Capítulo 6.

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—Deberías de ser más atentó —el extraño se colocó delante de él—. O la próxima vez saldrán las cosas mal.

Ian aún tenía en su mente que ese extraño no tuvo problemas en mandar a volar a Mark como si fuera poca cosa.

—¿Quién eres? Y ¿Por qué me ayudaste?
Aquellas preguntas le sacaron una sonrisa al chico desconocido, una sonrisa que no lograba descifrar y calaba en sus huesos. Podría ser algo bueno o muy malo.

—Soy Thiago.

Era la primera vez que escuchaba ese nombre, peor aún, era la primera vez que veía al chico, siendo el hecho de que él ha estudiado allí desde que tiene uso de razón. Es la única preparatoria de seres sobrenaturales que se encuentra en el territorio de sus padres.

—Quita esa cara, chico cereza —el tal Thiago ya se estaba burlando de él.

—Aunque no pedí tu ayuda, te lo agradezco —Ian volvió a tomar las cosas que cayeron en cuando Mark lo había empujado—. Solo no vuelvas a hacerlo.

Se dio media vuelta para irse de allí en busca de sus hermanos.

—Te ayudo y lo único que recibo es un agradecimiento todo seco y con reproche.

El chico pálido se quejó por la reacción de Ian, cosa que lo hizo detener su caminó y darse la vuelta para encararlo.

—En ningún momento te dije que me defendieras —volvió a decirle—. Si tu cerebro no es lo suficientemente brillante como para aceptar lo que te digo, entonces ya es tu problema.

Retomó su destinó, pero en eso sintió la presencia de Thiago detrás de él para luego tenerlo a su lado.

—Está bien, está bien —llevo sus manos a los bolsillos de su chaqueta negra—. Mi intención únicamente era ayudar y no recibir un agradecimiento como respuesta.

Pero el pelirrojo no le decía nada, le estaba ignorando por completo, llamando más la atención del otro.

—Ignorar cuando una persona te está hablando es de mala educación —insistió otra vez, pero no tuvo respuesta—. Ya veo, como soy un extraño para ti me aplicas la ley del hielo, igual ya te dije mi nombre.

El pelirrojo rodó los ojos y se quedó parado en el estacionamiento del lugar esperando a sus hermanos. En todo ese momento ese chico seguía con él y no se iba.

—Vamos, chico cereza —otra vez le dijo de esa forma—. Está bien, así que ese es tu nombre.

Se acercó más a él, haciendo que sus ojos se conectarán con los del otro. Marrón y esmeralda era lo que veían.

—Y qué buen nombre para un chico tan bien parecido como tú.

Aquel comentario logró hacer sonrojar sus mejillas. No estaba acostumbrado a recibir cumplidos de personas que no fueran de parte de su familia o de quienes lo conocían desde su nacimiento.

—¿Qué pasá? ¿El gato te comió la lengua?

Una sonrisa socarrona se formó, se hizo presente en la cara de Thiago. La atmósfera se sentía un poco, mucho caliente y no sabía si era por la cercanía, los cumplidos y la forma de hablar o por exactamente todo lo que estaba pasando.

Hubiera seguido así de no ser por un gruñido que se escuchó a sus espaldas para luego sentir como era apartado del otro y puesto detrás. Apenas miró hacia arriba y vio la mata de cabello parecida a la suya, pero sin los rulos supo que era Alec.

—¿Quién diablos eres tú? —el mayor veía al pelinegro con ojos furiosos—. Mejor aún, ¿Por qué tenías tu cara cerca de la de Ian?

Apenas escuchó el nombre del menor, ignoró por completo a quien tenía enfrente y regresó su vista al de rulos.

—Así que te llamas Ian, chico cereza —se mordió el labio—. Interesante saberlo.

Alec notó muy bien aquella acción que hizo el extraño y como lo tenía justo frente suyo era imposible no oírlo. Eso no fue lo que lo hizo enojar más, no, podía oler el aroma que el otro desprendía por su hermano.

—Será mejor que le largues —sus ojos brillaron.

Lo único que tuvo como respuesta fue una risa de Thiago, se estaba burlando de él y eso no iba a permitirlo. Ya estaba por darle una paliza, cuando sintió que su brazo era agarrado por Ian.

—Ya déjalo, vámonos a casa —trato de hacerlo entrar en razón—. Recuerda que tengo entrenamiento hoy.

A lo lejos, Pau venía llegando con los hermanos Tate a excepción de Brady. Los tres notaron la postura de los dos pelirrojos para luego ver la presencia de ese chico.

—Fue un gusto conocerte, Ian —se hizo su cabello para atrás—. Espero que volvamos a vernos —empezó a irse de allí, no sin antes guiñarle el ojo.

Cosa que molestó a Alec, tenía tantas ganas de partirle esa sonrisa de la cara. Pau y los Tate fueron directo a dónde se encontraban, no dejando de apartar la mirada de dónde se había ido el otro chico que veían por primera vez.

—¿Quién era ese chico? —Lina preguntó.

—Nadie, solo me ayudó con un chico que se quiso pasar de listo.

No dijo nada más y fue directo al carro del mayor, se despidió de Lina y Simón y entró a la parte trasera del vehículo.

En todo el camino los dos mayores tenían la espinita de la curiosidad en saber sobre ese chico, pero Ian no iba a responder nada porque tampoco sabía, lo único que sí es que la llegada de ese chico era completamente inoportuna.

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Al llegar a casa salió disparado hacia las puertas de esta, no quería dar explicaciones de cosas que no tenía respuestas. Dejó sus cosas en su recámara y luego fue hasta el comedor para luego alistarse en ir a su primer entrenamiento.

Fue hasta uno de los salones que había en la mansión. Allí se encontraba su Mera hablando con algunos de los elfos y hadas que eran leales a aquella mujer. Apenas sintió la presencia de su hijo dejó de hablar los que estaban allí.

—Me temo que tendremos que dejarlo hasta aquí por el día de hoy —se disculpó—. Apenas me desocupe, me pondré en contacto con ustedes.

Todos asintieron y uno en uno fueron abandonando el espacio para luego quedar ellos solos en esa gran habitación.

—Llegó el momento de entrenarte, Ian —tronó sus dedos, las puertas se cerraron y las luces se atenuaron—. Porque seas mi hijo no significa que seré condescendiente contigo, lo haré de la misma forma como lo he hecho con muchos.

El pelirrojo tragó saliva. Si ya su madre en ciertas cosas era dura, no quería ni imaginar cómo sería con esto.

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Me disculpó por no haber actualizado el viernes pasado, me encontraba ocupado y me fue imposible terminar el capítulo, es más, lo que tenía escrito, lo borré porque no me gustó cómo estaba quedando.

De igual forma, mañana habrá actualización o más tardar el sábado, dependiendo si termino el capítulo a tiempo.

Por cierto, nuevo personaje, Thiago.

Por cierto, nuevo personaje, Thiago

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