5. Conmoción

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-Te lo dije o ¿no fue así tía Walburga?

-Buenos días para ti también querida ¿y tus modales?

-Es lo de menos. Tenia que venir a regodear mi victoria.

-¿Por Orión?

Negando se paseo delante del comedor, para llegar a su lado y besar su mejilla como cuando era una niña revoltosa y se alegraba por su travesura realizada. -Por lo que escucho no sabes de mi logro.

-No hagas escandalo y di a lo que viniste.

-El heredero de los Potter es miembro oficial e irrevocablemente de la benévola casa de Slytherin -termino con una reverencia.

Los candelabros se rompieron y se quedaron a oscuras. -¡Por Salazar! ¿Qué has hecho Bellatrix?

Su mirada se ensombreció y dijo resentida. -Querían entretenimiento, perfecto ahí lo tienen.

Walburga con un ligero movimiento de su mano arreglo lo que causo su estallido de magia. Siguió desayunando sabiendo que su sobrina ya no se encontraba, realmente es de temer una mujer cuando a esta se le lastimo de tal magnitud. No estaba en sus manos resolverlo, ni los padres del muchacho podrían hacer algo. Ahora se encontraba en los primeros posibles candidatos en aquella lista que pronto se le notificaría de sus futuras obligaciones. Tiempos inquietantes se aproximaban, suerte que su hijo entendiera y decidiera seguir la tradición familiar.

En la recamara de Regulus se encontraba un brillante broche.

Cuando lo vi, me recordó a ti.

-Tía Bella.

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Severus se encontraba nervioso, su prefecto los cito media hora antes de ir al gran comedor a desayunar según con el pretexto de enseñarles reglas y tratados dentro de su casa

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Severus se encontraba nervioso, su prefecto los cito media hora antes de ir al gran comedor a desayunar según con el pretexto de enseñarles reglas y tratados dentro de su casa.

Él lo reconoció, y por como le recibió cuando fue seleccionado sospechaba que algo quería averiguar.

En el diario de su madre, dejo en claro que sus familias eran cercanas hablando de negocios eran ciertamente aliados. Cuando fue a Diagon compro un libro donde hablaba de las familias más reconocidas y de alto nivel.

Por supuesto que lo estudio, no quería ser tomado como un ignorante. Fue educado a la manera muggle, pero hijo de una bruja y por desgracia de un muggle como resultado era un mestizo.

Y en una casa donde el estatus venia en tres niveles: familia, linaje y alianzas.

Tenia mucho que demostrar si es que quería ganarse el respecto de sus compañeros de generación, agradecía el haber conocido a Xenophilius.

Se sacudió los malos pensamientos y tomando valor salió de su habitación rumbo a la sala de estar de su casa.

Bajando el pasillo cerca del ventanal estaba el prefecto y noto que habían unos cuantos compañeros, acercándose saludo inclinando un poco su cabeza. 10 min transcurrieron y llegaron los restantes.

Ámbar - JeverusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora