Takemichi acude a una bruja poderosa y muy conocida por conceder los más profundos deseos, pero Takemichi en vez de pedirle poder, riquezas, joyas, títulos, etc. Él solo pide que ya no lo molesten en la escuela, la bruja sorprendida le pregunta por...
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Un chico caminaba con la cabeza gacha mirando al piso, risas y murmullos abusivos se escuchaban por donde paseará por los pasillos de esa escuela. Desde su uniforme se escurría agua sucia, huevos podridos, tomates y jugos de todo tipo. Este sostenía un par de libros húmedos, había sufrido otro día de abusos y risas de sus buleadores. Takemichi Hanagaki, ese era el nombre de la víctima de esta escuela. La escuela de Shibuya era un infierno para los que no eran de su estatus y poder, Takemichi tuvo la "suerte" de entrar por obtener una beca y por sus grandes estudios.
Lo malo de esta escuela de alto estatus, es que solo asisten hijos de empresarios, ricos, modelos, millonarios o todos los que tuvieran más de 5,000,000¥ en sus bolsillos.
Desde el primer día todos anduvieron murmurando a sus espaldas y mirándolo como si fuera un especimen asqueroso, lastimosamente tuvo la mala suerte de chocar contra un chico. Ese chico, causó que toda su vida tranquila y buena se derrumbara en segundos.
Además, para rematar, él chico era el nieto del director y la tercera cabeza de la empresa más poderosa de Japón, Sano●Corporation.
Al final del día supo que nada bueno vendría para el siguiente, mañana en la mañana recibió una carta roja en su casillero. Estudiantes y trabajadores que pasaron por ahí se quedaron viendo la carta roja, todos ellos sabían que si a alguien le llegaba una carta roja a su casillero, significaba que sería él esclavo de la escuela. Y justo así se cumplió...
Todos los días era víctima de bromas, insultos, trampas, golpes o daños de sus útiles. Takemichi aguantaba todo eso por el solo hecho de poder estudiar una carrera buena, ya que él vivía en la casa de su mejor amigo, Takuya.
Pero poco a poco se sentía más y más débil, tanto que ya solo parecía un muerto viviente en la escuela y fingía que todo estaba bien en casa de su amigo.
Pero un día todo cambió...
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Takemichi iba caminando de vuelta a la casa de su amigo Takuya, para suerte suya no le tiraron el agua de la basura, eso sí que le dejaba mal olor. Su mejilla izquierda estaba roja y con algunos restos de sangre, su ojo derecho estaba morado e hinchado.