Segunda oportunidad (Aquamarine Y Tu) *Cancelada*

Sin arrepentimientos

Después de haber llorado toda la noche sin parar me levanté y me mire en el espejo del baño, donde tenía los ojos hinchados y rojos por haber estado llorando… Esto no lo sabía Ruby ¿Si lo supiera me abrazaría? ¿O me diría tonta por no haber vuelto a casa con Aqua?

En cualquiera de las dos se que ella me hubiera demostrado cariño, amor… aprecio por mi…

Baje en pijama y vi a mi madre preparándome el desayuno, pude sentir la tensión en el ambiente, ella sabía que le había estado ocultando cosas, pero no algo tan importante que guiaría mi vida.

— ¿Por qué?

Me mordí el labio nerviosa antes de contestar…

— Aquel chico… Me arrastro sin pensarlo y yo sabía que quizás no sería bueno para mí si quería ser Idol pero…

Mi voz se quebró al pensarlo.

— Me gustaba tanto inconscientemente que fui detrás, lo siento mamá…

Ella me abrazo fuertemente y acunó entre sus brazos intentando que me calmara.

— Voy a alejarme de él…

— Quizás sea lo mejor mi niña

Ella me dio un pequeño beso en mi frente y me hizo sentarme en aquella silla enfrente de mi desayuno se sentía bien…

Estaba pensando en cómo se lo diría, si se enfadaría, si me mandaría a la mierda ¿Era para el una simple pieza de ajedrez? ¿Un simple escalón para su venganza?

— Si lo hago de él… ¿No tengo por qué alejarme de su hermana verdad?

Nerviosa mire a mi madre y ella negó con la cabeza con una pequeña sonrisa en su rostro eso… me alegraba…

— Claro que no, a pesar de que ella sea alguien cercano de él, no significa nada por que sigas con ella cariño

Ahora que mi madre sabía lo del programa me sentía más tranquila, esa solo era una pequeña mentira, donde la de verdad se trataba la de mi reencarnación, la mentira más grande que le escondo, pero que nunca sabrá ni se enterará…

— Iré a cambiarme, quiero… acabar con todo

Ella se levantó y me peino con dulzura mi cabello, y cuando termine fui a mí habitación para poder cambiarme, quería verme decente ya que luego me tocaría ir al instituto con Ruby, conocer nueva gente, olvidarme de Aqua, empezar de cero…

Me termine de poner el uniforme y de vestirme y con una botella de agua fría intenté bajar la hinchazón de mis ojos, cosa que parecía imposible, no quería dar pena… Suspiré y me mire con una mirada decisiva, sabía que ya no había vuelta atrás, que no podía dudar, pero que más daba, no es como si fuera la primera vez que me equivocaba tomando una decisión.

Cogí mis cosas y salí de casa dirección a la casa de los Hoshino, quién sería el primero que viera… A Ruby? A Aqua? Alejarme de la mitad de Ai… uno de sus hijos. ¿Es por ello que me aferraba tanto? ¿Es por ello que me negaba tanto a alejarme?

No debo dudar.

El camino fue tranquilo, donde trataba de ordenar mis pensamientos donde no sabía tan siquiera si Aqua seguía enfadado conmigo…

Me planté enfrente de aquella puerta y con algo de miedo llamé con algo de fuerza para que se escuchará, eso siempre hacía que me dolieran un poco los nudillos, escuche como unos pasos bastante rápidos se acercaban a la puerta y cuando se abrió vi a una Ruby con el pelo desarreglado, ella rápidamente me sonrió y me abrazo.

— Buenos días Ruby…

Mi voz se escuchaba algo cansada, quizás era por qué no había dormido casi nada y eso lo noto Ruby.