La abadía de Chiang Rai - Zee Nunew

9 La Abadía

White no se encontraba en casa, y no volvería hasta la semana siguiente. Para su mala suerte, la familia Pruk quería salir en tres días, por lo que no le quedaba más opción que escribirle cuando este volviera a Bali. Nunew pensaba que, si este recibía una mala noticia, sería preferible que se la contara una cara amiga.

Por esas mismas fechas calculó que llegaría Tutor donde Mew y Gulf, por lo que le podría escribir también para felicitarlo.

Nunew no había disfrutado mucho de sus últimos viajes largos, y menos si una preocupación no dejaba a su corazón tranquilo. Tampoco se consideraba una persona mañanera, pero se había decidido salir bien temprano en la mañana.

Además, nuevamente le empezaron a insistir para ir al frente, esta vez con Zee, guiando a los caballos.

- Es una gran vista, no te la puedes perder, y estoy seguro que mi hijo disfrutará de la cálida compañía de un agradable doncel como usted durante un largo viaje.

Rápidamente, Zee parece haberse dado cuenta de la incomodidad que su padre estaba generando.

- El camino tiene tierra, y hay algunas partes con plantas que podrían golpearlo. Además, un doncel como él no debe exponer su bella piel al sol - le intentó defender, pero rápidamente su padre sacó un quitasol de mano.

- El carro es pequeño, solo caben dos, y yo tengo asuntos pendientes con Nat, por lo que queda así arreglado.

El padre de la familia tenía un tono algo brusco para hablar, y su mirada siempre era profundamente fría. A Nunew llegaban a darle escalofríos al verlo, tenía la impresión de que el hombre estaba siempre enfadado, creando un aura algo incómoda a su alrededor.

El señor Pruk no desistió de su idea, y fue con Nat en el carro, mientras que Nunew se volvió a sentar junto al jinete. El varón le ayudó a subir al carro, y empezaron el viaje. Los primeros minutos de viaje fueron silenciosos, Nunew estaba seguro de que este carro era todavía más alto que el de Perth, y no le gustaba para nada.

- Si el problema es el traqueteo del viaje, - comentó Zee interrumpiendo el silencio - yo le puedo prometer hacer un viaje tranquilo. Si el problema es la altura, le puedo mostrar bellos paisajes para que se distraiga. Si el problema es la compañía, nos podemos quedar en silencio las próximas horas. El sol y las plantas las ha resuelto mi padre con el quitasol. ¿De qué manera puedo hacer más agradable su viaje entonces?

New rió un poco, Zee era siempre un caballero con él.

- El movimiento del carro desde tan alta altura me da algo de miedo, nunca había viajado de esa forma antes de llegar a Bali.

- Sus padres cuidaron bien de usted entonces, es cierto que puede ser algo peligroso. Mas no deberá preocuparse, pues haré un viaje suave y tranquilo.

- Muchas gracias señor Zee. - El varón le sonrió cálidamente de vuelta, Nunew no podía entender cómo es que padre e hijo podrían ser tan diferentes en carácter y calidez.

- Tengo una buena noticia para usted, y una para mí. La buena noticia para mí, es que su negativa a subir no se debe a mi mala compañía, y podremos distraernos las siguientes horas de viaje con una agradable charla. La buena noticia para usted, es que estos caballos son mansos y tranquilos, el carro no se moverá mucho y podré mostrarle el paisaje hasta llegar a la abadía de Chiang Rai.

- ¿Cómo es? - Preguntó Nunew muy interesado.

- Muy antigua, la verdad solo hemos restaurado una parte, la cual convertimos en nuestro hogar. Lo demás está en obra de restauración todavía. Tiene más de 300 años, pero hace unos 70 años fue vendida a mi abuelo, mi padre empezó las remodelaciones apenas nació Nat. Fue idea de mi madre, pero ella falleció pocos años después, y las obras han ido algo lento desde entonces.

- Debe ser un lugar con mucho sentimiento para usted - Zee asintió dándole la razón - Tengo mucha emoción, casi puedo verla, me preguntó si será como en los libros, con fantasmas, vampiros y pasadizos secretos.

- Claro que sí, ha habitado el peor de los vampiros en ese lugar.

Nunew se asustó.

- ¿De verdad? No juegue conmigo por favor señor Zee. - Pero Zee solo dió una alta carcajada.

- Creo que el que está jugando conmigo es usted señor Chawarin...

Nunew quedó algo confundido... ¿Estaría de verdad embrujada la abadía?

Nat ya le había comentado que él nació en la misma abadía, y Zee le confirmó que su madre dirigía las obras de restauración. Si su madre había muerto poco tiempo después del nacimiento de Nat, ¡Eso significaba que murió en el mismo edificio! Pensó, por un lado, que eso significaba que al menos había muerto en la tranquilidad de su hogar, pero las obras no estaban terminadas... ¿Y si su alma continuaba en el lugar intentando terminar esa tarea? ¡Todos saben que los espíritus, para ser libres, deben terminar todos sus asuntos pendientes en el mundo humano!

- Mire a la izquierda - Zee interrumpió sus penosos pensamientos - La ciudad de Bali se ve muy pequeña, y esta es la visión más amplia que tendremos del mar.

- Es hermoso

Se olvidó por completo del asunto ante tan maravillosa vista, y muy feliz de compartirla con la más agradable compañía.

- Quiero que por favor disculpe a mi padre. - Zee volvió a ponerse algo serio - A veces puede ser algo intimidante por estar demasiado metido en sus ideas. No es elegante crear ese nivel de insistencia para que me acompañes.

- No sé preocupe señor Zee, no fue una molestia, el viaje ha sido tranquilo, y ya no tengo tanto miedo.

Zee le sonrió, y continuaron su camino, el cual duraría varias horas. Salieron temprano en la mañana, descansaron en un pueblo para almorzar y llegaron al condado de Chiang Rai durante el atardecer.

Desde unos kilómetros de distancia, Nunew pudo ver ante él la gran abadía de la familia Pruk. Hermosa, potente, muy antigua de estilo gótico. Era exactamente como había imaginado que serían ese tipo de lugares. Espectacular y misterioso. No podía esperar para investigar los pasillos, pasadizos secretos, salones y cuartitos.

- Es magnífico - le comentó a su acompañante, pero lo único que recibió de vuelta fue su sonrisa.

Una vez en casa fue recibido por el servicio, quieres llevaron su equipaje.

- Te acomodamos en unos de los cuartos de invitados. Por las remodelaciones está algo desordenado, pero la cama es cómoda, y la vista muy agradable.

- La abadía es hermosa, muchas gracias por su invitación señor Pruk.

- Vayan a cambiarse, cenaremos en 30 minutos. - Señaló el señor Pruk con su acostumbrada brusquedad.

Los tres se apuraron a sus habitaciones. Nunew tenía toda la intención de llegar rápidamente al comedor, sin embargo, no pudo evitar perderse en su cuarto.

La cama tenía un bello dosel blanco, la noche se veía hermosa, y el ropero parecía sacado de sus más extravagantes fantasías, casi podía imaginar que llevaría a un calabozo secreto. También, bajo la ventana, había un viejo baúl, quería abrir y ver qué había allí. Sin duda sería algo asombroso, cómo los planos ocultos de la casa, o cartas de un amante prohibido de las viejas generaciones.

Decidió dejar ese deleite para más tarde, pues ahora era primordial no disgustar al padre de los hermanos. 

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Mañana subo el segundo capitulo de la semana <3