar muerto en este momento?-comencé a alterar los pensamientos.
-si, eso dije, y si te quiero dentro de mi institución por unos días. Adam (Z83) y Eduard (E34) están acabando con personas inocentes sin mis ordenes.
-eso esta mal, pero yo no puedo mover un solo hueso, lo siento-respondí por ultimo, me encantaría colaborar para terminar con esos bandidos, pero me era imposible.
-yo te puedo ayudar, solo espera a el amanecer-me inyecto algo en el cerebro, desconecto los tubos raros y se fue junto con LonHard.
Pasaron unas cuantas horas, y comenzaba a mejorar, pero muy leve, veía un poco mi exterior. Estaba en una sala moderna, parecía una clínica, era extraño, pero cómodo.
-por fin lo encontramos-dijo un tipo de voz metálica a travez de la puerta-asegúrate de que la señorita Primrose no este viéndonos. o nos echara a el fin de el mundo.
-si esta bien-dijo su compañero, lanzaron a un niño a mi lado, no notaba mucho a mi alrededor, pero el tono de el rostro de el niño era rojo.
Estaba empapado de sangre. Era junior.
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SOBREVIVIENTES / EL COMIENZO
Science FictionAntoni, junto a su amiga Nichole y su hermano menor Junior, son parte de los sobrevivientes que quedaron de toda la humanidad, debido a que el gobierno de EUA creo un plan suicida, acabando con su propio mundo técnicamente, a el congelarlo. Los poc...