Fuck you |Minsung|

XII

Han Jisung

— Se supone que solo íbamos a ducharnos

Ignora mi pregunta y me besa de nuevo poniendo la mano en mi estómago.

Pero esta vez no voy a permitir que se salga con la suya. Y al tomarlo desprevenido, no necesito demasiada fuerza para cambiar posiciones y ser él el que está contra la pared de la ducha y no yo. Me pongo de puntillas para intentar alcanzar su altura y pongo mis manos en sus hombros.

Mis besos bajan hasta su cuello, él tirando la cabeza a un lado para que tenga mejor acceso mientras aprieta sus manos en mis caderas.

— Hoy no nos levantamos dóciles, eh

— Callate

Con eso vuelvo a besar sus labios. Rápido, salvaje. No quiero escucharlo hablar ahora mismo.

Agarra mis muslos y me sube, teniendo que enredar mis piernas en sus cintura para no resbalar. Dejo mis manos en sus cara profundizando el beso y ladeando ligeramente mi cabeza para que así sea más fácil seguirle el ritmo. El agua golpea nuestros cuerpos, pero no podría importarme menos y el jabón hace que nuestras pieles resbalen más de lo normal, tampoco nos importa pues cada poco tiempo el vuelve a subirme con un pequeño salto que me saca un par de gemidos al hacer que nuestras erecciones se rozen.

Esto no estaba planeado, es más, vamos tarde para la universidad porque un señor se le ocurrio la magnífica alarma de apagar la alarma y volverse a dormir en vez de despertarme, para que yo me vaya preparando mientras él se que da en la cama hasta que faltan cinco minutos y debo despertarlo para que empiece a correr. Y es bastante gracioso, verlo ponerse los pantalones mientras desayuna algo o la camiseta mientras se lava los dientes. Me pregunto cómo es que aún no ha aprendido que debe levantarse un poco antes para ir con más calma.

Y ayer deberíamos habernos duchado después de una intensa sesión de sexo, pero nos quedamos dormidos nada más tocar la cama para normalizar nuestras respiraciones y sé que es lo más antihigiénico que hay y también bastante asqueroso, pero tras tres rondas, un día duro de entrenamiento y universidad, lo raro es no dormirse.

Así que aquí estamos, íbamos a ducharnos juntos para tardar menos, bastante menos, pero a este se le ocurrió que era mejor idea empezar a besar mi cuello, en vez de enjabonarse. Y así terminamos, porque pese a que sé que llegamos tarde, la tentación de sentirlo en mi interior, es mucho mejor que escuchar a esa vieja hablar.

— Minho. Rápido

Y me hace caso. Cosa que me sorprende.

Me baja con cuidado y mira a su alrededor.

— Podemos mojar mi cama, iba a cambiar las sábanas de todas formas

Sonríe de lado y agarrado de mi mano me tira hasta la cama. Dejándome de espaldas a él.

Creo que nunca usamos esta posición. No sé. Es más fácil mirarle a la cara e insultarlos que saber que me está sonriendo coqueto. No sé, es raro.

Tampoco me quejaré.

Con su mano, arquea mi espalda, mi cara quedando totalmente enganchada al colchón y mi culo levantado. Minho me debe estar viendo hasta los pecados en esta postura.