Capítulo 89[ Temporada De Brócoli]

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Su llegada a Japón fue bastante normal, su parte del aeropuerto estaba perfecto para su llegada, su auto estaba en perfecto estado y tuvo de los mejores recibimientos en mucho tiempo, incluso pudo disfrutar de un trago de whisky en su trayecto a casa, parecía que sería un momento de paz y tranquilidad, quizá podría ir con su hija a algún lado y darle uno que otro regalo por ser la niña más buena que puede haber en la tierra, tendría que pensar en el mejor regalo para ella y su esposa en cuanto piense algo para darles, por el momento se deleitará con llegar con quienes ama.

- cariño ya llegué! - anunció al entrar en la mansión

- bienvenido mi amor- su esposa se veía muy alegre lo cual era una mala señal

- ahora que sucedió? - su esposa soltó una risita bastante adorable e inocente para la situación- querida? - su esposa se veía muy alegre

- mi amor no te apresures si? - le dio un beso en la mejilla que no mejoraba la situación

- que pasa? No me voy a enojar enserio- su esposa no le creía nada pero debía decirle

- mañana vendrá el novio de Momo y... - su marido hizo una mueca de psicópata que tanto aterraba a casi todos- no quiero que des una mala impresión si? En verdad quiere ir enserio con ella así que por favor no seas tan duro- le dio un beso más tratando de calmar

- o créeme lo trataré muy bien... - esa sonrisa no le daba buena espina a su esposa- sólo charlaré con él de hombre a hombre, incluso hablaremos en el patio para que confíes más...

- no confío nada, no importa dónde hables con él- con otro beso fue hacia la escalera- si no eres tan duro con el tal vez podamos... Divertirnos toda la tarde... - miró coqueta a su marido quien pareció a gusto con ese trato

Tenía sábado y domingo para conocer a los padres de sus parejas aprvechando que los padres de Ochako iban a ir para un trabajo que tenían, la suerte parecía estar del lado de Izuku quien trataba que saldar con este asunto rápido y consistente, no iba a huir ni nada de eso por muy asustado que esté.

Así que a primera hora del día y tal cómo pidió Momo allí estaba frente a la mansión Yaoyorozu con demasiados nervios para lo iba a pasar más con el valor de enfrentar cualquier cosa.

- el señor lo espera por aquí- uno de los trabajadores del lugar guió al peliverde por el complejo

Una mansión sumamente grande y demasiado excéntrica para su gusto con mucho espacio que sabían llenar con obras de arte (principalmente de la familia y Momo), esculturas de alto valor y muchas alfombras bastante antiguas, atravesaron la mansión para llegar al jardín trasero que más parecía un bosque encantado que otra cosa con hermosas flores adornando todo y grandes árboles hasta dónde alcanzaba la vista y claro en una zona que podía decir despejada estaba el hombre que debía temer junto a su esposa e hija la cual se veía hermosa.

Izuku- Momo! - corrió hacia su novia la cual le miró con cariño antes de ser capturada por los fuertes brazos de su novio

Momo- Izuku... - sonrió radiante a su novio quien no parecía querer soltarla

- vaya vaya... - la madre de su novia sonrió con gracia mirando la escena mientras su esposo parecía bastante indignado

- ejem... - el pecoso miró a su suegro por lo que soltó a la chica más no dejó de tomarle la mano- así que tu eres quien se cree lo suficiente para mi niña eh? - intentó intimidar al peliverde quien parecía en su mundo junto a su niña

- aww aue adorables! - chilló mirando cómo su hija le enseñaba de plantas a su novio

- querida por favor más seriedad! - su esposa ni le hizo caso sacando cuanta foto pudiera de la pareja- esto será eterno así que podrías ir con Momo adentro? Quiero charlar con él a solas- su mujer le miró le sonrió y fue por su hija

- sólo no hagas una locura si? - su esposo parecía muy serio para aceptar ello

Con su hijita y esposa fuera de estw hipotético tablero podía continuar con su charla a solas con el peliverde, lo iba a asustar para hacer salir sus verdaderas intenciones, no quería que un idiota venga por su hija, no era tan iluso cómo para ver cuanto había crecido Momo y que influencia tenía sobre los chicos, por lo cual no la iba a entregar así de fácil.

- dime Izuku... Tu que sabes de cazar? - una vez slgo más calmado comenzó con su plan

Izuku- depende de que estamos hablando- su suegro le miró algo confundido- si hablamos de cazar cómo método de supervivencia y el impacto qué tuvo en la historia humana puedo decirle muchas cosas pero si habla de cazar cómo deporte me parece sumamente horrible- no le agradaba ningún tipo de sufrimiento animal y no lo iba a soportar de nadie

- no te gusta la idea de tener un arma en tus manos y salir por presas? - tomó un rifle de caza, uno de los que más le gustaba de su colección y comenzó a limpiarlo- la caza es un deporte bastante honorable si me permites decir, dos combatientes qué buscan las mejores presas, tener puntería, esperar o ir directamente, es algo sumamente interesante... - apuntó a el gran bosque privado esperando alguna respuesta por parte de su yerno

Izuku- la caza es horrible y nada de lo que diga puede hacerme cambiar de parecer- habló con seriedad- no me importa lo que piense señor Yaoyorozu, es una práctica horrible que hace sufrir a un pobre animal- parecía decidido

- puedo llegar a entender tu punto- dejó de apuntar y comenzó a caminar con el rifle en manos simplemente jugando con el- quería que entendieras que considero a Momo mi más grande, creación, proyecto y por mucho mi princesa adorada...- miró al chico quien estaba bastante serio- no la daría a alguien que le tiemble el pulso a la hora de disparar un arma cómo en la caza... - sonrió algo arrogante al chico- tu no pareces capaz de eso

Izuku- porque no lo soy y me enorgullece eso- desafió a su suegro- con todo el respeto que puedo llegar a tenerle, Momo me eligió sobre todos sus lindos y perfectos compañeros, literalmente pudo tener al hijo del número dos y me prefirió a mi, un simple plebeyo que sabe hacer café, eso ya dice mucho... - parecía muy serio con esto

- tienes bastante valor eh? - siguió girando tratando de intimidar al chico- tanto cómo para tener a más de una chica contigo... - cuando su niña se lo contó casi destruye la casa por ir por este idiota aue se creía capaz de jugar con su hija- dime... - apuntó a la cabeza del chico apenas moviéndole- porqué debería no disparar ahora?

Izuku- cree que me da miedo tener un arma en la cabeza?! - tomó el cañon del arma y lo puso en su frente- lo siento pero no me asusto tan fácil... Momo me eligió y eligió este camino porque soy tan idiota que me enamoré de más de una- no parecía mejorar la situación- así cómo soy tan idiota de ir a cualquier parte por ellas... No quiero que lloren y escoger a sólo una les rompería el corazón y también me quebraría el alma hacer llorar a quienes amo... - de sólo pensarlo le hervía la sangre- si tengo que sobrevivir a esto lo haré con todo gusto! - el suegro y el yerno se miraron seriamente en una tensión intensa

- en verdad estás loco... - retiró el arma y sonrió- lo bastante loco cómo para desafiarme... - soltó una risa bastante escandalosa- tienes lo que hay que tener chico...

Izuku- eh? - su suegro simplemente puso una mano en su hombro reteniendo su risa

- si tienes el suficiente valor para enfrentarte a mi, que tengo mucha influencia en la sociedad, puedes con cualquier cosa...- tomó al pecoso de los hombros y sonrió- me alegro que Momo encontrara a alguien cómo tu...

Izuku- gracias señor- el tipo sonrió a su yerno, momento en el cual madre e hija salieron una más enojada que otra

Momo- papá te pasaste! Cómo se te atreve amenazar a Izuku así! - arrastró la cabeza de su novio a sus pechos momento en el cual hizo cortocircuito- lo asustaste!

- yo... - miró a su esposa esperando ayuda pero ella simplemente volteó la mirada

- te pasaste querido y por eso mereces un castigo! - señaló seria a su marido el cual quedó de piedra- y por casi matar a nuestro querido yerno, no tendrás mimos de los que te gustan por dos semanas! - su esposo parecía un fantasma con esa noticia por lo que sólo hizo una cosa...

- NOOOO! - el grito se escuchó muy lejos, un hombre había caído ese día...

trabajo a medio tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora