Capítulo 45[ Incremento De Azucar]

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Sabía que debía temer, con cada paso que daba en la escalera más se acercaba a su muerte, no podía evitarlo cómo hombre que era debía enfrentar esto de frente sin excusas o lloros.

Desgraciadamente estaba sumamente nervioso, había llegado una hora más tarde de lo que había dicho a Himiko y seguramente ella estaría decepcionada o enojada, cualquiera de las dos no le gustaba nada.

Izuku- muy bien ahora lento... - murmuró abriendo la puerta con sumo cuidado

Inko- muy discreto cariño- para su desgracia su mamá junto con Himiko estaban cual ave de caza esperando a su presa

Himiko- I-zu-ku! - acusó al peliverde quien se puso serio

Izuku- calma Himiko aún podemos ver películas todos tres te parece? - trató de arreglar la situación cómo podía

Himiko- eso no arregla que rompiste tu promesa! - habló con un puchero enojada

Inko- es correcto hijo y por ello mereces un castigo- habló con gracia, la rubia había planeado su perfecto castigo si es que no cumplía la promesa

Izuku- que clase de castigo? - tembló pensando en lo que podía ser

Himiko- siéntate! - el chico cerró la puerta, se quitó sus zapatos y se sentó frente a la chica Adorablemente enojada

Izuku- y ahora? - la chica se agachó a su altura- Himiko?

Himiko- esto te mereces! - le jaló las mejillas con fuerza antes de lanzarse al pecoso golpeado con suavidad su esponjoso cabello

El día después de aquella cita las chicas se reunieron en la casa de Kyoka, necesitaban comenzar a registrar los avances de su experimento y poner en práctica ciertas cosas para evitar ese punto de enamorar chicas a diestra y siniestra, lo malo es que la chica que debía hablar simplemente estaba encantada leyendo un libro.

Kendo- Yaoyorozu-san no es por ser impaciente pero... - no quería ser la ansiosa por esto

Mina- que rayos pasó en su cita?! -dijo con emoción, fuera de hacer lo posible para evitar que el chico enamore a todas cuanta se cruce estaba el hecho de divertirse al lado del pecoso

Momo- no creo que sea muy interesante para ustedes, es algo más de Midoriya-san y yo- dijo muy animada

Ochako- aún así necesitamos saber, cómo se comporta en un ambiente romántico? - las chicas se agruparon mientras la pelinegra hacía memoria

Momo- no es tan diferente la verdad, siguió siendo amable y caballeroso, quizá algo más centrado en el hecho de divertirse al lado de alguien, no se más cómo describirlo- además del hecho que se pasaron horas hablando de libros, escritores y corrientes de pensamiento- salvo por eso se esforzó por verse mejor de lo normal

Kyoka- se nota que la pasaron bien- la pelinegra asintió con una sonrisa tímida en su rostro- oh vamos no te avergüences, también está bien que te diviertas, es parte de la experiencia

Mina- lo dices por experiencia? - se burló de su amiga quien le miró con mala cara

Momo- en realidad... Midoriya-san me dijo que también era su primera cita- dijo avergonzada de haber robado algo así de importante

Ochako- awww que tierno! - chilló de emoción

Kendo- así que sólo tenemos que se esfuerza por vestirse bien y que se divierte, me pregunto que pasará en nuestra cita... - murmuró a la nada pues ella era la siguiente

Mina- tienes que sacar todas tus armas para ver cómo actua Kendo-chan! - animó la pelirrosa con alegría

Kendo- también será mi primera cita así que no esperen mucho- avisó a lo que sus amigas suspiraron, no iba a salir bien...

Toda la semana estuvieron planeando la mejor manera de sacar información, tenían que siempre estar atentas a cualquier mínimo movimiento del peliverde en la cita, no iban a espiar a Kendo dado que les sería sumamente incómodo, aún así la pelinaranja estaba bastante lista para su cita.

Izuku- Kendo-san! - el sábado de esa semana quedaron en verse en la estación de trenes para ir a quien sabe dónde

Kendo- hola Midoriya-sa... - quedó con las palabras en la boca al mirar al chico que lo único que cambiaba era la chaqueta negra que usaba, tal parecía que a la pelinaranja le encantaba

Izuku- estás bien Kendo-san? - se acercó a la chica con preocupación la cual reaccionó

Kendo- completamente bien, sólo no esperaba que te visiteras tan diferente- el chico le miró con curiosidad, era exactamente lo que usaba normalmente sólo que con diferente chaqueta- cómo sea hay un lugar al cual me gustaría ir a tu lado hoy- habló tratando de verse cómo la de siempre

Izuku- seguro, cualquier cosa a tu lado es increíble por muy tonta que pienses que sea- sonrió inocente a la chica que sentía el calor acumularse en sus mejillas

Kendo- entonces andando- tomó al chico de la mano y lo guió cómo niño pequeño hacia un tren

Izuku- por cierto, te queda bien el azul resalta tus ojos perfectamente- halagó a la chica quien sintió sus mejillas volverse rojas nuevamente

Kendo- gracias... - ella contrario a lo de siempre llevaba una camisa azul algo pegada al cuerpo que claro la hacia resaltar si no fuera por su chaqueta algo grande para ella

Ella tenía claro lo que quería hacer, no tenía a muchos para ir con ella a dónde iban principalmente porque sus amigos estaban ocupados con tareas los muy vagos, había algo en el norte de Musutafu que la estaba llamando con mucha fuerza y era algo que no hacía desde niña y era nada más y nada menos que...

Izuku- Go karts! - miró con emoción el lugar

Kendo- espero no te importe, hace mucho no venía y... - creyó que el pecoso le gustaría algo más normal

Izuku- es una broma? Nunca eh montado uno! Kendo-san tienes que enseñarme todo lo que sabes! - habló cual niño emocionado haciendo sonreír a la chica

Kendo- primero vamos a entrar y allí te explicaré las cosas te parece? - el peliverde asintió con emoción

No era lo que esperaba la verdad, Izuku parecía un chico completamente relajado dando vibras que lejos de gustarle la velocidad la odiaría pero aquí estaba cómo niño pequeño en un go kart a punto de dar su primera carrera al lado de la pelinaranja qué sinceramente no espero volver allí luego de tantos años.

No tuvo tiempo de enseñarle técnicas al pecoso, sólo lo principal para no chocar con una pared u otro kart que se use, la verdad no tenía mucha fe en que pudiera controlarlo bien, a ella le costó mucho el hacerlo en aquel entonces y sinceramente esperaba que su amigo también le costara...

Kendo- sexto lugar nada mal para tu primera carrera- miró al pecoso quien no parecía querer bajarse del kart

Izuku- gracias, eh estado entrenando con el auto del tío Masaru para sacar mi licencia eso me ayudó un poco aunque si es un poco Incontrolable- movió un poco el manubrio para hacerlo notar

Kendo- allí está la gracia en que no tengas todo el control, le da un toque divertido- sonrió al chico quien miró con estrellas en los ojos a la chica

Izuku- te parecen dos de tres? - la chica alzó una ceja con interés- quien pierda paga las hamburguesas

Kendo- trato! - corrió hacia otro kart junto con el casco para comenzar otra carrera

La victoria fue para Kendo, tenía mucho entrenamiento con los karts por lo que vencer a un inicado fue juego de niños o no tanto en realidad el pecoso tenía supo dar pelea a su manera absurda y tonta que de alguna manera le hizo ganar una carrera pero por lo demás ganó ella esa hamburguesa.

Izuku- me siento algo estafado... - habló por lo bajo

Kendo- oh vamos fue divertido y justo no seas mal perdedor- sonrió al chico antes de dar otro mordisco a la hamburguesa

Izuku- oh no lo digo por la carrera, eres increíble al volante y sinceramente verte en una carrera es asombroso en especial por ese brillo que te da en los ojos cuando estas feliz- la chica se volvió roja por ese halago- lo digo por mi hamburguesa, esto no es pavo, es pollo- habló deprimido

Kendo- e-entiendo... - con eso la cita concluyó

trabajo a medio tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora