Takemichi acude a una bruja poderosa y muy conocida por conceder los más profundos deseos, pero Takemichi en vez de pedirle poder, riquezas, joyas, títulos, etc. Él solo pide que ya no lo molesten en la escuela, la bruja sorprendida le pregunta por...
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Antes de empezar le quiero agradecer a mi querida seguidora llamada AzyamiKire que me hizo una hermosa portada y separador que ahora deben estar viendo. Este capítulo es dedicado a su hermoso trabajo y dedicación.
Otra vez agradezco a AzyamiKire por su tiempo y trabajo en mi historia, muchas gracias 👉🌹💋.
Sin más que decir, empecemos con el capítulo.
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Ya era viernes, el día de la gala. Takemichi Hanagaki se había bañado de pies a cabeza, uso un perfume que le regalo Emma y arreglo su cabello en un peinado formal para que no se viera tan desordenado. También se puso el traje que hace unos días Emma compró y aprobó. Cuando terminó se veía espectacular, casi parecía un hombre de negocios con el enorme arreglo en su apariencia. Aún así sentía que todo esto era absurdo y que alguien como él no debería usar este tipo de cosas caras, mucho menos cuando provenía de origen humilde.
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando oyó la puerta de su cuarto ser abierta. Takemichi miró para atrás para ver a su tía con una sonrisa de pura emoción. No pudo evitar sonreír por la emoción en el rostro de su tía, por lo que dejó de pensar en su apariencia y se fue abrazar a su tía.
- ¡Te ves de maravilla, Takemichi! ¡No puedo creer lo lindo y elegante que luces con este traje! - Dijo ella con emoción desbordante. - Te deseo la mejor de las suertes en la gala. Recuerda que debes divertirte mucho, comer las delicias del bufete y conocer a muchas personas nuevas.
Takemichi sonrio y asintió.
- Sí, lo haré.
Se despidió de su tía y bajo por las escaleras. Cuando llego al primer piso vio a Takuya esperándolo en la puerta principal, él sería quien lo llevaría a la escuela para más apoyo. No tardo mucho y lo abrazó, siendo correspondido por su mejor amigo.
- ¿Emocionado?
- Más bien nervioso. ¿Debería no presentarme?
- ¡No digas tonterías! - Reclamo Takuya. - La oportunidad de ir a esa gala es de muy pocas probabilidades, ¿no? Además, estarías rompiendo una promesa y eso no está bien. Sé que tienes miedo, pero no hay que acobardarse. Si tienes algún problema siempre me puedes escribir a mí o a mamá.
